La magia del grabado japon¨¦s 'ukiyo-e' llega al Museo Maeztu de Estella
La exposici¨®n re¨²ne cuarenta obras de once artistas cl¨¢sicos precursores del 'manga'
Utagawa Hiroshige (1797-1858) dibuj¨® luchadores de sumo, poetas y mujeres-fantasma que los grabadores fijaron para siempre en planchas de madera de cerezo de la pen¨ªnsula de Izu, pr¨®xima a la ciudad de Edo (Tokio). Hoy, 159 a?os despu¨¦s, la ukiyo-e, la "pintura del mundo flotante" de Hiroshige, el m¨¢s celebre de todos los grabadores japoneses, se exhibe en su fascinante sutileza de l¨ªneas y colores en las salas del museo Gustavo de Maeztu de Estella.
La pinacoteca navarra acoge una extraordinaria selecci¨®n de cuarenta grabados japoneses creados entre 1820 y 1890, que pertenecen a la colecci¨®n privada de los artistas Pilar Coomonte y Nicol¨¢s Gless. La expresi¨®n ukiyo-e surge por primera vez en los textos de la Edad Media japonesa con un sentido estrictamente religioso para designar la fragilidad de la vida. En el siglo XVII aparecieron en la ciudad de Edo unos grabados de enorme belleza a los que se comenz¨® a denominar as¨ª pero que, parad¨®jicamente, reflejaban el mundo del placer, de la moda, de las escenas de la vida cotidiana puestas al alcance de la poblaci¨®n general para su disfrute art¨ªstico y sensual.
Se produjo as¨ª una eclosi¨®n de artistas y tendencias que utilizaron telas sobre planchas de madera para crear todo un universo de escenas de casas p¨²blicas, teatro kabuki, grabados de cortesanas, bellas mujeres, estampas de actores, guerras y luchas ceremoniales, samur¨¢is y fantasmas de ultratumba. Entre ellos figura Kuniyoshi (1797-1861), samurai de profesi¨®n; Tsukioka Yoshitoshi (1839-1892), el m¨¢s venerado en Estados Unidos, precursor del c¨®mic y los dibujos manga, Kunisada (1786-1865), Keisai Eisen (1791-1848) y as¨ª hasta once artistas cl¨¢sicos, dibujantes y grabadores, forman parte de la muestra que el museo Gustavo de Maeztu presenta hasta finales del mes de diciembre.
"Como realizaci¨®n art¨ªstica tiene m¨¢s de trescientos a?os de existencia, pero constituye una aportaci¨®n de plena actualidad por la enorme influencia ejercida sobre la pintura actual y el hecho de haber sido el precursor del c¨®mic occidental y del fen¨®meno manga", apunta Pilar Coomonte.
La contemplaci¨®n de los grabados sobre tela (algod¨®n, lino, sedas) cautiva al espectador. El dibujo inicial (pincel y tinta negra sobre papel transparente) se pegaba sobre una madera plana de cerezo y se enviaba a la asociaci¨®n de impresores que ejerc¨ªa una f¨¦rrea censura previa y un control absoluto del proceso.
Cuadros de la vida
La tinta negra se hac¨ªa con sumi, una mezcla de holl¨ªn y cola y las tintas de colores, con pigmentos vegetales. Para ofrecer efectos brillantes a los trajes, espejos o pelos se usaba mica. El arroz a?ad¨ªa consistencia a los colores.
"Su capacidad para capturar en toda su esencia una personalidad, la expresi¨®n del momento, una presencia, son muy raras en el arte", explica Nicol¨¢s Gless. "Nos presentan un cuadro total de la vida de su tiempo, agitada, violenta, apasionada, con el valor a?adido de estar presenciando grabados cuya vida se plane¨® ef¨ªmera, ya que correspond¨ªan a un deseo moment¨¢neo, contempor¨¢neo a la ¨¦poca en la que fueron realizados. Los espectadores del teatro kabuki, por ejemplo, los adquir¨ªan tras las funciones para poseer parte del encanto que hab¨ªan contemplado entusiasmados". Los ¨¢lbumes er¨®ticos que describ¨ªan escenas de amor protagonizadas por parejas de amantes surgieron en el famoso barrio de place Yoshiwara. Con gran elegancia y escasos desnudos, los artistas elaboraron aut¨¦nticos manuales de sexo o libros de almohada de gran demanda y denominados shuinga, que eran producidos en series de doce copias y encuadernados en ¨¢lbumes con un notable objetivo de curiosidad did¨¢ctica que han trascendido hasta convertirse en estampas cl¨¢sicas del arte ukiyo-e.
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