Miedo a pedir ayuda

Carmen Garc¨ªa, concejala del Servicio Municipal de la Mujer en Bilbao, reconoce que el miedo de muchas mujeres a interponer una denuncia o acercarse a las instituciones p¨²blicas en demanda de ayuda se duplica en el caso de las inmigrantes en situaci¨®n irregular, aunque la falta de papeles de la solicitante no es una traba para recibir protecci¨®n de la Administraci¨®n. "Se atiende a todas las mujeres, est¨¦n en la situaci¨®n que est¨¦n. No necesitan ni siquiera estar empadronadas", recalca la edil.

Tampoco la Diputaci¨®n de Vizcaya exige requisito alguno a las inmigrantes que acuden a sus servicios de urgencia, a cualquiera hora. "No les pedimos nada, y se quedan entre tres y cuatro d¨ªas. Despu¨¦s, si no tienen donde ir, van a un piso de acogida o al domicilio de alg¨²n familiar, aunque es habitual que no tengan familiares ni nadie que les eche una mano", asegura un portavoz del departamento de Bienestar Social.

La instituci¨®n foral vizca¨ªna dispone de dos pisos refugio para todo tipo de casos de desamparo y de otros, cuyo n¨²mero no se especifica, con centros colaboradores. En el transcurso del pasado a?o acogieron a 190 mujeres y 70 menores; aproximadamente, la mitad eran inmigrantes. La edad media de las mujeres fue de 34 a?os; la m¨¢s joven ten¨ªa 17 a?os y la mayor, 60. Los hijos se situaban en una amplia franja entre siete d¨ªas y 23 a?os, siendo la media de edad de siete.

Las otras dos capitales vascas, as¨ª como otros ayuntamientos y diversas organizaciones sociales cuentan tambi¨¦n con pisos de acogida en la comunidad aut¨®noma. El proyecto de ley de Igualdad recientemente aprobado por el Gobierno establece la obligaci¨®n de que todos los municipios de m¨¢s de 20.000 habitantes garanticen este tipo de asistencia para las mujeres maltratadas.