El Espanyol se sale en Zaragoza

S¨®lo hubo un equipo en la Romareda: el Espanyol. El Zaragoza, falto de tensi¨®n y descoordinado tanto en los movimientos ofensivos como en los defensivos, se limit¨® a correr detr¨¢s del bal¨®n, a verlas venir. Logro, no obstante, del conjunto blanquiazul, que, a base de paciencia, tes¨®n y calidad, domin¨® de principio a fin el encuentro, que fue un mon¨®logo. Miguel ?ngel Lotina, calmado en todo momento en su ¨¢rea t¨¦cnica, irradiaba felicidad. No era para menos. Desde que llegara en verano, siempre ha trabajado la posesi¨®n del bal¨®n, la salida desde atr¨¢s y los movimientos defensivos. Y ayer, sus hombres plasmaron a la perfecci¨®n esa idea de juego tan determinada y, por el momento, eficaz. El Zaragoza no mostr¨® el car¨¢cter necesario para llevarse los tres puntos; el Espanyol, s¨ª.

La afici¨®n ma?a tambi¨¦n ense?¨® su car¨¢cter, ya que evidenci¨® que no le ha perdonado a Dani, que el pasado verano prefiri¨® la oferta del Espanyol a continuar en La Romareda. Le silb¨®, abuche¨® e injuri¨®, pero, ante el ambiente hostil que le depar¨® la hinchada, Dani se acrecent¨®. Los dos conjuntos saltaron al terreno de juego con el mismo sistema t¨¢ctico (4-4-1-1) pero muchos fueron los matices que decantaron la balanza a favor del cuadro catal¨¢n. Los dos mediapuntas hicieron relucir esas diferencias. Mientras que el del Zaragoza, Javi Moreno, se quedaba est¨¢tico ante la buena circulaci¨®n del bal¨®n rival, el del Espanyol, Dani, acudi¨® siempre a los apoyos defensivos y fue el punto de referencia a la hora de atacar. Dem¨¦rito, no obstante, del Zaragoza, porque pareci¨® jugar con las l¨ªneas demasiado replegadas y atrasadas, lo que supon¨ªa que sus mediocentros, Movilla y Zapater, se encargaran de marcar a Ito y De la Pe?a en vez de a Dani. A su vez, ello propici¨® que los dos centrales, ?lvaro y Milito, dado que Dani se quedaba constantemente s¨®lo entre l¨ªneas, salieran de su zona y dejar¨¢n, as¨ª, espacios en la retaguardia. Justo lo que necesita Tamudo para ser peligroso.

El capti¨¢n del Espanyol, que reaparec¨ªa despu¨¦s de haber estado m¨¢s de un mes lesionado, hizo valer su movilidad, inteligencia y rentabilidad sobre el c¨¦sped. El tanto lleg¨® de este modo, tras una jugada muy larga del Espanyol. Dani retras¨® un poco su posici¨®n para recibir el bal¨®n y lanz¨® un pase por arriba hacia Tamudo, que, s¨®lo porque ?lvaro estaba desubicado y Milito le cubr¨ªa por delante en vez de por detr¨¢s, cruz¨® el bal¨®n ante la salida, desesperada de Luis Garc¨ªa.

V¨ªctor Mu?oz se desesperaba ante la carencia de empaque y de ideas de sus hombres, pero vari¨® los personajes y no el escenario. No alter¨® el sistema t¨¢ctico. Villa, que luch¨® ante la soledad, era el vivo retrato del equipo. Casi no toc¨® el bal¨®n, corri¨® en demas¨ªa y, en muchas ocasiones, se exasper¨® alzando los brazos a modo de lamento. Y es que el Espanyol tap¨® las bandas, por lo que Galletti y Savio se perdieron entre el rojo y negro que vest¨ªa el cuadro de Lotina, no dej¨® maniobrar a Movilla y, as¨ª, consigui¨® noquear por completo a su rival. Adem¨¢s, el conjunto de Lotina, apoyado con intensidad desde las gradas -cerca de dos mil aficionados se desplazaron a la capital aragonesa- sac¨® definitivamente los colores a un Zaragoza alica¨ªdo que mostr¨®, en un mismo partido, todas sus debilidades y flaquezas. En cambio, el Espanyol sali¨® fortalecido de un encuentro en el que jug¨® un magn¨ªfico primer tiempo, con mucha ambici¨®n, con Tamudo, Dani e Iv¨¢n de la Pe?a dando carta de naturaleza a una idea ofensiva muy interesante y que, tras lograr el gol, hizo valer con una seguridad defensiva que le permite ser, junto al Bar?a, el equipo menos goleado del torneo.