"Vest¨ªan de caqui y llevaban gorras de soldado sudan¨¦s"
Una organizaci¨®n humanitaria denuncia nuevos casos de abusos de las milicias contra la poblaci¨®n civil de Darfur
Jartum
"Cinco atletas sudaneses participar¨¢n en Atenas 2004". Noticia de primera p¨¢gina del diario Khartum Monitor de ayer. Tambi¨¦n en primera, y esta vez con fotograf¨ªa del general que se autonombr¨® presidente del pa¨ªs en 1989, el siguiente titular: 'Al Bashir renueva su compromiso en la b¨²squeda de una soluci¨®n pac¨ªfica al conflicto de Darfur'. El presidente Omar al Bashir hizo esta declaraci¨®n en Jartum ante un foro de mujeres de esta regi¨®n en guerra.
El presidente renueva d¨ªa tras d¨ªa su compromiso p¨²blico de poner fin a la violencia. Mujeres de Darfur, ninguna de la cuales se presume estaba en ese foro, contradicen al mandatario. "Los soldados primero atacaron a mi amiga. Muna se sent¨® en el suelo y cerr¨® las piernas. Luch¨® todo lo que pudo. Cuando ya no le quedaron fuerzas, los soldados empezaron su trabajo". ?ste es el relato de una mujer de 45 a?os, que describi¨® a la organizaci¨®n Human Rights Watch (HRW) c¨®mo ella, otra mujer y dos ni?as fueron asaltadas y violadas cuando volv¨ªan a su aldea. "Vest¨ªan de caqui y llevaban gorras de soldado", finaliza su declaraci¨®n.
Siguen imponiendo el terror. Ejecutando matanzas. Perpetrando violaciones. Bombardeando aldeas. Tanto el Ej¨¦rcito como las milicias armadas por Jartum para acabar con la rebeli¨®n que comenz¨® en febrero de 2003 en el oeste del pa¨ªs, prosiguen con su pol¨ªtica de diezmar a la poblaci¨®n civil, seg¨²n inform¨® ayer HRW en un informe de t¨ªtulo m¨¢s que significativo: ?Promesas vac¨ªas? Los abusos contin¨²an en Darfur. El Consejo de Seguridad de la ONU aprob¨® el pasado 30 de julio una resoluci¨®n que urg¨ªa a Sud¨¢n a acabar con la violencia en el plazo de un mes. Jartum asegur¨® entonces que estaba poniendo en marcha miles de efectivos hacia la regi¨®n en un esfuerzo para someter a las milicias y proteger a los civiles.
Hace dos d¨ªas, el gobernador del Estado de Darfur Norte congreg¨® a los representantes de las ONG que operan en la zona para pasarles un mensaje: "6.000 soldados est¨¢n en camino para mejorar la seguridad". "Pretenden lavarse la cara. Pero que luego se cumpla o no es otra cuesti¨®n bien distinta", explicaba ayer desde El Fasher (capital de Darfur Norte), Paula Farias, de la misi¨®n de M¨¦dicos Sin Fronteras-Espa?a. "De momento no hemos notado que haya una mayor presencia policial".
La credibilidad del Gobierno se pone a¨²n m¨¢s en entredicho cuando HRW asegura que las autoridades est¨¢n "incorporando" elementos de las milicias ¨¢rabes Janjawid a la polic¨ªa y el Ej¨¦rcito regular. El grupo de derechos humanos denuncia que "ni se est¨¢ persiguiendo a los l¨ªderes ni se est¨¢ desarmando a los Janjawid". M¨¢s bien todo lo contrario. "Si el Gobierno de verdad quisiera tomarse en serio la protecci¨®n de civiles, permitir¨ªa una mayor presencia internacional", dice Takirambudde, director ejecutivo para ?frica de HRW. Pero el presidente de Sud¨¢n tiene una respuesta para esto: "Oro y petr¨®leo". "Ni Am¨¦rica ni Europa buscan la seguridad y la prosperidad del pueblo de Darfur", asegur¨®. "Las potencias occidentales s¨®lo est¨¢n detr¨¢s de las riquezas de nuestro pa¨ªs".
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