Un juez obliga a clausurar un bar de Parla por exceso de ruidos

El propietario del bar El Manchego de Parla se ha visto obligado a cerrar su negocio por exceso de ruido y a indemnizar a la inquilina del inmueble situado justo encima con 577 euros mensuales, seg¨²n la sentencia del Juzgado de Primera Instancia e Instrucci¨®n n¨²mero 4 de Parla. Actualmente el local est¨¢ alquilado a una mujer africana quien, seg¨²n la denunciante, es la causante junto a sus clientes de los ruidos.

La denunciante, Mar¨ªa Jos¨¦ Camacho, declar¨® que a su domicilio acudi¨® un perito judicial para comprobar los niveles de ruido que estaba soportando, el cual constat¨® que superaban los 70 decibelios permitidos. "Aqu¨ª ha venido un perito judicial y han dado unos decibelios infernales", subray¨®.

Asimismo explic¨® que no s¨®lo ella, sino muchos vecinos de su inmueble y algunos de otros colindantes, le han dicho "por las buenas" a la encargada del bar "que hiciera menos ruido, sobre todo por la noche, pero siguen con su m¨²sica, sus esc¨¢ndalos, sus voces, sus juergas y aqu¨ª no se acaba".

Camacho destac¨® tambi¨¦n que el suelo de su casa vibra durante todo el d¨ªa debido al intenso ruido producido en el interior del bar. As¨ª, a?adi¨® que desde que compr¨® su piso, hace 27 a?os, "el esc¨¢ndalo en el bar es continuo".