El Gobierno remodela la c¨²pula del servicio secreto CNI seis meses despu¨¦s del 11-M

El Consejo de Ministros aprob¨® ayer el cese de la secretaria general del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Mar¨ªa Dolores Vilanova, y su sustituci¨®n por otra mujer, Esperanza Castelleiro, con 21 a?os en el servicio secreto. Aunque no se hizo p¨²blico, tambi¨¦n relev¨® a uno de los dos directores generales del centro, J. L. R., responsable de administraci¨®n y personal. Al menos otros cuatro jefes de divisi¨®n tambi¨¦n han sido cambiados. Fuentes del centro dijeron que estos relevos responden al "cambio de prioridades informativas que se deriva del 11-M".

Cinco meses despu¨¦s de su nombramiento, el secretario de Estado responsable del CNI, Alberto Saiz, hombre de la m¨¢xima confianza del ministro de Defensa, Jos¨¦ Bono, procedi¨® ayer a una amplia remodelaci¨®n de la c¨²pula del servicio secreto.

El Consejo de Ministros aprob¨® el cese como secretaria general del centro, con rango de subsecretaria, de Mar¨ªa Dolores Vilanova, nombrada en mayo de 2002 por el anterior director, Jorge Dezcallar.

Para sustituirla ha sido designada otra mujer, Esperanza Casteleiro Llamazares, nacida en Madrid, de 47 a?os. Casada y con tres hijos, licenciada en Filosof¨ªa y Ciencias de la Educaci¨®n, ingres¨® en el servicio secreto en 1983 y ha estado destinada tanto en la divisi¨®n interior como en el extranjero, en Brasil. Hasta ahora dirig¨ªa el ¨¢rea de gesti¨®n de recursos humanos, por lo que ten¨ªa un perfil bajo.

Aunque no se hizo p¨²blico, pues su nombramiento tiene car¨¢cter secreto, el Gobierno relev¨® tambi¨¦n al responsable de Personal y Administraci¨®n, J. L. R., uno de los dos directivos con rango de director general. El otro, responsable de inteligencia, ha sido confirmado.

Los relevos alcanzan tambi¨¦n a por lo menos cuatro jefaturas de divisi¨®n; entre ellas, Exterior (que dirigir¨¢ una mujer) y Contrainteligencia. Fuentes pr¨®ximas a la direcci¨®n de centro indicaron que los cambios responden a las "reformas en la organizaci¨®n y orientaci¨®n" del trabajo del CNI, debido al "cambio de las prioridades informativas tras el 11-M".

El CNI ha vivido en el ¨²ltimo a?o una etapa muy convulsa pues, adem¨¢s del 11-M, sufri¨® la muerte de ocho agentes en Irak. En los ¨²ltimos tiempos se hab¨ªan producido tensiones en el seno del equipo directivo heredado de la etapa del PP. Algunos relevados estaban pr¨®ximos a la ex secretaria general.

El Consejo de Ministros acord¨® tambi¨¦n ayer la entrega de 25 de los 96 documentos reclamados por la Comisi¨®n de Investigaci¨®n del 11-M. Seg¨²n la Secretar¨ªa de Estado de Relaciones con las Cortes, 12 de los informes pedidos ya fueron entregados en su d¨ªa al Congreso y nueve se est¨¢n elaborando.

El Gobierno alega que no puede entregar 43 documentos: 28 porque est¨¢n sujetos al secreto sumarial; siete porque se refieren a antecedentes penales o policiales protegidos por la ley; uno -relativo a movimientos en las cuentas de los implicados en el 11-M- porque est¨¢ protegido por el secreto bancario; y siete -sobre informaci¨®n facilitada por servicios secretos extranjeros al CNI- porque est¨¢n exentos de control parlamentario, seg¨²n el Gobierno.

No hay cuatro documentos

El Consejo de Ministros mantiene el car¨¢cter clasificado de tres documentos, pero se muestra dispuesto a mostrarlos a la comisi¨®n del 11-M en sesi¨®n secreta. En concreto, se trata de las seis ediciones del informe de Europol sobre valoraci¨®n de la amenaza del terrorismo isl¨¢mico; y del informe que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil remiti¨® a la comandancia de Asturias sobre la venta de explosivos por parte del ex minero Jos¨¦ Emilio Su¨¢rez Trashorras; as¨ª como las actas de inspecci¨®n y registro de las minas asturianas Conchita y La Collada.

Por ¨²ltimo, el Gobierno alega que cuatro de los documentos solicitados, la mayor¨ªa por el PP, no existen. Se trata de la la informaci¨®n que el confidente Raf¨¢ Zouhier habr¨ªa dado sobre la venta de armas por parte de un guardia civil a un socio uno de los presuntos autores del 11-M; de la denuncia de un abogado sobre la supuesta existencia en Asturias de un dep¨®sito de dinamita destinada a ETA; y de dos informes sobre la estancia en c¨¢rceles marroqu¨ªes de implicados en el 11.M.

M¨¢s contundente se muestra el Gobierno ante la insinuaci¨®n, planteada por el PP; de que miembros de ETA participaron en el asesinato de los agentes del CNI en Irak: "No existe informaci¨®n alguna en el CNI que conforme la hip¨®tesis formulada en la petici¨®n".