"Confi¨¢bamos en que Ibarretxe no aceptar¨ªa los votos de Batasuna"

Jordi Sevilla, ministro de Administraciones P¨²blicas, fue el primer miembro del Gobierno socialista que se entrevist¨® con el lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, para recuperar las relaciones entre la Administraci¨®n central y la vasca. Acudi¨® al despacho del lehendakari en Vitoria y sali¨® moderadamente satisfecho. Ahora se muestra sorprendido de que Ibarretxe haya sacado adelante su plan soberanista con los votos de Batasuna.

Pregunta. ?Sorprendi¨® al Gobierno socialista que saliera aprobado el plan Ibarretxe gracias a los votos de Batasuna?

Respuesta. Confi¨¢bamos en que no se llegara a esa situaci¨®n y que Ibarretxe cumplir¨ªa su palabra de que no iba a sacar adelante su plan soberanista con los votos de Batasuna. Pero el apoyo esquizofr¨¦nico de Batasuna al plan Ibarretxe deb¨ªa servir al Gobierno vasco para reflexionar. Si una formaci¨®n como Batasuna, que tiene como estrategia pol¨ªtica el "contra peor, mejor", decide apoyar el plan Ibarretxe para aprobarlo es porque es lo peor para la democracia. Ibarretxe y el PNV deben reflexionar sobre ello.

"Si el 'lehendakari' persiste en llevar adelante su plan y someterlo a consulta popular, el Gobierno recurrir¨¢ ante el Constitucional"

"El apoyo esquizofr¨¦nico al plan por parte de Batasuna, que quiere lo peor para la democracia, deber¨ªa hacer reflexionar al Ejecutivo vasco"

"Todos tenemos claro que es inconstitucional. Los ciudadanos deben saber que el plan rompe la relaci¨®n del Pa¨ªs Vasco con Espa?a y con la UE"

P. ?La inesperada aprobaci¨®n en el Parlamento vasco del plan Ibarretxe altera la estrategia del Gobierno sobre la reforma de los estatutos de autonom¨ªa si se tiene en cuenta que el primero que se esperaba era el catal¨¢n?

R. Reafirma la necesidad de llevar adelante las reformas que el presidente del Gobierno plante¨® en el debate de investidura. Hay una parte importante de espa?oles que quieren esas reformas para fortalecer el Estado auton¨®mico y avanzar en el reconocimiento de la pluralidad de Espa?a. Tambi¨¦n reafirma la idea de que el inmovilismo no es la soluci¨®n y que hay que manejar la situaci¨®n con delicadeza.

P. ?Pero no cree que ha empezado con mal pie el proceso de reformas de los estatutos cuando la primera que va a llegar al Congreso, el plan Ibarretxe, ser¨¢ rechazada por inconstitucional?

R. No si dejamos que la democracia funcione y que las previsiones constitucionales y legales funcionen. La presentaci¨®n del plan Ibarretxe en las Cortes va a abrir el debate sobre la necesidad de las reformas de los estatutos y sus l¨ªmites. Se va a ver que el inmovilismo no es la soluci¨®n y tambi¨¦n que no todo es posible, que no puede reabrirse el pacto constitucional de 1978 de arriba a abajo. Ese debate servir¨¢, por tanto, para fijar posici¨®n en las sucesivas reformas de estatutos.

P. La primera decisi¨®n que ha tomado el Ejecutivo socialista ha sido la de rechazar la propuesta del lehendakari de negociar el plan Ibarretxe "de Gobierno a Gobierno" y abrir el plan al debate parlamentario. A la par ha descartado, al menos moment¨¢neamente, el recurso al Tribunal Constitucional. ?Por qu¨¦?

R. Todos tenemos claro que es un plan inconstitucional. Con su pretensi¨®n de negociar el plan con Zapatero, Ibarretxe quiere trasladar su problema de falta de consenso en el Pa¨ªs Vasco al presidente del Gobierno. Hay, adem¨¢s, un alto porcentaje de vascos que no conoce el plan Ibarretxe y otro alto porcentaje, la mitad aproximadamente, que cree que es un disparate. Hay que dar, por tanto, la oportunidad de que la gente conozca que este plan no es la mera reforma de un art¨ªculo de la Constituci¨®n. La ciudadan¨ªa tiene que saber que rompe la relaci¨®n del Pa¨ªs Vasco con Espa?a y con la Uni¨®n Europea y que le lleva al aislamiento del siglo XIX. Por eso hay que abrir el debate pol¨ªtico sin miedo, antes que el jur¨ªdico.

P. ?Cree que el PP va a aceptar esta estrategia del Gobierno? ?No cree que el PP puede recurrir por su cuenta el plan Ibarretxe ante el Tribunal Constitucional o pararlo en la Mesa del Congreso, antes de que se debata en un pleno de la C¨¢mara baja?

R. Espero que el PP se convenza de que la estrategia del Gobierno es razonable. Ante un proyecto que ha sido aprobado por un Parlamento, en este caso el vasco, la respuesta no puede ser judicial, acudir al Tribunal Constitucional. Tiene que ser abordado pol¨ªticamente, por una instancia tambi¨¦n parlamentaria y, adem¨¢s, de mayor rango como es el Congreso. Hay que impedir ofrecer a Ibarretxe argumentos victimistas, como el de que el Gobierno de Madrid no quiere debatir. Ya hemos aprendido que el caldo de cultivo del nacionalismo es el victimismo y sin victimismo se queda sin campo de juego. Tenemos que lograr que la opini¨®n p¨²blica pida cuentas a Ibarretxe sobre su plan porque ha sido ¨¦l, y no el Gobierno central, el que ha roto las reglas de juego.

P. ?Descarta entonces el Gobierno socialista recurrir el plan Ibarretxe ante el Constitucional?

R. Una vez que se haya debatido en el Parlamento y se haya votado su rechazo, si Ibarretxe persiste en llevar adelante su plan y someterlo a consulta popular en el Pa¨ªs Vasco, en ese caso el Gobierno recurrir¨ªa ante el Tribunal Constitucional.

P. ?No teme que el PP acuse a este Ejecutivo de debilidad si no recurre desde ahora el plan ante el Tribunal Constitucional?

R. La cantinela del PP de calificar a este Gobierno de d¨¦bil es tan reiterativa que ya no es cre¨ªble. Tenemos que partir de la experiencia anterior y sabemos lo que no ha funcionado. El Tribunal Constitucional ya rechaz¨® la pretensi¨®n del Gobierno Aznar de recurrir el plan Ibarretxe, una vez que lo aprob¨® el Gobierno vasco. Se ha demostrado que la estrategia de confrontaci¨®n no ha sido ¨²til. Hay que darle una oportunidad a la democracia y al debate, a que los ciudadanos vascos conozcan el plan Ibarretxe y confiar en que, una vez comprobado el perjuicio que acarrea a la sociedad vasca, lo rechace. Esta estrategia va a ser m¨¢s fruct¨ªfera para afrontar el plan Ibarretxe.

P. Esta estrategia supedita el futuro del plan Ibarretxe a lo que suceda en las urnas vascas en las elecciones de mayo. ?Cree que va a producirse el vuelco de opini¨®n en el Pa¨ªs Vasco que no se produjo en las elecciones auton¨®micas de hace cuatro a?os?

R. Ante todo, quiero insistir en que el plan Ibarretxe no entrar¨¢ en vigor. Hay mayor¨ªa suficiente en el Congreso para impedirlo, pero queremos que se debata para que la ciudadan¨ªa tenga argumentos. Despu¨¦s lo rechazaremos en el Congreso por inconstitucional y nocivo para la sociedad. Pero tambi¨¦n sabemos que Ibarretxe va a hacer de este plan el eje de su campa?a electoral. Espero de la sensatez pol¨ªtica de la ciudadan¨ªa vasca que rechace las propuestas de Ibarretxe en esas elecciones.