El Madrid saca la cabeza
Con Beckham y Roberto Carlos en el banquillo, el equipo de Garc¨ªa Rem¨®n saca ventaja de la debilidad a¨¦rea del Racing
A base de cabezazos, una suerte que no se le conoc¨ªa, el Madrid pesc¨® ayer una ag¨®nica victoria en un encuentro que le result¨® tortuoso durante muchos tramos. Se dio de bruces con un triunfo que el Racing le puso en bandeja con su defensa de plastilina. Por juego, el Madrid estuvo tan plano como es habitual, pero una dosis final de chicha le mantuvo en el partido hasta que Zidane martiriz¨® a los c¨¢ntabros con un cabezazo, el mismo ejercicio que hab¨ªa hecho el peque?o Owen en el primer tanto o Samuel en el pre¨¢mbulo del acierto de Ra¨²l en la segunda diana visitante. Entre cabezazo y cabezazo, el Madrid exhibi¨® las mismas fugas que en jornadas precedentes pese al ¨®rdago inicial de su t¨¦cnico.
RACING 2 - REAL MADRID 3
Racing: Aouate; Pedro L¨®pez, Oriol (Juanma, m. 70), Morat¨®n, Bertin, Regueiro (?lvarez, m. 82); Mor¨¢n, Anderson, Nafti (Parri, m. 75), Benayoun; y Javi Guerrero.
Real Madrid: Casillas; Michel Salgado, Helguera, Samuel, Ra¨²l Bravo; Javi Garc¨ªa (Celades, m. 77), Guti; Figo, Ra¨²l (Pav¨®n, m. 90), Zidane; y Owen (Morientes, m. 89).
Goles: 1-0. M. 24. Centro de Mor¨¢n al segundo palo, Oriol gana el bal¨®n por alto y remata de cabeza Benayo¨²n. 1-1. M. 34. Owen cabecea cruzado un pase de Javi Garc¨ªa. 2-1. M. 50. Javi Guerrero engancha con la izquierda un pase de Benayoun. 2-2. M. 60. Ra¨²l no perdona un centro de Samuel en la l¨ªnea de gol. 2-3. M. 92. Zidane remata libre de marca un bal¨®n de Morientes.
?rbitro: Mu?iz Fern¨¢ndez. Amonest¨® a Nafti, Morat¨®n, Samuel, Aouate y Bertin.
17.783 espectadores en El Sardinero.
De forma inesperada, Garc¨ªa Rem¨®n cambi¨® de planes en El Sardinero. Irremediablemente, la inopinada sentada de Beckham y Roberto Carlos rescat¨® de la retina el trueque con el que se despidi¨® Camacho a principios de curso. En Montju?c, Camacho hizo un gui?o a los altares directivos al dejar en el banquillo a Ra¨²l y Beckham. Anoche, tras una semana de tambores anunciando la inminente llegada de un m¨¢nager que vele por la reestructuraci¨®n deportiva, Garc¨ªa Rem¨®n record¨® a su padrino y predecesor. El t¨¦cnico movi¨® los peones, pero no alter¨® un ¨¢pice su cuaderno t¨¢ctico. Si alg¨²n virus de ¨²ltima hora forz¨® la decisi¨®n del m¨ªster, tiene poca l¨®gica que Beckham y Roberto Carlos tuvieran que someterse a una larga sesi¨®n fotog¨¦nica en el banquillo y ni siquiera se calentaran antes o durante el partido.
Fuera un motivo u otro, desterrado Beckham, el entrenador pudo tirar de Celades como socio de Guti o borrar el doble pivote con Zidane de enganche y Solari dando simetr¨ªa al medio campo. Nada de eso. Mantuvo inalterable el dibujo y el maquillaje apenas mejor¨® al Madrid de esta temporada. Su equipo fotocopi¨® uno a uno los graves defectos que arrastra desde el resbal¨®n con el Zaragoza en la ¨²ltima final de Copa. El Madrid hace tiempo que tiene un serio problema estructural. El modelo presidencial engorda la caja, sin duda, pero resulta una ecuaci¨®n imposible sobre el campo. Javi Garc¨ªa, compa?ero de Guti en los fogones, result¨® tan intrascendente como el cosm¨¦tico Beckham, con la salvedad de que el ingl¨¦s tiene un don para la estrategia que alguna vez ha socorrido al equipo. Lo mismo que Roberto Carlos, que lleva meses con juego excesivamente funcionarial y al que Ra¨²l Bravo tampoco subi¨® el list¨®n. Hoy d¨ªa tiene m¨¢s pilas que el brasile?o, pero le falta tacto. Lejos de mejorar en alg¨²n aspecto, por Cantabria, durante una hora, desfil¨® el Madrid an¨¦mico de los ¨²ltimos tiempos. Es decir, un equipo lento, asim¨¦trico, sin chispa alguna. La cantinela de siempre: Zidane, de extremo zurdo postizo y sin dep¨®sito para ir o venir; Figo, enredado en un laberinto de regates ajedrec¨ªsticos y sin veneno; Ra¨²l, sin br¨²jula; Samuel, con m¨¢s cuchillo que luces... S¨®lo Guti, como timonel, hizo los deberes de principio a fin.
De entrada, el conjunto de Lucas Alcaraz siempre estuvo varios pelda?os por encimo de su rutilante rival. Con tres novatos en la cueva -Bertin, Pedro L¨®pez y Oriol, debutantes esta temporada en Primera- se bastaba para sofocar al Madrid a 20 metros de la porter¨ªa de Aouate durante casi todo el primer periodo. Tieso el ataque madridista, al Racing le val¨ªa con dar pastilla al juego en cuanto robaba la pelota, un acto de lo m¨¢s sencillo frente a un contrario con s¨®lo tres centrocampistas puros -Guti, el cabo Garc¨ªa y el agotado Zidane-. Con la autopista abierta, Regueiro, Benayoun, Mor¨¢n y Javi Guerrero percutieron una y otra vez en la sala de espera de Casillas. El Racing no tiene un matador del ¨¢rea, por lo que precisa tejer en exceso cada ataque y no siempre cierra su ofensiva con un remate. Vive de la astucia de futbolistas como Javi Guerrero, que no es un pegador, pero es pillo. M¨¢xime, si las defensas le dan el mismo carrete que le concedi¨® la de Casillas en el segundo tanto local. Guerrero lleg¨® por el callej¨®n adecuado al pase de la orilla izquierda de Benayoun, magn¨ªfico futbolista, mientras una montonera de madridistas contemplaba la jugada desde su particular mirador. Lo mismo cabe decir de la defensa del Racing, que tiene demasiado acn¨¦. Le falta tanto techo que hasta el Madrid, que no se distingue por su cabeceo, le martiriz¨® por el aire y le enterr¨® a base de cabezazos.
Las dos primeras remontadas del Madrid no mejoraron el juego visitante, pero despertaron al equipo, que al menos en el segundo periodo puso m¨¢s picante. Jam¨¢s tuvo el control de las operaciones como se le supone a un equipo de alcurnia, pero se desperez¨® y acept¨® un intercambio de golpes. Con Guti como ¨²nico ancla, el Madrid se descosi¨® y a toque de corneta puso m¨¢s sangre. Del resto se encarg¨® Casillas, que apareci¨® justo a tiempo para sostener el empate hasta que irrumpi¨® la coronilla de Zidane para despe?ar al Racing en el ¨²ltimo suspiro. Los c¨¢ntabros pagaron con creces sus pecados defensivos, con lo que aliviaron a un Madrid tan espeso como de costumbre.
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