Al menos cuatro intermediarios cobraban comisi¨®n por el alquiler del Yakovlev-42

Al menos cuatro intermediarios cobraban comisi¨®n por el viaje del Yak-42 que se estrell¨® en Trabzon (Turqu¨ªa) el 26 de mayo de 2003, causando la muerte de 62 militares espa?oles. El Estado Mayor de la Defensa contrat¨® el vuelo con la agencia NAMSA de la OTAN, que subcontrat¨® al broker Chapman Freeborn, que subcontrat¨® con Volga Dnepr, que subcontrat¨® con Adriyatic, que subcontrat¨® con UM Air, la compa?¨ªa ucrania que puso el avi¨®n. S¨®lo Chapman Freeborn se embolsaba 23.350 d¨®lares, una comisi¨®n del 13,6% que fuentes del sector de vuelos ch¨¢rter consideran "exagerada".

El ministro de Defensa, Jos¨¦ Bono, que hoy comparece en el pleno del Congreso para informar sobre el caso Yak-42, afirm¨® el pasado 6 de septiembre que las sucesivas subcontrataciones se hicieron "en perjuicio de los militares y en beneficio de alg¨²n desvergonzado" cuyo nombre el ministro dijo ignora.

Al margen de los calificativos, s¨ª es posible conocer ya qui¨¦nes eran algunos de los beneficiarios del tortuoso proceso seguido para fletar el Yak-42. El Ministerio de Defensa, a trav¨¦s del Estado Mayor Conjunto, subscribi¨® con NAMSA un acuerdo para el transporte de las tropas por el que la agencia de la OTAN cobraba 25.000 euros anuales.

NAMSA, de acuerdo con Defensa, adjudic¨® el contrato al broker Chapman Freeborn, con sede en Frankfurt am Main (Alemania), que a su vez subcontrat¨® a Volga Dnepr, con sede en el aeropuerto de Shannon (Irlanda). Hasta aqu¨ª lo que ya se sab¨ªa. Pero al desenredar la madeja ha aparecido una nueva intermediaria: Adriyatik Ltd, basada en Estambul (Turqu¨ªa). Fue ¨¦sta la que finalmente subcontrat¨® a Ucranian Mediterranean Air, operadora del Yakovlev-42.

De euros a d¨®lares

Defensa pagaba 149.000 euros por aquel vuelo. No era un precio barato. Seg¨²n los datos aportados por Bono al Congreso en julio pasado, el coste por pasajero era de 1.241 euros, mientras que ahora, con la empresa espa?ola Air Europa, paga 923.

Pero ?cu¨¢nto dinero se quedaban los sucesivos comisionistas? El contrato firmado por Chapman con Volga establec¨ªa un precio de 148.000. Pero no en euros, sino en d¨®lares. Al cambio medio en mayo de 2003 (1.15 d¨®lares por euro), el broker se embolsaba 23.350 d¨®lares, lo que supone el 13,62% del precio total.

Fuentes del sector de vuelos ch¨¢rter consultados por EL PA?S consideran esta comisi¨®n "exagerada", pues lo normal es cobrar algo m¨¢s del 5%. Especialmente si, como en este caso, el contrato con Champman no era para un s¨®lo vuelo: entre enero y mayo de 2003 se fletaron 20 aviones a trav¨¦s de dicho agente.

Tampoco entienden las mismas fuentes qu¨¦ necesidad hab¨ªa de recurrir a cuatro intermediarios. Chapman gan¨® el contrato con NAMSA porque se supon¨ªa que era capaz de proporcionar este tipo de aviones y, de hecho, el mismo Yak-42 de UM Air fue fletado dos veces, en febrero y en mayo, antes del siniestro.

Chapman no s¨®lo factur¨® una comisi¨®n del 13,62%, sino que adem¨¢s suprimi¨®, en su contrato con Volga, el seguro de 75.000 d¨®lares por pasajero al que le obligaba el acuerdo con NAMSA. Se estima que este seguro costaba en total unos 2.000 euros, que el broker se habr¨ªa quedado de no haberse producido el accidente, aumentando su beneficio hasta m¨¢s de 25.000 d¨®lares.

Lo que no se conoce hasta ahora es qu¨¦ comisi¨®n llevaban los otros dos intermediarios, ni cu¨¢nto cobr¨® finalmente la compa?¨ªa ucrania. El anterior ministro de Defensa, Federico Trillo-Figueroa, calific¨® este proceso de "cadena de confianza". El resultado fue el flete de un avi¨®n cuyo mantenimiento era deficiente (como prueba el hecho de que la caja negra de registro de voz no funcionara desde un mes y medio antes) y cuya tripulaci¨®n no s¨®lo era inexperta en el dif¨ªcil aeropuerto de Trabzon, sino que estaba agotada despu¨¦s de 23 horas y 26 minutos de actividad.

Debido a esta falta de control, el Gobierno del PP se vio obligado a desembolsar, con cargo al erario p¨²blico, 4.650.000 d¨®lares para suplir el inexistente seguro. Cuando cambi¨® el Gobierno, no se hab¨ªa emprendido ninguna acci¨®n para recuperar este dinero.

Chapman se mostr¨® dispuesta a hacerse cargo del pago, pero en condiciones leoninas: lo devolver¨ªa en c¨®modos plazos a cambio de que las familias renunciaran a cualquier otra reclamaci¨®n y de que la agencia de la OTAN la siguiera contratando.