Doloroso ¨²ltimo suspiro

De nuevo el dolor en el ¨²ltimo suspiro. El yudo espa?ol, que hoy puede tener al fin su gran d¨ªa con dos de sus bazas m¨¢s fuertes, Isabel Fern¨¢ndez y Kiyoshi Uematsu, volvi¨® a quedarse con el mal sabor de boca de rozar el podio y no conseguirlo. Tras Kenji Uematsu fue ?scar Pe?as, en la categor¨ªa de 66 kilos, el que debi¨® lamentarlo. Tambi¨¦n en el desempate del combate por la medalla de bronce, tras haber peleado bravamente para remontar la derrota en el segundo enfrentamiento ante el gran eslovaco Krnac, al final plata. El yudo espa?ol sigue code¨¢ndose a gran nivel, pero no acaba de rematar bien por mil¨ªmetros. Un nuevo quinto puesto, que en este deporte, al haber dos medallas de bronce, es como el cuarto maldito habitual que te deja maltrecho al borde del podio. Pe?as, ya veterano madrile?o de muchas luchas a sus 29 a?os, campe¨®n europeo en 1999, y bronce reciente, como en 1998, tampoco pudo tomarse la revancha de Sidney, donde ni siquiera aspir¨® a medalla cuando a¨²n militaba en la categor¨ªa inferior de los 60 kilos.

Ayer, en un nuevo d¨ªa con oro y plata japonesas, y el primer triunfo chino, Espa?a puso su yudo en el tatami con los grandes. Pe?as, maestro y licenciado en INEF, empez¨® ganando por ippon al puertorrique?o M¨¦ndez, aunque necesit¨® llegar a su primera muerte s¨²bita, donde le bastaron nueve segundos. Pero su camino se torci¨® al marcarle el ¨²nico ippon y tirarle Krnac poco despu¨¦s del minuto. Como el eslovaco gan¨® el siguiente combate, el espa?ol pudo seguir en la repesca y empez¨® a so?ar con el podio. Tard¨® algo m¨¢s de cuatro minutos en encontrar el hueco para marcarle un nuevo ippon al nigeriano Alassane Djo Bo, al que primero hizo un wazari y le domin¨® siempre, con lo que cogi¨® la moral que le faltaba. La consolid¨® d¨¢ndole una paliza incluso f¨ªsica al argelino Meridja, que le sacaba la cabeza, y volvi¨® a vencer. Ah¨ª ya se la jug¨®, porque le acababan de marcar un koka de sanci¨®n por un supuesto ataque falso, cuando su rival hab¨ªa hecho al menos dos no se?alados. Entonces, a falta de 10 segundos, aceler¨® y sac¨® un yuko decisivo. Eso le abr¨ªa la puerta para disputar otra medalla de bronce, pero esta vez su primera ol¨ªmpica. Y, de nuevo ante otro rival m¨¢s alto, Georgiev, confirm¨® lo dif¨ªcil que es tirarle por la estabilidad que saca de su potencia y baja estatura, 1,60 metros. Tras los primeros cinco minutos sin t¨¦cnicas marcadas, con el combate muy igualado, incluso ?scar estuvo a punto de completar una proyecci¨®n, pero no lo logr¨®, y en el cara o cruz de la nueva pr¨®rroga establecida hace dos a?os para evitar las pol¨¦micas decisiones de los jueces, el b¨²lgaro le caz¨®.

Hoy, Isabel Fern¨¢ndez, en la categor¨ªa de 52 kilos, y Kiyoshi Uematsu tendr¨¢n la m¨¢xima presi¨®n. Si despu¨¦s de las dos frustraciones de d¨ªas anteriores tambi¨¦n fallan dos de los ¨²ltimos campeones de Europa, y la campeona ol¨ªmpica que defiende su t¨ªtulo, habr¨ªa que pensar ya en la maldici¨®n de Sidney. All¨ª s¨®lo Isabel se colg¨® el oro, pero aqu¨ª todo el equipo est¨¢ mejor y ya se ha demostrado que hasta los yudocas se recuperan con enorme fuerza por el dif¨ªcil carril de la repesca. Isabel es muy posible que enfile la v¨ªa directa si gana a la alemana Boenisch, su primera rival. La puertorrique?a Garc¨ªa no le impedir¨¢ despu¨¦s luchar en cuartos de final con la japonesa Kusakabe, a la que tambi¨¦n puede ganar para entrar en una de las semifinales. Y en ella, entonces, podr¨ªa encontrarse con la china Liu, que va en el cuadro por encima de la espa?ola.

En cuanto a Kiyoshi, su camino ser¨¢ m¨¢s largo, al haber m¨¢s participantes en los 73 kilos. Luchar¨¢ primero con el brasile?o Guilheiro, despu¨¦s con el haitiano Laraque y probablemente con el polaco Wilkomirski. A todos los puede ganar y deber¨ªa jugarse el pase a cuartos con el franc¨¦s de origen portugu¨¦s Fernandes. Si logra imponerse, en semifinales lo m¨¢s seguro es que se encontrar¨ªa con el japon¨¦s Takamatsu.