El alto precio del Alzheimer
Un estudio cifra en 13.807 euros anuales el coste de la enfermedad en fase avanzada
El incremento de la poblaci¨®n afectada por la enfermedad de Alzheimer -la demencia m¨¢s frecuente en Espa?a- requerir¨¢ en los pr¨®ximos a?os la puesta en marcha de un extraordinario volumen de recursos sociosanitarios. Un reciente estudio de la Unidad de Valoraci¨®n de la Memoria y las Demencias (UVaMiD) del Hospital Santa Caterina de Girona, coordinado por el doctor Secundino L¨®pez-Pousa, demuestra que el coste total de la atenci¨®n a los enfermos se incrementa con el grado de deterioro cognitivo y funcional. De todos los par¨¢metros analizados en el estudio Coste de la enfermedad de Alzheimer y gravedad del deterioro cognitivo y funcional -en el que se ha traducido a cifras econ¨®micas todas las variables-, la familia es la que soporta el mayor peso de una enfermedad que se inicia de manera insidiosa y evoluciona hasta un estadio que requiere atenci¨®n permanente.
La familia asume el 92% de los costes desde la aparici¨®n de la enfermedad
"La atenci¨®n debe tener en cuenta el coste del diagn¨®stico y el tratamiento, pero tambi¨¦n la carga econ¨®mica y emocional de pacientes, familiares y proveedores de asistencia sanitaria. El coste que soporta la familia es superior al 75% del total", explica L¨®pez-Pousa. Mientras que el coste anual total de los pacientes con demencia en fase inicial fue de 5.032 euros, los enfermos en la fase intermedia necesitaban recursos y atenciones valoradas en 7.703 euros. En la fase avanzada, el coste total por a?o asciende a 13.807 euros. La muestra de estudio estuvo formada por 417 pacientes con una edad media de 75,2 a?os.
La enfermedad de Alzheimer se caracteriza pon un deterioro cognoscitivo y funcional progresivo. En una primera fase se pierde la memoria reciente y se observan dificultades para actividades de la vida diaria fuera del entorno familiar -manejo de dinero, trabajo, relaciones sociales-. Despu¨¦s, aparecen alteraciones en el lenguaje y dificultades para pasar del pensamiento a la acci¨®n o el reconocimiento visual. En este estadio los enfermos tienen a menudo s¨ªntomas depresivos o man¨ªas como el ocultamiento de objetos, piensan que se les quiere hacer da?o, quitarles cosas o intentan entablar conversaciones con personajes que aparecen en la televisi¨®n. En la ¨²ltima fase, los enfermos tienen un lenguaje espont¨¢neo reducido, no reconocen a sus familiares y evolucionan hacia la desconexi¨®n total del entorno en la etapa terminal. En esta fase tienen dependencia total para las actividades b¨¢sicas de la vida diaria. Los estudios epidemiol¨®gicos indican que la prevalencia de la enfermedad aumenta con la edad. Si a los 65 a?os hay un 1,5% de casos, en pacientes mayores de 90 a?os la enfermedad afecta ya a entre el 40% y el 50% de la poblaci¨®n. "El n¨²mero de casos en Espa?a, diagnosticados o no, oscila entre los 400.000 y los 800.000. El coste total del gasto sociosanitario y las horas de atenci¨®n de los familiares se situar¨ªa en torno a los 4.500 millones de euros anuales", asegura L¨®pez-Pousa.
Un paciente con enfermedad de Alzheimer costar¨¢ unos 84.957 euros desde que es diagnosticado hasta que fallece. La familia asume el 92% de estos costes. El estudio ha constatado que el 69% de los cuidadores son mujeres y en el 15% de los casos est¨¢n bajo tratamiento con psicof¨¢rmacos. Este valor dobla el consumo de estos f¨¢rmacos de otros pa¨ªses europeos y constata que la atenci¨®n informal del paciente -habitualmente por parte de un familiar- est¨¢ relacionada con mayores problemas de salud.
Los actuales tratamientos no curan la enfermedad, aunque lentifican su progresi¨®n, retrasando la p¨¦rdida de la memoria, del habla y de otras funciones mentales. No existen cifras que demuestren que los f¨¢rmacos hayan disminuido el coste global, aunque pueden retrasar el ingreso en residencias. Otro estudio realizado en Girona por la UVaMiD, que participa en ensayos cl¨ªnicos internacionales para evaluar la eficacia de f¨¢rmacos en fase de desarrollo, observ¨® que el consumo regular de caf¨¦ podr¨ªa ser un factor protector contra la enfermedad, hallazgo tambi¨¦n observado en un estudio canadiense. La UVaMiD realiza unas 600 primeras visitas anuales y otras 5.000 de seguimiento.
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