Im¨¢genes de una Evita desconocida
Una exposici¨®n re¨²ne 70 fotos in¨¦ditas de la famosa primera dama argentina, que estuvieron enterradas m¨¢s de 40 a?os
Evita riendo a carcajadas, o con evidentes muestras de cansancio en su rostro, o hablando espont¨¢neamente. Son im¨¢genes in¨¦ditas e inusuales de Eva Duarte de Per¨®n, la famosa primera dama argentina que en su momento fueron descartadas porque retrataban alg¨²n defecto. Tomadas por Alfredo Mazzorotolo, uno de sus fot¨®grafos personales, muestran a una Evita desconocida hasta ahora. Un total de 70 de estas im¨¢genes rescatadas recientemente del olvido se muestran por primera vez en Espa?a.
Las fotos, tomadas entre 1947 y 1952, cubren el periodo en que Evita ejerce con mayor intensidad su actividad pol¨ªtica y social. Eva Duarte (1919-1952) lleg¨® a la ciudad de Buenos Aires a los 14 a?os procedente del peque?o pueblo de Los Toldos, decidida a buscarse la vida. Trabaj¨® como actriz sin demasiada fortuna hasta que en 1944 conoci¨® a Juan Domingo Per¨®n, un destacado militar en ascendente carrera pol¨ªtica. Primera dama con la llegada a la presidencia de Per¨®n en 1946, Evita logr¨® conectar r¨¢pidamente con los sectores m¨¢s desfavorecidos. Promovi¨® numerosas medidas en favor de estos sectores. En las im¨¢genes de la muestra se la ve rodeada de trabajadores, estudiantes y ancianos. Las fotos retratan sus gestos m¨¢s inusuales, as¨ª como las partes del cuerpo que menos le gustaban, como sus gruesos tobillos.
Los retratos fueron realizados por Mazzorotolo, uno de sus fot¨®grafos personales
Evita tambi¨¦n despert¨® encendidos odios entre la oposici¨®n y la aristocracia. Amores y odios la acompa?aron tras su muerte, el 26 de julio de 1952. Despu¨¦s del golpe de Estado de 1955, que derroc¨® al segundo Gobierno de Per¨®n, el cad¨¢ver momificado de Evita fue disputado por el bando vencedor. Su cuerpo, en paradero desconocido y convertido en m¨¢s que un secreto de Estado, no encontr¨® reposo hasta los a?os setenta, cuando fue enterrado en un cementerio de Buenos Aires.
Como casi todo lo relacionado con Evita, sus fotos in¨¦ditas tambi¨¦n tienen una historia rocambolesca. Su protagonista, la otra figura de la exposici¨®n, es el reportero gr¨¢fico Alfredo Mazzorotolo, que preserv¨® las im¨¢genes con celo durante m¨¢s de cuarenta a?os. En 1955, el fot¨®grafo decidi¨® enterrar su archivo personal para salvarlo de la cacer¨ªa de brujas que se estaba produciendo con todo lo relacionado con el peronismo. M¨¢s de 800 negativos en placa de vidrio y en celuloide con im¨¢genes descartadas de Evita y de Per¨®n fueron sepultados en un lugar cuya ubicaci¨®n s¨®lo ¨¦l supo, en un campo de la provincia de Buenos Aires.
Poco antes de morir, en 1998, Alfredo Mazzorotolo revel¨® la existencia de los archivos a su hija, Mar¨ªa Teresa, que por circunstancias familiares se hab¨ªa convertido en historiadora. "S¨®lo me pidi¨® que los cuidara. No me dijo m¨¢s sobre ellos. Hasta ese momento, la ¨²nica persona que sab¨ªa de la existencia de las fotos era mi madre, pero mi padre nunca le dijo d¨®nde las hab¨ªa escondido", afirma Teresa. "Cuando vi el material, me di cuenta de que era algo ¨²nico, porque todo lo dem¨¢s se destruy¨® despu¨¦s de 1955".
"Mi padre mantuvo las fotos en absoluto secreto, cuid¨® este material como algo personal", explica Teresa. "Como hija, me cuestion¨¦ mucho qu¨¦ hacer con las fotos, pero como historiadora no pod¨ªa mantener estos archivos guardados", agrega.
Algunas de las fotograf¨ªas se expusieron por primera vez en 2001 en Buenos Aires. La restauraci¨®n, incluyendo la digitalizaci¨®n de una parte del material, ha sido monumental, ya que los delicados negativos no fueron guardados en las mejores condiciones. El resultado ha sido notable: cuidadas im¨¢genes en blanco y negro de un valor hist¨®rico incalculable. Las fotos carecen de ep¨ªgrafe porque Mazzorotolo las enterr¨® casi sin indicaciones. Resta por hacer una ardua tarea para poder situarlas en su contexto preciso. La exposici¨®n, organizada por el Gobierno argentino, tambi¨¦n muestra a trav¨¦s del descarte cu¨¢l era el concepto de fotograf¨ªa period¨ªstica del momento, qu¨¦ se pod¨ªa mostrar y qu¨¦ no.
Entre los archivos fotogr¨¢ficos celosamente guardados por Mazzorotolo faltan algunas im¨¢genes. Son las de los ¨²ltimos d¨ªas de Evita, en julio de 1952, cuando un c¨¢ncer de ¨²tero le hab¨ªa absorbido su caracter¨ªstica vitalidad. La ausencia de estas fotograf¨ªas es parte de un pacto. El que suscribieron los cuatro fot¨®grafos personales de Evita, que prometieron no hacer p¨²blicas jam¨¢s esas im¨¢genes que mostraban a una mujer consumida por la enfermedad, como una forma de respeto con "la se?ora", como llamaban a la carism¨¢tica primera dama.
"Revisar este material despu¨¦s de la muerte de mi padre ha sido muy duro para m¨ª", se?ala Teresa. "Junto con lo hist¨®rico descubro aspectos personales de mi padre que desconoc¨ªa, pude atar muchos cabos de su vida". Alfredo Mazzoroto abandon¨® su pueblo a los 19 a?os rumbo a Buenos Aires. "Tanto Evita como ¨¦l fueron muchachos de pueblo que buscaban m¨¢s, cosas que no pod¨ªan encontrar en sus pueblos".
Mazzorotolo, sin terminar los estudios secundarios, aprendi¨® diversos oficios hasta que encontr¨® la fotograf¨ªa. Se convirti¨® en fot¨®grafo personal de Evita y la acompa?¨® en diversos viajes. Despu¨¦s de su muerte en 1952, comenz¨® a retratar las actividades del entonces presidente Per¨®n. Alfredo Mazzorotolo, con poco m¨¢s de 40 a?os, encontr¨® un retiro anticipado con el golpe de 1955. Entonces, el manto del olvido cay¨® sobre ¨¦l. Ahora, su figura, desenterrada junto con sus archivos in¨¦ditos, comienza a ser valorada.
70 fotos in¨¦ditas de Evita. Colegio Mayor Argentino. Mart¨ªn Fierro, sin n¨²mero. Tel¨¦fono 91 549 06 50. Metro Moncloa. Hasta el 30 de agosto, todos los d¨ªas de 18.00 a 22.00. Entrada gratuita.
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