Movilizaci¨®n contra la delincuencia
300.000 personas reclaman en M¨¦xico acciones contra los extorsionadores
La gigantesca manifestaci¨®n contra la delincuencia y la impunidad desarrollada ayer en la capital de M¨¦xico fue encabezada por deudos de los secuestrados y asesinados y familiares de las muertas de Ciudad Ju¨¢rez. Rescatemos a M¨¦xico, anim¨® la pancarta del arranque. Unas 300.000 personas participaron en la que probablemente fue la mayor marcha organizada por la sociedad civil. Imparable la rabia, espoleada por el reciente asesinato de dos hermanos de origen espa?ol pese al pago de un rescate de medio mill¨®n de d¨®lares, el Gobierno y el Congreso optaron por apoyar la marcha. El reciente secuestro, violaci¨®n y asesinato de una chica de 26 a?os fue ya inaguantable.
Los diez mandamientos redactados por los organizadores del aldabonazo ciudadano, cerca de 80 grupos, establecen que ninguna denuncia podr¨¢ archivarse sin el consentimiento de la v¨ªctima, y piden profundas reformas y purgas policiales, judiciales y penales. El dec¨¢logo fue trasladado a las autoridades. El hartazgo frente a una impunidad cercana al 99%, la impotencia ante la sa?a y el atrevimiento del hampa carburaron la concentraci¨®n, mucho m¨¢s numerosa que la movilizaci¨®n del a?o 1998. "Por fin reaccionamos. Estoy emocionada", subrayaba Carmen D¨ªaz, a cuyo hijo, de 14 a?os, le cortaron las orejas para apremiar el pago de rescate.
El alcalde atribuye la marcha a maniobras contra sus aspiraciones presidenciales
La c¨²pula empresarial, los movimientos contra la delincuencia y miles de voluntarios prepararon una concentraci¨®n que discurri¨® por las principales avenidas de Ciudad de M¨¦xico, una metr¨®poli de m¨¢s de 20 millones de habitantes, jaqueada por el delito. Adentrarse entre los manifestantes, escuchar sus razones, signific¨® ayer una inmersi¨®n en la desesperanza y la rabia. Todos quer¨ªan contar su caso.
"A m¨ª me asaltaron cinco veces. Denunci¨¦ dos, pero nada. En uno, enfadados porque no consiguieron el dinero que esperaban, me dieron un balazo en el pie", se?ala Arturo Garc¨ªa, consejero del Club Espa?a. Directivos de centros regionales defendieron a la embajadora espa?ola, Cristina Barrios, apercibida por la canciller¨ªa mexicana por "no utilizar los canales diplom¨¢ticos" para comunicar la preocupaci¨®n de la colonia. "Dej¨¦monos de tecnicismos. Cumpli¨® con su obligaci¨®n con nosotros", subrayaron algunos de los presentes en la avenida de la Reforma, rumbo hacia El Z¨®calo, la plaza principal de M¨¦xico.
Ejecutivos de agencias de viajes pidieron a sus colegas de Espa?a y de otros pa¨ªses que no magnifiquen el problema, que no asusten a los potenciales turistas hacia un pa¨ªs sobrado de patrimonio cultural y f¨ªsico, mayoritariamente hospitalario y en paz, agregaron, y comprometido contra las lacras. Pero las estad¨ªsticas de la cr¨®nica negra, reunidas en titulares y cruces, espantan y tienen un efecto expansivo. El secuestro de 3.200 personas en el a?o 2000 depar¨® a las mafias 900 millones de d¨®lares de bot¨ªn, seg¨²n un estudio de la C¨¢mara de Diputados. El pasado a?o sufrieron la misma suerte medio millar, admitidos oficialmente, y m¨¢s de 3.000, de acuerdo con datos de empresas de seguridad.
El populista alcalde de la capital federal, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, del opositor Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD), izquierda, atribuy¨® la movilizaci¨®n a maquinaciones de la derecha contra sus aspiraciones presidenciales en el a?o 2006. "Es indignante. Su paranoia no tiene l¨ªmites", protestaba la madre de un joven asesinado en el a?o 2001. Los supuestos conjurados, seg¨²n el regidor, quieren presentar a Ciudad de M¨¦xico como una jungla ingobernable. El ex alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, cobr¨® cuatro millones de d¨®lares por un recetario de 146 puntos que fracas¨®. S¨®lo entr¨® en vigor el bot¨®n del p¨¢nico instalado en los microbuses de algunas l¨ªneas para alertar sobre su asalto.
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