La pulga en la oreja

Entre los libros de L¨¢zaro Covadlo (Buenos Aires, 1937; residente en Barcelona desde 1975) destaca la colecci¨®n de relatos Agujeros negros (Mondadori, 1998). Enrique Vila Matas dijo que los 12 cuentos de ese volumen son "excepcionales" y que "exploran el coraz¨®n de nuestras tinieblas"; y, en estas p¨¢ginas, Marcos Giralt Torrente escribi¨®: "Uno de esos libros de verdad sobresalientes". En una de esas narraciones, Covadlo intentaba una actualizaci¨®n del mito f¨¢ustico, imaginando qu¨¦ forma asumir¨ªa, en el mundo de hoy, el pacto entre un hombre y el ¨¢ngel ca¨ªdo. Esa misma inquietud est¨¢ en la base de Criaturas de la noche, novela con la que el escritor argentino ha ganado el Premio Caf¨¦ Gij¨®n de 2004.

Criaturas de la noche se

deja regir por la fruici¨®n del humor absurdo, un polo siempre encendido en la obra de Covadlo pero contrastado hasta ahora por una cierta voluntad de realismo. El protagonista de la novela, Dionisio Kauffmann, es un "pringado" sin m¨¢s destino que la mediocridad y el fracaso. Pero un d¨ªa se instala en su oreja una pulga, que le dicta con certeza lo que debe hacer para ganar dinero, conquistar a las mujeres que antes lo despreciaban, acceder a los c¨ªrculos con los que nunca hubiera so?ado. En ocasiones estos consejos adquieren la forma de peque?as coplas o boleros: "Yo soy la pulga, Dionisio / la que ha venido a rescatarte, / del vicio...". S¨®lo que el bicho sabio exige compensaciones y somete a Dioni, como lo llama, a duras pruebas de fidelidad, de las que ¨¦l reniega. En este tira y afloja transcurre la novela, con el comp¨¢s de las amantes rendidas, los maridos engatusados, las billeteras y las copas llenas y al rato vac¨ªas. Al final hay un crescendo carnavalesco, que incluye una incursi¨®n por el g¨¦nero fant¨¢stico-futurista, y que explota en un ¨¦xtasis como de org¨ªa monumental, en el delirio de irradiaciones orgi¨¢sticas propias del pacto diab¨®lico.

En algunos comentarios de esta novela aparecidos en la prensa brillaron, con resplandor lateral, los nombres de Kafka y de Bruno Schulz. No habr¨ªa que olvidar, adem¨¢s, el famoso vodevil de Georges Feydeau La pulga detr¨¢s de la oreja (1907), muy representado en Argentina (incluso se llev¨® al cine en los ochenta). De hecho, Criaturas de la noche parece un amplio desarrollo sobre esa expresi¨®n popular: "Tener la pulga detr¨¢s de la oreja". Ya Augusto Monterroso, en una de sus celebradas f¨¢bulas (en La oveja negra, 1981), se refer¨ªa a una pulga que, en las noches de insomnio, imagina ser Kafka, Joyce o Goethe. La pulga de Covadlo tiene, no hay duda, un encomiable abolengo.