Emocionante fresco hist¨®rico

Hay que comenzar con un recordatorio: a pesar de sus tres horas y diez minutos de duraci¨®n, esta La mejor juventud, una de las pel¨ªculas m¨¢s emocionantes que nos han llegado de Italia en mucho tiempo, no es m¨¢s que la primera parte de un colosal fresco sociopol¨ªtico que recorre un arco temporal de casi cuarenta a?os de historia de Italia. Y lo mejor que se puede decir de esta primera parte no es balad¨ª: su metraje sabe verdaderamente a poco, el espectador se queda con la agridulce sensaci¨®n de que m¨¢s que querer, necesita ver la continuaci¨®n. Y es una pena que un filme tan trabajosamente realizado, tan impecablemente conducido por Marco Tullio Giordana llegue de puntillas, sin publicidad y sin soporte alguno que lo d¨¦ a conocer.

Un filme apasionante con el que se puede sufrir y llorar

Como tantos grandes filmes de la historia de cine italiano, desde Novecento a Una mujer y tres hombres o La familia, por poner tres ejemplos que podr¨ªan ser muchos m¨¢s, la historia se abre paso en la vivencia amistosa durante varias d¨¦cadas. Como en un cl¨¢sico como Rocco y sus hermanos o la reciente, y tan valiosa, Cos¨ª ridevano, de Gianni Amelio, los polos alrededor de los que se construye la trama son dos hermanos, tan bien avenidos como los de Amelio, aunque muy diferentes entre s¨ª. Y como no puede ser de otra forma, porque la voluntad del discurso lo hace imprescindible, los personajes principales y sus amigos son otros tantos vectores que empujan el relato hacia aquella dispersi¨®n geogr¨¢fica que preconizara con su obra el gran Roberto Rossellini: la mejor juventud habla de Italia, claro, pero tambi¨¦n de muchas peque?as, dispersas Italias, la de la pol¨ªtica y la de la psiquiatr¨ªa, la de la polic¨ªa y la de la solidaridad, la de la militancia y el d¨ªa a d¨ªa.

Cr¨®nica de una generaci¨®n de la que el propio cineasta forma parte (en su arranque, en 1966, los protagonistas tienen la edad de Giordana, nacido en 1950), el filme, no obstante, huye de la caracterizaci¨®n f¨¢cil: todos los personajes tienen su ocasi¨®n de profundizaci¨®n psicol¨®gica, incluso su misterio (el que m¨¢s, Giorgia, la esquizofr¨¦nica de la que secretamente se enamoran los dos hermanos cuando son adolescentes), al tiempo que sirven a un dise?o general m¨¢s amplio. As¨ª, por el filme discurre la gran cr¨®nica -las inundaciones de Florencia en 1967, el convulso invierno de 1968, el comienzo del terrorismo de las Brigadas Rojas, los asesinatos de Bolonia en 1977- y la vivencia personal, la lucha por la modernizaci¨®n italiana hecha desde las filas del progresismo y las peque?as vivencias inexplicables (las que protagoniza el complejo personaje del hermano polic¨ªa y amante de los libros).

Es un filme apasionante, con el que cabe discrepar -de hecho, incluye en su propio dise?o la discrepancia: jam¨¢s oculta desde d¨®nde est¨¢ hablando-, sufrir, llorar y hasta amargarse, y sobre el cual habr¨¢ que volver porque, hay que repetirlo, s¨®lo hemos visto su primera mitad. Pero resulta a la postre una util¨ªsima herramienta para entender de verdad la Historia con may¨²sculas de un pa¨ªs sometido a un cambio espectacular. Y para no olvidar de d¨®nde viene el oscuro presente.