'La fiesta del chivo' devuelve la ¨¦poca de Trujillo a la Rep¨²blica Dominicana

Por el hall del hotel Embajador pasea una joven trigue?a de pelo largo y negro ataviada con un traje de ba?o de ¨¦poca de color amarillo, que m¨¢s bien parece una prenda de cabaret. Varias ni?as corretean con sus vestidos floridos y sus peinados de ni?a buena por el mismo lugar, ubicado en el sector de Bella Vista de la capital de la Rep¨²blica Dominicana.

Atravesar la puerta hacia el ¨¢rea ajardinada de la piscina explica tan peculiar vestimenta. Varios j¨®venes corretean de un lado al otro alrededor de la irregular pileta. El equipo de producci¨®n de la pel¨ªcula The feast of the goat (La fiesta del chivo) suda la gota gorda poniendo todo a punto para el rodaje de la secuencia 25.

Basada en la novela del mismo nombre, escrita por Mario Vargas Llosa y publicada en 2000, la trama tiene como protagonista a Urania Cabral (Isabella Rossellini), quien 30 a?os despu¨¦s de haber abandonado Santo Domingo regresa para hacerle frente y revelar su tormento de la ni?ez, causado por el dictador Rafael Trujillo a expensas de su padre, el senador Agust¨ªn Cabral.

"En los a?os setenta comenc¨¦ a viajar a Rep¨²blica Dominicana", se?ala Luis Llosa (Sniper y El especialista), director del proyecto, "y mi inter¨¦s por la historia de Trujillo se despert¨® de inmediato. Luego, en futuras visitas y hasta hoy, me dio la impresi¨®n de que su presencia era permanente en los medios, en el pensamiento de la gente".

Al director peruano, primo del autor de la novela, no le falta raz¨®n. La figura del dictador que mand¨® en el pa¨ªs caribe?o entre 1930 y mayo de 1961, cuando fue "ajusticiado" por militares de su propio r¨¦gimen, sigue vigente en la poblaci¨®n. "Trujillo era dictador en las calles, en el congreso, en las alcobas. Es muy atractivo desde el punto de vista cinematogr¨¢fico, ese brillo de su opulencia contrapuesto a lo oscuro de su naturaleza", explica Llosa.

Su papel lo encarna el cubano Tom¨¢s Mili¨¢n. "Lo eleg¨ª tras verle en Traffic. Ah¨ª lo supe. No importa que no haya un gran parecido f¨ªsico, son las licencias que uno puede tomarse cuando la calidad importa m¨¢s". Pero esa licencia no se la tomaron ni ¨¦l ni Augusto Cabada a la hora de elaborar el gui¨®n: "La historia f¨ªlmica es fiel al libro todo lo que puede ser tras condensar 400 p¨¢ginas (en realidad son m¨¢s de 500) en 100 minutos". Andr¨¦s Vicente G¨®mez, el productor, tambi¨¦n cree en la fidelidad entre la novela y la pel¨ªcula. "El gui¨®n es muy fiel". ?l y Llosa no se conoc¨ªan antes de que el director nacido en Lima le contactara. "Cuando sali¨® la novela, r¨¢pidamente habl¨¦ con Andr¨¦s Vicente G¨®mez para proponerle que trabaj¨¢ramos con ella. Compramos los derechos y me alej¨¦ de Hollywood para concentrarme en este proyecto".

Se rueda la escena en la que Uranita, interpretada por la actriz Stephanie Le¨®nidas, celebra su catorce cumplea?os acompa?ada de su padre, el senador Agust¨ªn Cabral (Paul Freeman). Los actores elegidos componen un grupo multinacional: ingleses, estadounidenses, italianos, cubanos, espa?oles... "Hemos querido que los personajes no sean el t¨ªpico latino con bigote y el reparto es bastante coherente con las dos familias que protagonizan la trama: la de Trujillo y la del senador Cabral", explica Vicente G¨®mez. "La pel¨ªcula har¨¢ justicia a la era de Trujillo". Rodada en ingl¨¦s, la pel¨ªcula cuenta con un presupuesto de 10 millones de d¨®lares.

Sentado en una silla, Luis Llosa parece estar ajeno a todo lo que ocurre en el lugar. Se levanta y se acerca a la c¨¢mara. No le convence lo que ve a trav¨¦s de ella y ubica otro espacio un poco m¨¢s hacia la izquierda. Su equipo de asistentes mueve el aparato y controla la luz, mientras Daniela no para de dar ¨®rdenes por el min¨²sculo micr¨®fono.

A la chica del traje de ba?o amarillo se le siente ansiosa junto a la piscina. Por momentos, cubierta con una pamela de paja muy se?orial, se tiende en una tumbona. Tiene una revista en la mano que ni observa.El ruido seco de la claqueta anuncia el rodaje inminente de la secuencia. Lo hacen tres veces, hasta que Llosa est¨¢ convencido del material con el que cuenta. Son las 4.11, tiempo de preparar la ¨²ltima escena de la tarde. Al d¨ªa siguiente, la piscina quedar¨¢ atr¨¢s y las calles del sector de Gazcue y de la Zona Colonial de Santo Domingo se convertir¨¢n en el escenario perfecto para los exteriores de una pel¨ªcula cuyos interiores se rodar¨¢n en Madrid.