El partido dormidera
Existen partidos inciertos, como el del debut ante China, en los que el estado de alerta surge por la inseguridad que provoca la presentaci¨®n en sociedad. Hay otros, como el de Argentina, que no necesita m¨¢s que la simple menci¨®n del rival para caer en el necesario estado de excitaci¨®n. Y luego est¨¢n los partidos empanada o partidos dormidera. V¨¦ase el Espa?a-Italia. P¨®ngase una euforia creciente, m¨¦zclese con un gran triunfo anterior, a?¨¢dase un rival lejos de glorias pasadas y ader¨¦cese todo con un horario nada habitual. Conclusi¨®n, un partido para olvidar. Afortunadamente, entre el estado de gracia en el que habita nuestra selecci¨®n, el nuevo estilo italiano y, como mucho, cinco minutos de juego reconocible, la victoria cay¨® al zurr¨®n y deja a Espa?a a un palmo de lograr el primer puesto del grupo y un buen cruce en los cuartos. Aunque con el l¨ªo que han montado los NBA en el otro lado, a saber con qui¨¦n nos encontramos.
La salvaci¨®n en estos at¨ªpicos d¨ªas pasa por que algo o alguien ejerza de despertador y saque al personal de la caraja. Espa?a jug¨® con la s¨¢bana pegada los primeros 17 minutos. Ni ataque, ni defensa, ni nada. Gasol andaba por ah¨ª y Navarro ni eso. Lo del alero empieza a preocupar. Si no estuvi¨¦semos hablando de ¨¦l, habr¨ªan saltado todas las alarmas, pero, sabiendo c¨®mo se las gasta, la esperanza en su resurrecci¨®n es casi inextinguible. Pero su cr¨¦dito tampoco es ilimitado. Tuvo que salir Due?as para que el despertador sonase aunque fuese bajito. Dos canastas y otras tantas asistencias del gigante fue lo que necesit¨® Espa?a para irse al vestuario al mando. Tambi¨¦n ayudaron las nuevas maneras de Italia, que, en contra de su historia, practica el ataque suicida y sus hombres exteriores juegan como si fuesen Kobe Bryant: alternando buenos tiros con otros irresponsables.
A la vista de lo poco que hab¨ªa costado remontar y aprovechando el par¨®n, los jugadores espa?oles volvieron de los vestuarios con la misma empanada inicial, que se transformaba en monumental cuando se trataba de rebotear. Las dobles oportunidades y ahogar a Gasol con una zona les bast¨® a los italianos para volverse a colocar con ventaja. Pero, a la segunda, el despertador son¨® con la fuerza suficiente.
Esta vez fue Garbajosa, el m¨¢s consistente de los trillizos y personaje fundamental en este colectivo. La globalidad de su juego es cada d¨ªa mayor. Tiene mano, es efectivo en la defensa, su especial habilidad para provocar faltas de ataque nos dio un par de balones importantes y entendi¨® que el juego entre p¨ªvots es uno de los mejores ant¨ªdotos contra la zona. Su astucia y precisi¨®n en el pase posibilitaron que nuestra estrella hiciese acto de presencia para liquidar el partido. No hubo m¨¢s, pero, para jugar medio dormidos, el bot¨ªn fue de primera.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.