?Qui¨¦n es Jos¨¦ Mar¨ªa Zumalac¨¢rregui?

El libro arranca con una explicaci¨®n directa y sucinta del objetivo y funci¨®n de la obra escrita por los propios autores: "...es un diccionario que recoge el pensamiento de los economistas espa?oles, la recepci¨®n de los economistas extranjeros y los debates m¨¢s relevantes sobre temas econ¨®micos celebrados en Espa?a entre los siglos XVI y XX. Es una herramienta ¨²til para el investigador, el historiador, el economista y el p¨²blico en general que desee encontrar un dato concreto o profundizar en un tema determinado dada la amplia bibliograf¨ªa recogida en el mismo".

El texto es esto, y mucho m¨¢s. No es s¨®lo ¨²til, es adem¨¢s interesante, despierta la curiosidad y es m¨¢s que probable que quien empiece leyendo uno de los debates no pueda resistir abordar otro. Los textos que explican sint¨¦ticamente los debates, as¨ª como las minibiograf¨ªas de los personajes que los protagonizaron, son tambi¨¦n concisos y claros.

En lo que respecta a esos debates econ¨®micos, el libro sintetiza muy bien el origen, desarrollo y actualidad de los mismos, y al mismo tiempo los relaciona con otras discusiones sobre temas sociales y culturales paralelos, a lo largo de 500 a?os de historia de Espa?a.

En el tratamiento de algunos temas, como el del Estado de bienestar, el lector puede llegar a sentir que el libro se queda un poco corto a la hora de desarrollarlo, teniendo en cuenta que es uno de los debates m¨¢s largos e interesantes en la historia econ¨®mica europea que a¨²n permanece abierto. Pero los autores han preferido compensar la breve rese?a con una extensa lista de obras a las que el lector puede recurrir si quiere saber m¨¢s sobre la cuesti¨®n. En esto los autores cumplen lo que prometen en el pr¨®logo, ellos s¨®lo dan la primera pista, el resto de la investigaci¨®n depende del interesado.

En otros temas, como el de la creaci¨®n de las facultades de Ciencias Econ¨®micas y Empresariales en Espa?a, lo que cuenta el libro es ya una historia bastante completa, con respuestas de un elevado trivial, que suelen despertar la curiosidad. ?Sab¨ªa usted que el catedr¨¢tico Jos¨¦ Mar¨ªa Zumalac¨¢rregui fue el primer economista importante que reclam¨® la fundaci¨®n de una facultad de ciencias econ¨®micas en Espa?a all¨¢ por los treinta? La iniciativa de Zumalac¨¢rregui, y c¨®mo ¨¦sta se hizo realidad, es una historia en s¨ª misma, y aunque contada brevemente, satisface. Y si no, el lector tiene la misma alternativa que en el caso de otros debates: una escogida lista de libros a los que puede acudir para profundizar en el tema.

Otra de esas historias curiosas que pueden hallarse en el libro es la de la recepci¨®n de la obra de John Maynard Keynes entre los a?os 1920 y 1936, periodo en que se publican las obras del autor en espa?ol. Es muy interesante leer acerca de c¨®mo los economistas espa?oles mastican y digieren las revolucionarias teor¨ªas de Keynes.

El Diccionario de pensamiento econ¨®mico en Espa?a es, por tanto, m¨¢s que ¨²til, es interesante y ¨²nico. Por un lado, cumple ampliamente su cometido a la hora de explicar la vida de un economista influyente, el impacto de un debate econ¨®mico y dar una salida a quien quiere m¨¢s a trav¨¦s de una buena gu¨ªa de autores y ensayos.

Por otro lado, no es s¨®lo un diccionario, es un libro de referencia que aborda temas econ¨®micos de forma ¨¢gil y entretenida y con seriedad. En algunos debates tratados, el texto despierta un inter¨¦s que luego debe ser saciado con otros libros, mientras que que en otras cuestiones, lo que cuenta puede ser suficiente para satisfacer la curiosidad.

Tal vez por esto, lleguen a valorar m¨¢s el diccionario quienes no son economistas, y se topan en sus estudios con alg¨²n tema econ¨®mico y necesitan saber r¨¢pidamente de qu¨¦ se trata. Aunque seguro que para los economistas siempre ser¨¢ ¨²til tener este libro para refrescar la memoria.