Bancos m¨¢s tranquilos

Los bancos de Argentina, entre ellos las filiales de BBVA y SCH, respiran tranquilos. La Corte Suprema de Justicia ha fallado en los ¨²ltimos dos meses a favor de las entidades ante las reclamaciones de ahorradores contra la pesificaci¨®n de sus dep¨®sitos en d¨®lares. Crece la ira entre el reducido grupo de depositantes que sigue protestando contra lo que fue el corralito financiero.

Un dictamen favorable habr¨ªa supuesto a los bancos el desembolso de 15.000 millones de d¨®lares para el conjunto de todos los demandantes

Guillermo Cabrera estaba en el paro en 2001, en plena crisis argentina, su esposa estaba embarazada, pero ten¨ªa 32.000 d¨®lares ahorrados. Con ellos decidi¨® comprar un piso m¨¢s grande para el nuevo integrante de su familia. Los deposit¨® en el Citibank (Citigroup) para transfer¨ªrselos al vendedor. En diciembre de aquel a?o quedaron congelados en el corralito y al mes siguiente fueron pesificados a raz¨®n de 1,40 pesos por d¨®lar. La moneda estadounidense cotiza en la actualidad a 3,02 pesos. Ante la necesidad de comprar la vivienda y la repentina enfermedad de su suegra, Cabrera acept¨® la oferta del entonces Gobierno de Eduardo Duhalde de retirar los dep¨®sitos pesificados. Se llev¨® 44.800 pesos.

Meses despu¨¦s, la Corte, que en aquel entonces estaba dominada por la llamada mayor¨ªa autom¨¢tica del ex presidente Carlos Menem -enemigo de Duhalde y Kirchner dentro del peronismo-, admiti¨® que los ahorradores pudieran presentar recursos de amparo para demandar la devoluci¨®n de sus dep¨®sitos en d¨®lares. Cabrera as¨ª lo hizo. En mayo de 2003, Kirchner asumi¨® el poder y llam¨® al Congreso a renovar la desprestigiada Corte. Algunos magistrados renunciaron y otros fueron removidos por juicio pol¨ªtico, de modo que se diluy¨® el dominio menemista. Con dos nuevos miembros promovidos por Kirchner, uno af¨ªn al Gobierno y la otra m¨¢s independiente, el tribunal supremo sentenci¨® en julio ¨²ltimo contra la pretensi¨®n de Cabrera de recuperar sus d¨®lares -que supondr¨ªan 96.640 pesos- por el hecho de que en su momento acept¨® sin reservas el cobro del dep¨®sito pesificado. La Corte, no obstante, no defini¨® a¨²n su posici¨®n acerca de la constitucionalidad o no de la conversi¨®n a pesos de los ahorros en divisas.

El fallo cerr¨® la puerta al 90% de los recursos de amparo presentados por cientos de miles de ahorradores, seg¨²n fuentes del sector financiero. Informantes judiciales calculan que un dictamen favorable a Cabrera hubiera obligado a los bancos a desembolsar unos 15.000 millones de d¨®lares para todos los demandantes, lo que hubiera da?ado a¨²n m¨¢s la delicada situaci¨®n patrimonial del sistema financiero. Una situaci¨®n semejante hubiese generado nuevas presiones de las entidades para elevar las compensaciones del Estado por la pesificaci¨®n asim¨¦trica de dep¨®sitos y cr¨¦ditos (cada d¨®lar prestado se transform¨® en un peso). La deuda p¨²blica aument¨® 34.368 millones de d¨®lares entre diciembre de 2001, un mes antes de la devaluaci¨®n, y el 31 de diciembre ¨²ltimo por esas compensaciones, los bonos para los afectados por el corralito y el rescate de las seudomonedas provinciales, entre otros efectos de la crisis.

Estos d¨ªas la Corte no pudo reunirse por las disputas entre los magistrados que derivaron en la dimisi¨®n del ¨²ltimo representante menemista, Adolfo V¨¢zquez. Sin embargo, los jueces firmaron el expediente para fallar contra otra ahorradora, Mar¨ªa Campbell, que hab¨ªa utilizado en 2002 sus dep¨®sitos pesificados para comprar una vivienda -opci¨®n autorizada por el Gobierno de Duhalde-, pero que meses despu¨¦s present¨® un recurso de amparo para que se redolaricen sus dep¨®sitos. La sentencia a¨²n no se hecho p¨²blica.

A partir del caso Cabrera, un peque?o banco de la provincia de C¨®rdoba -la segunda del pa¨ªs- demand¨® un embargo contra un ahorrador que mediante un recurso de amparo hab¨ªa recuperado sus d¨®lares. Un juez de primera instancia fall¨® contra la entidad financiera. Los bancos en Argentina a¨²n no est¨¢n saneados, cuentan con dep¨®sitos de corto plazo y por eso se reh¨²san a prestar para proyectos de inversi¨®n o compra de viviendas. De todos modos, en los ¨²ltimos meses, a dos a?os y medio de la instauraci¨®n del corralito y a uno y medio de su desaparici¨®n, han comenzado a exhibir los primeros beneficios.