Terror elegante

Hace unos tres meses se estren¨® en Espa?a Misteriosa obsesi¨®n, pel¨ªcula de Joseph Ruben protagonizada por Julianne Moore, que encuadrada en el ¨¢mbito de las intrigas psicol¨®gicas, jugaba muy bien con los elementos dram¨¢ticos, sobre todo en su primer tercio de metraje. Justo lo que le ocurre tambi¨¦n a White noise, filme de terror que, a trav¨¦s de una mesurada y elegante direcci¨®n, es capaz de conmover dram¨¢ticamente y de poner el vello de punta de forma terror¨ªfica casi en una misma escena.

El desconocido director Geoffrey Sax, veterano realizador de televisi¨®n que hace su debut en la pantalla grande, utiliza muy bien un fundamento tan cl¨¢sico del cine de terror (y de las leyendas urbanas) como son las psicofon¨ªas, es decir, grabaciones de mensajes transmitidos desde el m¨¢s all¨¢ por muertos que desean comunicarse con el m¨¢s ac¨¢. Sax se recrea poniendo nervioso al espectador con dos situaciones tan mundanas como el insoportable ruido de un dial de la radio que no acaba de sintonizar con nitidez emisora alguna, y como la siempre inquietante niebla de una televisi¨®n que no capta ninguna cadena. Sin embargo, es una pena que, en la media hora final, el gui¨®n se limite simplemente a enlazar cabos sueltos y a ofrecer explicaciones m¨¢s o menos razonables.