Una monograf¨ªa sobre Manterola describe la ingenier¨ªa de sus puentes
Debate entre los ingenieros de caminos sobre la creaci¨®n y el futuro de las obras p¨²blicas
La presentaci¨®n del libro Javier Manterola Armis¨¦n. Pensamiento y obra (Fundaci¨®n Esteyco), celebrada en el C¨ªrculo de Bellas Artes, de Madrid, se convirti¨® en un debate entre ingenieros de caminos sobre la creaci¨®n y futuro de las obras p¨²blicas. Los participantes, Miguel Aguil¨®, Javier Manterola, Julio Mart¨ªnez Calz¨®n y Javier Rui-Wamba, describieron la situaci¨®n de una profesi¨®n, desde la revoluci¨®n industrial a los programas de ordenador, hasta una situaci¨®n actual que ha pasado de la reflexi¨®n al capricho. "Dentro de poco los puentes se comprar¨¢n en las tiendas", afirm¨® Manterola.
La monograf¨ªa del ingeniero de caminos, canales y puertos Javier Manterola (Pamplona, 1936) est¨¢ publicada por la Fundaci¨®n Esteyco (www.esteyco.es), fundada en 1991 para contribuir al progreso de la ingenier¨ªa y de la arquitectura en nuestro pa¨ªs.
Su presidente, Javier Rui-Wamba, manifest¨® en la presentaci¨®n del libro que la historia de la civilizaci¨®n no se entiende sin la ingenier¨ªa, desde la creaci¨®n de los caminos y los pasos de arroyos en la evoluci¨®n de la ganader¨ªa y la agricultura. "Los ingenieros hablamos de c¨¢lculos, estructuras, pero tambi¨¦n de otras muchas cosas, entre ellas de imaginaci¨®n".
Manterola se refiri¨® a la evoluci¨®n de la ingenier¨ªa estructural, con las relaciones entre lo resistente y la ciencia desde principios del siglo XIX, el mundo complejo que comparten la ingenier¨ªa y la arquitectura. "La ¨¦poca m¨¢s gloriosa de la ingenier¨ªa se desarroll¨® entre 1800 y 1970, un tiempo de descubrimiento, de creaci¨®n de lo nuevo, con la construcci¨®n met¨¢lica y de hormig¨®n que crean un universo formal nuevo", declar¨®.
A?ade que el mundo de los puentes desarrolla un "mundo conceptual nuevo", desde que el control del mundo f¨ªsico tom¨® las direcciones de la ingenier¨ªa como herramienta y la construcci¨®n monumental, y lo resistente fue arcaico, moderno y, en la actualidad, decadente. "Las enormes posibilidades de la ingenier¨ªa no debe ser la tumba de la ingenier¨ªa".
Manterola abre la monograf¨ªa con un breve texto en el que asegura que "uno es responsable de su experiencia" y que "la claridad que se obtiene con el orden interno que se confiere a la construcci¨®n de la obra produce en el observador entendimiento".
Miguel Aguil¨® aporta en el libro una descripci¨®n detallada de la obra construida de Manterola, unos setenta puentes -que se identifica como principal responsable, proyectados en su mayor¨ªa en el estudio Carlos Fern¨¢ndez Casado, SL-, en una variedad de vigas, p¨®rticos, celos¨ªas, arcos y puentes atirantados, realizados en hormig¨®n, acero y mixtos, adem¨¢s de pasarelas, acueductos y puentes levadizos.
Aguil¨® entra en esta variedad y abundancia, materiales y formas, tipos estructurales y el proceso creativo. Divide el ensayo en cuatro grandes etapas profesionales, con los primeros edificios (Torres Blancas y BBVA, con S¨¢enz de Oiza) y puentes con vigas, entre 1964 y 1976, como el puente de Cuatro Caminos, para seguir por la incorporaci¨®n del tirante y el inicio del p¨®rtico (1976-1990), caso del puente en el embalse de Barrios de Luna o del puente sobre el Nal¨®n en Sama de Langreo. En los a?os noventa se centra en la recuperaci¨®n del arco y la celos¨ªa, como el puente del Pilar en Zaragoza y sobre el Pisuerga en Valladolid, y el puente de Euskalduna en Bilbao. Los ¨²ltimos a?os entran en el "dominio tipol¨®gico y enriquecimiento formal", con el puente sobre el r¨ªo Escudo, acueducto para el Canal Imperial de Arag¨®n y puentes sobre el Guadalquivir en C¨®rdoba o del Centenari en Montserrat.
Aguil¨® dijo en la presentaci¨®n que "el discurso cr¨ªtico sobre la ingenier¨ªa tiene dificultades y riesgo", ante la ausencia de libros con un discurso cr¨ªtico sobre la ingenier¨ªa estructural y la justificaci¨®n tecnol¨®gica de la forma. "El Euskalduna es el mejor puente de Espa?a", asegur¨® al comentar el enorme esfuerzo creativo de los profesionales, sobre todo a partir de los a?os ochenta, con la entrada en Europa y las t¨¦cnicas inform¨¢ticas.
El ingeniero Julio Mart¨ªnez Calz¨®n se refiri¨® a lo estructural en la arquitectura, y distingui¨® los proyectos que ocultan estos elementos y los que utilizan la estructura como una arquitectura propia. Tambi¨¦n se?al¨® las transformaciones que provoca el ordenador en las geometr¨ªas, "en un campo que se pasa de la reflexi¨®n al capricho de las formas gratuitas". "La belleza y precisi¨®n estructural de las Torres de Col¨®n, en Madrid, se han convertido despu¨¦s en una caja de zapatos coronada por un enchufe". Prefiere el lenguaje de Manterola, "el lenguaje de exigencia a trav¨¦s del dominio del ser de los materiales, de la gran experiencia, hasta lograr la aut¨¦ntica verdad del hecho estructural".
El pensamiento de Manterola aparece en la publicaci¨®n a trav¨¦s de las cien respuestas a otras tantas preguntas de Javier Rui-Wamba, y otras cuestiones sobre la formaci¨®n del criterio, los detalles del proyecto, los materiales, las formas curvas y la atracci¨®n de lo nuevo, adem¨¢s de un perfil biogr¨¢fico escrito por Mario Onzain.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.