El 'n¨²mero dos' de Acebes reconoce el "desastre" de los fallos policiales del 11-M

Ignacio Astarloa, n¨²mero dos de ?ngel Acebes en el Ministerio del Interior, calific¨® ayer de "desastre" y de "disparate" el c¨²mulo de fallos policiales previos al 11-M, especialmente los que afectaron a las investigaciones de 2001 y 2003 sobre la trama asturiana que -ya en febrero de 2003- acab¨® facilitando la Goma 2 ECO para la masacre, en la que murieron 191 personas y m¨¢s de 1.500 resultaron heridas. El que fue secretario de Estado de Seguridad hasta el 19 de abril subray¨® que no tuvo "la m¨¢s m¨ªnima noticia" sobre los chivatazos de los confidentes ni sobre por qu¨¦ no se investigaron. Astarloa insisti¨® en que su "impresi¨®n" sobre el 11-M, tras conocer datos tan "contundentes" como las decenas de detenciones ejecutadas durante su mandato y el suicidio de Legan¨¦s, es que la matanza "forma parte de la yihad", pero sigue sin descartar la "hip¨®tesis, que no la tesis" de la colaboraci¨®n de ETA.

"Tengo la impresi¨®n de que esto es parte de la 'yihad'; no s¨¦ si hay conexi¨®n o era una c¨¦lula local"

Ignacio Astarloa declara que no tuvo "la m¨¢s m¨ªnima noticia" del "disparate" de la trama asturiana

"Yo no he descartado a d¨ªa de hoy la intervenci¨®n de ETA en el atentado del 11-M"

El hoy responsable del ¨¢rea de Justicia e Interior en la direcci¨®n del PP declar¨® durante siete horas en la comisi¨®n del 11-M en el Conreso en una comparecencia que fue de guante blanco. Astarloa abri¨® la sesi¨®n con una larga declaraci¨®n en la que neg¨® que el Gobierno hubiese mentido entre el 11 y el 14 de marzo, reclam¨® un cambio de cultura mundial para enfrentarse al terrorismo islamista y subray¨® la necesidad de llevar "hasta sus ¨²ltimas consecuencias todas las l¨ªneas [de investigaci¨®n], se llamen ETA, Al Qaeda, servicios secretos; se llame como se llame". A su juicio, las pesquisas est¨¢n en mantillas, "en los principios", aunque se mostr¨® convencido de cu¨¢l ser¨¢ su final: "Yo tengo la tranquilidad enorme de que al final se sabr¨¢ la verdad".

El ex secretario de Estado insisti¨® en que el Gobierno "nunca minti¨®" entre el 11 y el 14 de marzo. "No hubo en esos d¨ªas la m¨¢s m¨ªnima manipulaci¨®n, ni conciencia ni voluntad de manipular nada". En todo caso, dijo, "nos equivocar¨ªamos". En esta l¨ªnea, calific¨® de "chorrada", pero tambi¨¦n de "maldad dolorosa y lamentable" la afirmaci¨®n de que el PP trat¨® de suspender las elecciones generales.

Pista falsa

Astarloa relat¨® c¨®mo en las primeras horas del 11-M la conclusi¨®n un¨¢nime de los expertos fue la autor¨ªa de ETA, pero que ¨¦sta se fue diluyendo. Pese a ello, el ex secretario de Estado tuvo la impresi¨®n de que las pistas que apuntaban al islamismo eran intencionadas. "Yo entonces estaba muy confuso. Pens¨¦ que me llevaban a un sitio al que me quer¨ªan llevar". ?se fue uno de los motivos por el que se pens¨® que la cinta cor¨¢nica que estaba en la furgoneta hallada en Alcal¨¢ pudiera ser "una pista falsa".

El hallazgo de la cinta abri¨® para Acebes y Astarloa la tesis de una posible colaboraci¨®n entre ETA y el terrorismo isl¨¢mico en el 11-M, algo que p¨²blicamente ninguno de los dos ha descartado a¨²n. "Yo no puedo decir que rotundamente considero que no es Al Qaeda. Tengo la impresi¨®n de que esto forma parte de la yihad, y lo que no s¨¦ es si hay una conexi¨®n o no, o si esto era una c¨¦lula local (...) Yo no he descartado hoy la intervenci¨®n de ETA; hay elementos que no la hacen l¨®gica y otros que dicen que s¨ª, por eso hay que investigar hasta el final (...) No hay datos contundentes, como lo son las detenciones o el suicidio de gente ligada a la yihad, y por eso hago una hip¨®tesis no una tesis. Si yo fuera el responsable ahora me ver¨ªa en la obligaci¨®n de investigarlo hasta el final, aunque haya quien crea que son bobadas interesadas ideol¨®gicamente, porque hay miles de personas que las creen y hay que investigarlas para dejarlas tranquilas", explic¨®.

El n¨²mero dos de Acebes quiso distinguir entre imprevisi¨®n y fallos policiales. Neg¨® la primera y admiti¨® que hubo una concatenaci¨®n de los segundos, pero que no los conoci¨®. Astarloa subray¨® que los informes sobre amenaza que han sido entregados a la comisi¨®n no eran "ajenos al Gobierno" porque fueron elaborados por Interior. "Esos informes y las ¨®rdenes de servicio forman parte de la acci¨®n del Gobierno. Son m¨ªos y responden a la comprensi¨®n de la amenaza". "Nunca pens¨¦ que el 11-M iba a servir para hacer pol¨ªtica. Nosotros la responsabilidad que tenemos es que est¨¢bamos en el Gobierno cuando ocurri¨®".

Lo que s¨ª admiti¨® Astarloa, tras una pregunta del diputado del PNV Emilio Olabarria, es que los fallos previos al 11-M en las investigaciones sobre las personas que resultaron implicadas en la matanza fueron "un desastre" y un "disparate". Olabarria hab¨ªa enlazado una serie de preguntas sobre las investigaciones fallidas y no realizadas en relaci¨®n a la trama de los explosivos de Asturias, la baja o nula atenci¨®n prestada a los confidentes que hablaban de tr¨¢fico de Goma 2 o los seguimientos fallidos que se hicieron a algunos de los islamistas luego detenidos.

Ni una noticia

La contestaci¨®n fue ¨¦sta: "Todo lo que usted me ha dicho no es eficiencia policial, es un desastre. Y entiendo que ese desastre es sobre el que tenemos que aclarar d¨®nde est¨¢n las responsabilidades. Usted no lo ha dicho, pero me lo voy a decir a m¨ª mismo: 'Es que esto es cosa suya, es usted el que manda en eso'. Pues yo tengo que decirle con toda claridad que de la mayor¨ªa (...) de esas cuestiones yo no tengo ni la m¨¢s m¨ªnima noticia mientras soy secretario de Estado de Seguridad, ni la m¨¢s m¨ªnima (...) Yo soy el primero que quiero saber de qui¨¦n ha sido el fallo (...) Por supuesto, todo lo que usted ha enumerado no es ni eficacia, ni no eficacia, es un disparate".

De los confidentes, especialmente de los de Asturias, mostr¨® su total desconocimiento, tanto sobre su existencia como de sus chivatazos. Lo m¨¢s que admiti¨® es que la primera noticia sobre esos "personajes" la tuvo el d¨ªa 19, cuando la Polic¨ªa habla de "un moro" [Raf¨¢ Zouhier], que puso en contacto a "un drogata", Emilio Su¨¢rez Trashorras, con los que podr¨ªan haber cometido el atentado. En la tarde de ese d¨ªa, la Guardia Civil detuvo a su propio confidente.