Ni?os de padre conocido

La ¨²ltima vez que Alejo P. R. vio a sus dos hijos gemelos era a finales de noviembre de 1999, ten¨ªan 15 d¨ªas de vida y todav¨ªa no hab¨ªan abandonado el hospital de Sevilla donde nacieron con el s¨ªndrome de abstinencia, consecuencia de la toxicoman¨ªa de su madre. La Junta de Andaluc¨ªa, que ven¨ªa siguiendo el caso de la familia desde que le hab¨ªa retirado la custodia de su primera hija, declar¨® el desamparo de los peque?os, que ingresaron nada m¨¢s recibir el alta en un centro de protecci¨®n. "No los conozco, no he vuelto a verlos", declara hoy Alejo, un alba?il de 59 a?os nacido en un pueblo granadino. La madre de los peque?os muri¨® tres meses despu¨¦s debido a una sobredosis de pastillas.

Los ni?os han cumplido cinco a?os e ignoran cu¨¢l ser¨¢ su hogar dentro de otros cinco

El desamparo de los gemelos fue ratificado el 29 de marzo de 2000 por el delegado provincial de Asuntos Sociales de Sevilla, que propuso darlos a una familia en r¨¦gimen de acogimiento previo a la adopci¨®n. Desde entonces, los ni?os han permanecido con esta pareja, que aspiraba a adoptarlos. De hecho, Asuntos Sociales propuso al juzgado de familia que se tramitase la adopci¨®n de los hermanos. Las razones eran que la madre hab¨ªa fallecido y que el padre era "desconocido". Sin embargo, el expediente administrativo de la familia recog¨ªa entrevistas con Alejo.

?ste pregunt¨® reiteradamente por la suerte de sus hijos, pero no recibi¨® respuesta ni notificaci¨®n de la Administraci¨®n. S¨®lo descubri¨® que los peque?os iban camino de ser adoptados por una familia sevillana cuando puso una denuncia ante el juzgado de guardia por el "secuestro" de los gemelos. Era el 21 de diciembre de 2000. La batalla judicial que entabl¨® entonces prosper¨® y los ni?os no fueron dados en adopci¨®n. Tanto el Juzgado de Primera Instancia n¨²mero 17 como la Audiencia de Sevilla concluyeron que no proced¨ªa la adopci¨®n, puesto que el padre, "que no estaba incurso en causa de privaci¨®n de patria potestad", se negaba a tal medida.

En febrero de 2003, cuando los gemelos ya hab¨ªan cumplido tres a?os, la Secci¨®n Segunda de la Audiencia le daba la raz¨®n de forma rotunda: "... El acogimiento preadoptivo y la adopci¨®n ¨²nicamente deben promoverse cuando sea previsible la imposibilidad de reinserci¨®n en la familia biol¨®gica y, de otra parte, el padre no era en absoluto desconocido para la entidad p¨²blica...".

Estas sentencias han servido de sustento al abogado Gabriel Velamaz¨¢n para reclamar 710.800 euros "en materia de responsabilidad patrimonial" a la Junta por los da?os causados al alba?il. El Consejo Consultivo, ¨®rgano asesor de la Junta, le dio la raz¨®n en noviembre pasado, si bien rebaj¨® a 100.000 euros la indemnizaci¨®n. Desde la muerte de su pareja, Alejo asumi¨® en solitario el cuidado de la ¨²nica hija que no le han retirado los servicios de protecci¨®n de menores. Su capacidad para ello fue reconocida por los propios jueces. "Yo hago de padre y de madre, le lavo la ropa, le coso, le hago de comer, no es tan dif¨ªcil, y hablo con los profesores, la ni?a es la n¨²mero uno", se ufana.

Alejo pudo volver a ver a sus hijos, en fotos, en un encuentro, auspiciado por una fiscal que intervino en el caso, con la familia de acogida de los gemelos. El ¨²ltimo fallo del juzgado de familia, de septiembre de 2004, es contrario a la devoluci¨®n inmediata de los gemelos a Alejo, pero establece un r¨¦gimen de visitas. Ambas partes han presentado recursos para quedarse con unos ni?os que, como pudo comprobar su padre, ya no conservan ni sus nombres de nacimiento.Han cumplido cinco a?os e ignoran cu¨¢l ser¨¢ su hogar dentro de otros cinco.