El Prado premia al maestro Montebello
El director del Metropolitan cree que "los museos tienen que ser accesibles sin perder la reflexi¨®n"
El historiador de arte Philippe de Montebello, director del Museo Metropolitan de Nueva York desde hace 27 a?os, recibi¨® ayer el premio de la Fundaci¨®n Amigos del Museo del Prado, en reconocimiento a su trayectoria profesional y "a los que nos hacen visible el arte y nos ayudan a comprenderlo y apreciarlo en toda su dimensi¨®n". Las palabras magisterio y maestro fueron repetidas en las intervenciones de Rodrigo Ur¨ªa, presidente del patronato; Carlos Zurita, presidente de la fundaci¨®n, y Miguel Zugaza, director del museo. "La identidad de los grandes museos est¨¢ en las colecciones", declar¨® Montebello antes de recibir el galard¨®n, que en anteriores ediciones distingui¨® a Francis Haskell, Enriqueta Harris, Juli¨¢n G¨¢llego y Alfonso E. P¨¦rez S¨¢nchez.
La sala 75 del Museo del Prado, dedicada a la pintura italiana del renacimiento, con grandes telas de Veron¨¦s y Tintoretto, fue el escenario de la entrega del premio de la Fundaci¨®n Amigos del Museo del Prado, una instituci¨®n cultural privada sin ¨¢nimo de lucro que desde 1980 trabaja con el museo en la promoci¨®n de actividades para fomentar un mayor conocimiento de las colecciones hist¨®ricas.
Philippe de Montebello, en un breve encuentro con periodistas, se?ala las colecciones como la identidad de los grandes museos, de los que cita cinco, entre ellos el Prado. Ante una obra de Tintoretto, del siglo XVI, indica que lo importante de los museos con historia es que las obras de arte tienen dos vidas: una en el momento de su creaci¨®n y otra en el tiempo actual. "Una obra de arte es siempre actual y el visitante de los museos aprecia la doble presencia de las obras". Cuenta la visita del pintor De Kooning al Metropolitan cuando lleg¨® a Nueva York y qued¨® impresionado con los frescos de Pompeya, "que tuvieron una gran influencia en su pintura".
El director del Metropolitan (conocido como el Met) advirti¨® de que no pensaba hablar de pol¨ªtica ni sobre sus colegas. Aunque en la breve estancia en Madrid no hab¨ªa visitado todav¨ªa la exposici¨®n del piso de arriba, El retrato espa?ol. De El Greco a Picasso, dijo que es "absolutamente natural" que Picasso figure en la exposici¨®n del Prado, "para confrontar el arte de hoy y el de ayer", que en el caso de Picasso, con su interpretaci¨®n de Las meninas, estaba "llena de imaginaci¨®n y esp¨ªritu creativo".
Museo enciclop¨¦dico
El Metropolitan tiene las mismas respuestas al reto de la masificaci¨®n de los grandes museos, con la ampliaci¨®n de los espacios y galer¨ªas -dedicar¨¢ 180 millones de d¨®lares para mostrar al p¨²blico 5.000 piezas de arte romano y griego que est¨¢n en los almacenes- y el programa de exposiciones atractivas para formar colas, como ha ocurrido con las ¨²ltimas propuestas del museo, que puede ofrecer los vestidos de Jacqueline Kennedy y las pinturas de El Greco. "Los museos hoy deben ser mucho m¨¢s accesibles a un p¨²blico cada vez mayor y la paradoja es que tambi¨¦n debemos invitar a esos mismos visitantes a una reflexi¨®n honda y profunda sobre la obra de arte. Los directores de los museos piensan todos los d¨ªas en reconciliar estos dos aspectos, el acceso masivo pero sin olvidar el momento est¨¦tico y que lo importante es elevar la reacci¨®n del visitante al nivel de la obra de arte".
Bajo la direcci¨®n de Montebello, el Metropolitan se ha convertido en el m¨¢s importante museo enciclop¨¦dico, con unas colecciones en 17 departamentos de conservaci¨®n que contienen dos millones de obras de arte que abarcan 5.000 a?os de la cultura de la humanidad, desde la prehistoria hasta el presente. El museo es de gesti¨®n privada y presenta m¨¢s de 30 exposiciones temporales al a?o. Montebello no entiende que en Espa?a la pol¨ªtica decida en el mundo del arte, aunque observa que en pa¨ªses como Espa?a, Francia e Inglaterra "est¨¢n empezando a cambiar las cosas" sobre la participaci¨®n del Estado en la cultura. "Es una cuesti¨®n psicol¨®gica, ya que el p¨²blico sabe si es el Estado el que paga o son los ciudadanos, como ocurre en Estados Unidos, donde es una costumbre hacer donaciones a museos, hospitales, universidades". Montebello afirm¨® que el museo no recibi¨® la oferta de compra del cuadro El barbero del Papa, de Vel¨¢zquez, que ahora se puede ver en el Prado.
El director del Met -que dijo que no se pensaba jubilar-, tras recibir el premio, en forma de una escultura de Blanca Mu?oz, se?al¨®: "La mayor¨ªa de mis logros han sido el resultado y el reflejo de un brillante equipo de colaboradores que felizmente me rodea en el museo". Coment¨® que las iniciativas y la labor diaria van a cargo del personal, sobre todo de los m¨¢s de cien conservadores "a quienes me consagro con honra y placer para facilitarles sus expectativas colectivas y personales". "El director ha de tener ideas y afrontar iniciativas propias, pero su principal y mayor funci¨®n es la de asegurar que los proyectos m¨¢s prometedores se lleven a cabo y, para que esto se realice, tiene que ganarse la confianza y el respeto de su personal as¨ª como a la inversa".
Philippe de Montebello, "la personificaci¨®n de la grandeza del Met" (Newsweek), cerr¨® el acto tras escuchar los elogios "a una de las personalidades m¨¢s destacadas del mundo del arte y la cultura" (Carlos Zurita, duque de Soria) y "una de las personalidades m¨¢s interesantes del mundo del arte de nuestros d¨ªas" (Rodrigo Ur¨ªa). Zugaza convirti¨® el homenaje en el "admirado reconocimiento de toda una nueva generaci¨®n de conservadores y responsables de museos a la persona de Montebello y a su ejemplar magisterio".
Babelia
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