El presunto asesino de Lleida logr¨® pasaporte en Ecuador pese a ser un criminal en serie
Gilberto Chamba cumpli¨® ocho a?os por violar y asesinar a ocho mujeres en su pa¨ªs
Gilberto Chamba Jaramillo, el ciudadano ecuatoriano acusado de matar a una estudiante de Lleida en noviembre, lleg¨® a Espa?a hace cuatro a?os, meses despu¨¦s de cumplir una condena de ocho a?os en su pa¨ªs por haber violado y asesinado a ocho mujeres. El acusado consigui¨® r¨¢pidamente el pasaporte a pesar de sus antecedentes. En los archivos policiales de Machala (Ecuador) no consta su nombre. La polic¨ªa investiga ahora si el detenido estuvo en alguna otra ciudad espa?ola antes de llegar a Lleida, donde trabaj¨® dos meses de vigilante.
Gilberto Chamba consigui¨® el pasaporte y viaj¨® en 2000 desde Ecuador a Espa?a, meses despu¨¦s de salir de la c¨¢rcel, donde hab¨ªa cumplido condena por violar y matar a ocho mujeres. El acusado dispone del documento nacional de identidad para extranjeros y viv¨ªa en Espa?a con los papeles en regla, a pesar de que la obtenci¨®n del pasaporte en Ecuador y el permiso de residencia en Espa?a requieren la ausencia de antecedentes penales.
La gran inc¨®gnita por esclarecer es c¨®mo Chamba Jaramillo, al salir de prisi¨®n, logr¨® tramitar un pasaporte, con un historial policial libre pese a sus graves cr¨ªmenes. El juez de la provincia ecuatoriana de El Oro y responsable del caso, ?scar Solano Prendes, declar¨® ayer a este diario: "No s¨¦ c¨®mo sali¨® del pa¨ªs, si lo hizo de forma legal o ilegal. Lo cierto es que en la funci¨®n judicial est¨¢ registrada su sentencia y su ingreso en prisi¨®n. Pero ignoro si en los registros policiales consta como sentenciado. Deber¨ªa ser as¨ª y, adem¨¢s, deber¨ªa existir en el Tribunal Penal una copia de la sentencia". No obstante, seg¨²n fuentes extraoficiales, en la instituci¨®n policial de la provincia del Oro no existe, misteriosamente, ning¨²n registro.
Sin constancia en Interpol
A la espera de que desde Ecuador llegue la confirmaci¨®n oficial, los Mossos d'Esquadra est¨¢n convencidos de que el detenido en Lleida y el ecuatoriano que cumpli¨® condena en su pa¨ªs son la misma persona. Aunque, sorprendentemente, ni a la Interpol de Madrid ni a la de Quito les consta ning¨²n requerimiento a nombre de Gilberto Chamba. La secci¨®n de Ecuador ha pedido a Espa?a que le env¨ªe las 10 huellas dactilares para cotejarlas con las de su archivo.
Las coincidencias entre uno y otro dejan poco lugar a la duda, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n del caso del asesinato de Lleida. Fue un periodista ecuatoriano el que, tras ver la foto de la detenci¨®n en Lleida, cay¨® en la cuenta de que era el monstruo de Machala, como se conoce a Chamba en Ecuador. Adem¨¢s, tanto el asesino en serie como el hombre detenido en Espa?a comparten nombre y n¨²mero de pasaporte, el padre se llama igual y coincide la fecha de salida de Ecuador con la de entrada a Espa?a.
El juez Solano asegur¨® ayer que tanto en Ecuador como en Espa?a el asesino ecuatoriano ha demostrado una tranquilidad que confunde. "Por datos de prensa, conozco que Gilbert Chamba, durante las declaraciones ante la jueza espa?ola, present¨® la misma actitud pasiva que tuvo conmigo. El tipo es realmente un psic¨®pata. S¨®lo los psic¨®patas son capaces de actuar as¨ª, negando su culpabilidad despu¨¦s de tanta truculencia. Y es la misma t¨¢ctica que pone en juego en Espa?a para su defensa".
Los Mossos d'Esquadra y el Cuerpo Nacional de Polic¨ªa investigan ahora si antes de recalar en Lleida, donde trabajaba desde hac¨ªa dos meses, hab¨ªa vivido en alguna otra ciudad espa?ola. El detenido carece de antecedentes policiales desde su llegada a Espa?a, y en Lleida no constan mujeres desaparecidas.
Chamba fue detenido el 1 de diciembre por la muerte de Mar¨ªa Isabel Bascu?ana, estudiante de Derecho que hab¨ªa sido encontrada muerta una semana antes en el maletero de su coche. La v¨ªctima hab¨ªa sido estrangulada con un trapo. Los mossos encontraron las huellas del detenido en el coche y en los trapos con los que fue tapado el cuerpo. Chamba trabajaba desde hac¨ªa dos meses como vigilante en un aparcamiento cercano a la universidad donde acud¨ªa la v¨ªctima. El acusado ya hab¨ªa sido interrogado antes de ser detenido. Muchos de los compa?eros de la universidad informaron a la polic¨ªa de que la v¨ªctima se quejaba de que el vigilante la piropeaba cada d¨ªa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.