V¨ªa libre para la UE de varias velocidades

La Constituci¨®n europea, aprobada por los 25 jefes de Estado y Gobierno de la Uni¨®n Europea la noche del pasado viernes en Bruselas, ha dejado expedito el camino para la Europa de varias velocidades con el fin de evitar que los pa¨ªses y Gobiernos menos europe¨ªstas, como el Reino Unido, puedan frenar los avances en el proyecto de construcci¨®n europea. Grupos de pa¨ªses que deseen ir m¨¢s lejos y progresar m¨¢s r¨¢pido tendr¨¢n la puerta abierta para hacerlo en todos los terrenos, con las ¨²nicas excepciones de las ¨¢reas en las que la UE tiene competencias exclusivas, como la pol¨ªtica monetaria, la uni¨®n aduanera o la pol¨ªtica comercial com¨²n.

Es esa Europa a varias velocidades la que el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, y el canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der, han augurado reiteradamente como ¨²nica opci¨®n para lograr que, en una Uni¨®n Europea ya ampliada a 25 Estados y pronto a 29 o 30, no se produzca una par¨¢lisis provocada por el abuso del derecho al veto a la hora de que cada pa¨ªs defienda sus intereses vitales y, por tanto, resulte muy dif¨ªcil adoptar decisiones. El problema se ha puesto de relieve constantemente a lo largo de todas las negociaciones de la Constituci¨®n y, s¨®lo minutos despu¨¦s de ser aprobada la Carta Magna, fue evocado por Chirac y por el primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair.

Francia y Alemania consideran la f¨®rmula la ¨²nica opci¨®n para evitar una par¨¢lisis

As¨ª, Blair, que se declar¨® firme defensor del "Estado-naci¨®n", dijo estar satisfecho de haber frenado las ambiciones m¨¢s europe¨ªstas del eje franco-alem¨¢n: "Hemos conseguido todo lo que prometimos que ¨ªbamos a conseguir: veto en fiscalidad, defensa, seguridad social, pol¨ªtica exterior...". A la misma hora, Chirac, que se refiri¨® a la Uni¨®n Europea como "una federaci¨®n de Estados", reconoci¨® los frenos impuestos por Londres, "pero hemos impuesto al Reino Unido", a?adi¨®, "la norma para que podamos actuar m¨¢s r¨¢pido y m¨¢s lejos que los que necesitan m¨¢s tiempo".

Alud¨ªa de esta forma Chirac a la posibilidad abierta de crear esos grupos de pa¨ªses de vanguardia, denominados cooperaciones reforzadas, similares a los que la UE ya ha aplicado en el caso de la moneda ¨²nica europea (Reino Unido, Suecia y Dinamarca no han adoptado el euro) o del espacio Schengen para eliminar las fronteras (Reino Unido e Irlanda no participan). El Tratado de Niza aprobado en 2000 ya abri¨® la mano para ampliar las posibilidades de crear m¨¢s cooperaciones reforzadas, pero las someti¨® a r¨ªgidas reglas y las prohibi¨® expresamente en ¨¢reas tan sensibles para la soberan¨ªa de los Estados como la pol¨ªtica exterior, de seguridad y defensa. Las trabas han sido ahora rebajadas y esa prohibici¨®n en seguridad y defensa ha sido eliminada.

El art¨ªculo I-43 de la Constituci¨®n europea se?ala que podr¨¢n crearse cooperaciones reforzadas para "impulsar los objetivos de la Uni¨®n, proteger sus intereses y reforzar su proceso de integraci¨®n", y que se pondr¨¢n en marcha "como ¨²ltimo recurso, en caso de que haya quedado sentado que los objetivos perseguidos por dicha cooperaci¨®n no puede alcanzarlos en un plazo razonable la Uni¨®n en su conjunto". El mismo art¨ªculo fija tres condiciones: que participen al menos un tercio de los pa¨ªses de la UE (hoy ser¨ªan nueve Estados), que la opci¨®n est¨¦ abierta a todos y que lo autorice el Consejo de Ministros de la Uni¨®n.

En los terrenos m¨¢s sensibles, como es el caso de la pol¨ªtica exterior, esa autorizaci¨®n deber¨¢ decidirse por unanimidad, con derecho a veto. No as¨ª en otros muchos terrenos como las pol¨ªticas econ¨®micas, medio ambiente, seguridad social o cooperaci¨®n judicial penal.

En este ¨²ltimo caso, de vital importancia para Espa?a por lo que afecta a la lucha contra el terrorismo, el Reino Unido impuso que se mantuviera el derecho al veto a la hora de que la Uni¨®n Europea apruebe leyes para que haya una definici¨®n com¨²n de los delitos graves y para que se apliquen penas similares en todos los pa¨ªses. La f¨®rmula para sortear esa l¨ªnea roja de Londres ha sido la siguiente: si en el curso de un a?o no hay acuerdo sobre una de esas leyes porque alg¨²n pa¨ªs se opone, un grupo de pa¨ªses (m¨ªnimo un tercio) que decida seguir adelante podr¨¢ hacerlo sin problema alguno.

Hay otra cl¨¢usula a?adida, bautizada como pasarela, para sortear las l¨ªneas rojas de Londres en estos terrenos: incluso en aquellos campos en los que la Constituci¨®n prev¨¦ el derecho al veto, los que participen en una cooperaci¨®n reforzada podr¨¢n decidir un¨¢nimemente tomar las decisiones por mayor¨ªa cualificada.

En Defensa, el ¨¢rea m¨¢s delicada, la f¨®rmula es algo diferente y se denomina cooperaci¨®n estructurada permanente. El art¨ªculo I-40, relativo a la pol¨ªtica com¨²n de defensa, se?ala expl¨ªcitamente que "los Estados que cumplan criterios m¨¢s elevados de capacidades militares y que hayan suscrito entre s¨ª compromisos m¨¢s vinculantes al respecto con miras a realizar las misiones m¨¢s exigentes, establecer¨¢n una cooperaci¨®n estructurada permanente en el marco de la Uni¨®n".

No se trata en este terreno de sortear a Londres, por la evidente raz¨®n de que una Europa de la Defensa es impensable sin la participaci¨®n del Reino Unido, pero s¨ª de avanzar m¨¢s r¨¢pido que lo que algunos pa¨ªses est¨¢n dispuestos a hacerlo. Los pa¨ªses que aspiren a estar en esta cooperaci¨®n estructurada se ver¨¢n obligados a desarrollar sus capacidades militares para participar en fuerzas multinacionales, sobre todo a requerimiento de Naciones Unidas. Tambi¨¦n tendr¨¢n que comprometerse a participar en la Agencia Europea de Armamento que se crear¨¢ en breve para mejorar esas capacidades militares, cooperar en investigaciones de uso militar y participar en programas conjuntos de adquisici¨®n de armamentos.

La principal condici¨®n que deber¨¢n cumplir los pa¨ªses que quieran sumarse a esta cooperaci¨®n estructurada consiste en que, antes de 2007, deber¨¢n contar con unidades de combate listas para desplazarse por sus propios medios de inmediato, en un plazo m¨¢ximo de entre cinco d¨ªas y un mes, con la capacidad aut¨®noma de mantenerse en la zona de destino entre 30 y 120 d¨ªas.

El Gobierno espa?ol de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero ya ha reiterado estas semanas su intenci¨®n de sumarse a todas las iniciativas europe¨ªstas que puedan producirse en la Uni¨®n, incluidas las cooperaciones reforzadas y estructuradas.