Todos contra Bin Laden

?Es Osama Bin Laden el elemento imprevisto que puede decidir el resultado de las elecciones? Su efecto en el voto del pr¨®ximo martes es incierto, pero la realidad es que la imagen del l¨ªder de Al Qaeda salt¨® a las pantallas el viernes por la noche, no como se maliciaban los que aseguraban que la Casa Blanca lo ten¨ªa escondido, sino como un fantasma vivo que recuerda los horrores y los 3.000 muertos del 11 de septiembre. Para bien o para mal de George W. Bush y de John Kerry, la guerra contra el terrorismo est¨¢ de nuevo bajo todos los focos y ser¨¢ un factor determinante para aquellos que a¨²n no saben -o que no quieren decirlo- qu¨¦ decisi¨®n tomar en las urnas.

?stas son las primeras elecciones presidenciales en EE UU tras el 11-S. El pa¨ªs vive desde hace tres a?os en una situaci¨®n excepcional que ya tuvo un primer efecto electoral -la victoria republicana en las legislativas de 2002- y que ha alterado la divisi¨®n en dos bloques que dura desde hace 25 a?os. Opciones sociales y valores morales dividen a los estadounidenses, pero si en algo coinciden la Am¨¦rica dem¨®crata y la republicana es en haber salido del 11-S con un valor en alza, la seguridad. El candidato que mejor d¨¦ la impresi¨®n de garantizarla lleva una gran ventaja. Hasta ahora, es el ¨²nico cap¨ªtulo en el que Bush domina a Kerry: alrededor de un 60% cree que es m¨¢s fiable en este campo.

Bin Laden sacudi¨® como un terremoto la campa?a. Las reacciones fueron previsibles. Bush dijo que los norteamericanos "no se dejar¨¢n intimidar o influir por un enemigo" de Estados Unidos y a?adi¨®: "Estoy seguro de que el senador Kerry est¨¢ de acuerdo con esto". El senador estaba de acuerdo, pero tambi¨¦n dijo que la irrupci¨®n del jefe de Al Qaeda demuestra el fracaso de Bush en la lucha contra el terrorismo. El presidente contest¨® que era un comentario "especialmente vergonzoso". Joe Lockhart, asesor de Kerry, dijo que "lo vergonzoso es aprovecharse pol¨ªticamente de las amenazas". El veterano Mike McCurry, que fue portavoz de Clinton, supo ver que la cinta es ahora hielo resbaladizo: "Lo importante es seguir adelante, estamos en los d¨ªas finales". Ayer, los dos candidatos hablaron con el v¨ªdeo en su cabeza y en la de sus oyentes: "La persona que se siente en el Despacho Oval determinar¨¢ el resultado de la guerra contra el terrorismo", dijo Bush en Michigan. En Wisconsin, Kerry afirm¨® que dirigir¨¢ al mundo "en una lucha contra el terrorismo m¨¢s inteligente, m¨¢s eficaz, m¨¢s dura y m¨¢s estrat¨¦gica".

?Qu¨¦ valoraci¨®n prevalecer¨¢? ?Es Bin Laden el recuerdo de una amenaza en la que se valora mejor a Bush o el recuerdo de su ineficacia y sus errores en la guerra contra el terrorismo? La entrada del jefe de Al Qaeda en los cuartos de estar de los norteamericanos en el ¨²ltimo fin de semana anterior al 2 de noviembre no revolucionar¨¢ el voto de los que ten¨ªan tomada ya su decisi¨®n, pero puede afectar a algunas decenas de miles de personas, y eso es lo que inclinar¨¢ la balanza en tres o cuatro Estados clave. Los republicanos tienen en pantalla un anuncio con una manada de lobos -los enemigos exteriores- y una alusi¨®n a la supuesta debilidad de Kerry. Los dem¨®cratas han centrado el mensaje en la "incompetencia" del Gobierno para luchar contra el terrorismo y en los errores de Irak. Para el republicano John McCain, "los indecisos ir¨¢n a las urnas y votar¨¢n al que creen que puede protegerles mejor, y si se lo preguntan, la respuesta ser¨¢ que esa persona es Bush". McCurry fue m¨¢s prudente y dijo que no hay forma de anticipar nada: "Lo sabremos el martes".

"No est¨¢ claro que haya indecisos a estas alturas; si alguien lo dice es porque no se ha tomado la molestia de pensar o porque no lo quiere declarar", seg¨²n Mois¨¦s Na¨ªm, director de la revista Foreign Policy, que a?ade: "En todo caso, el impacto de Bin Laden ser¨¢ mucho mayor entre ellos". ?C¨®mo deben gestionar los candidatos esta irrupci¨®n? "Si yo fuera Kerry, mi mensaje ser¨ªa el siguiente: si se ha decidido ya por Bush, h¨¢galo, pero no cambie su voto por lo que dice Osama, y si ha decidido votar por m¨ª, vote por m¨ª, pero no permita que Bin Laden le influya". ?Y Bush? En este caso, dice Na¨ªm, el mensaje es: "Esto confirma que hay lobos al acecho y que est¨¢n esperando el mejor momento para atacarnos, as¨ª que cuenten conmigo para defenderles".

?Qui¨¦n va a sacar m¨¢s partido? "Estoy seguro de que Bush lo utilizar¨¢ en su provecho, y tambi¨¦n estoy seguro de que Kerry no va a decir lo que yo acabo de decir", cree Na¨ªm. "Bush est¨¢ en mejor posici¨®n para sacar ventaja; es m¨¢s dif¨ªcil para Kerry, que lo ¨²nico que puede decir es: 'Ya les dije yo que este se?or no les protege, f¨ªjense que Osama est¨¢ suelto'. Pero mi pron¨®stico es que esto no va a ser el factor determinante". Para Philip Gordon, de la Brookings Institution, "cualquier cosa que crea inseguridad deber¨ªa ser buena para Bush. Al mismo tiempo, esto es un recuerdo de que no lo atraparon, de que algo fall¨®".