No se quede con las calabazas
Como genuino representante del g¨¦nero humano puedo asegurarles y les aseguro que, si hace unos d¨ªas critiqu¨¦ los cursos de verano, mi magn¨ªfica inconstancia e inconsistencia me impulsan a montarles hoy uno. Pero, tranquilos, no har¨¢ falta que se inscriban ni que se desplacen del lugar donde en este mismo momento est¨¢n remoj¨¢ndose los pies, porque ya tienen entre sus manos, queridos lectores y electores, su cita anual con el bien decir. Empezar¨¦ con un libro en el que rivalizan el peculiar y alambicado estilo del autor con los ¨ªmprobos esfuerzos del traductor para hacerlo m¨¢s absurdo, como bien lo muestra esta pincelada: "La gente imaginaba sus sentimientos a partir de contactos cinem¨¢ticos", y lo corrobora esta otra: "Hab¨ªa tensiones estil¨ªsticas entre las dos instituciones", porque no se crean que habla de academias de la lengua sino de los roces entre la Gestapo y la SS. Pero como todo se contagia, un restaurante anunci¨® sin desmontarse: "Especialidad en rabo y atenci¨®n al cliente". Y un peri¨®dico: "Los maridos matan m¨¢s de lo normal", por no mencionar al presentador de tele que dijo: "Muchos fieles se santificaron", queriendo decir que se santiguaron.
El aturullamiento puede llevar a cosas como ¨¦stas: "Ning¨²n profesor ni estancia pol¨ªtica se ha dirigido a m¨ª" (?querr¨ªa que le llamara el Gabinete?); "Hallan un cad¨¢ver sin alguno de los ¨®rganos" (?); "Es un queso que se elabora en C¨¢ceres con leche de oveja menina" (?si Vel¨¢zquez levantara la cabeza!) o "Algunos de los caminos est¨¢n pr¨¢cticamente salvajes" (a ver si van a empu?ar las azagayas...). Y, hablando del campo, qu¨¦ me dicen de aquel que propon¨ªa el siguiente m¨¦todo para recuperar praderas: "Har¨ªan falta tiempo y labores culturales"; ?tratar¨ªa de desasnarlas? Hombre, eso no le vendr¨ªa mal al que prefiri¨® a tropezar dos veces en la misma frase: "Se trata de embases de larga longitud" porque, de verdad, tan larga parece la longitud como la ortograf¨ªa de la que se sirve con tant¨ªsima largueza. Claro que basta que uno quiera ponerse puntilloso para que le salga el tiro por la culata: "Las figuras realizadas por Luis Eraso y sus compa?eros son de tama?o original" ?y tanto! Aunque, para original, aquel titular: "Ni?os nerviosos y franceses", que permanece oscuro aun despu¨¦s de saber que se refer¨ªa a la tamborrada. Tampoco se qued¨® manco el que confundi¨® ciertas culpabilidades: "El Gobierno franc¨¦s culpa de los 5.000 muertos por el calor al dispositivo de alerta", a no ser que se tratara de un dispositivo asesino.
Vean lo que puede ocurrir con los calamares. Un tribulete escribi¨® que hab¨ªa aparecido un calamar de 13 kilos en la playa y a?adi¨®: "El calamar, que es visitado por numerosos curiosos, fue trasladado a un restaurante", dando con ello una nov¨ªsima dimensi¨®n al concepto de chipir¨®n relleno, dimensi¨®n s¨®lo superada en materia de cefal¨®podos por el cocinero Berasategi, que public¨® la siguiente receta: "(Para cuatro personas): dos chipirones del tama?o de un dedo", ?ni que quisiera superar a Jesucristo en el Tiber¨ªades! Aunque para milagro este: "Las inyecciones de cemento permiten superar los dolores de la osteoporosis", siempre y cuando se encuentre quien desencofre a los pacientes. Y para caso raro el de aquella meretriz que se publicitaba as¨ª en la prensa: "Rubia espectacular, 150 pechos", ?y tan espectacular! S¨®lo que en materia de cochinadas apenas puede rivalizar con la Babcock: "Babcock decide vender sus filiales y estudia ofertas por la matriz".
Y es que esto del sexo siempre ha sido muy delicado; vean lo que les pasa a los inmigrantes seg¨²n un corresponsal muy sexudo: "El Ulises moderno no tiene sexo ni nacionalidad definida". De haber nacido en el primer mundo no habr¨ªan tenido problemas ni aun en la senectud: "En verano se triplican los ancianos solos". Y es que los abuelos est¨¢n hechos unos mulos: "Tres muertos y diez heridos tras inmularse un minero jubilado". Ya lo avis¨® Roc¨ªo Jurado, el tiempo lo pone todo en su sitio: "Es un reloj de acero inexorable".
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