La fiscal¨ªa cambia de criterio sobre Scilingo y pide 9.138 a?os de c¨¢rcel por genocidio

La fiscal Dolores Delgado formul¨® ayer la primera acusaci¨®n que la Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional ha realizado contra el ex militar Adolfo Scilingo por su confesada y luego desmentida participaci¨®n en los vuelos de la muerte y otros cr¨ªmenes cometidos durante la dictadura argentina (1976-1983). El anterior fiscal, Pedro Rubira, hab¨ªa pedido el archivo del caso por entender que no pod¨ªa ser juzgado en Espa?a. Sin embargo, la fiscal Delgado acus¨® ayer a Scilingo por delitos de genocidio y terrorismo y solicit¨® para ¨¦l penas que suman 9.138 a?os de prisi¨®n.

La fiscal formul¨® esa petici¨®n por considerar que debe aplicarse el C¨®digo Penal espa?ol vigente en el momento de los hechos, el de 1973, m¨¢s favorable para Scilingo, pero plante¨® tambi¨¦n otras alternativas que, en alg¨²n caso, llegaban a un total de 11.370 a?os de c¨¢rcel. El m¨¢ximo legal de cumplimiento son 30 a?os.

En su petici¨®n principal, la fiscal Delgado califica los hechos como genocidio, 30 asesinatos que se refieren a las 30 personas que fueron arrojadas al mar en los dos vuelos de la muerte en los que particip¨® Scilingo, 93 delitos de lesiones y 255 delitos de terrorismo, que responden a las personas cuya desaparici¨®n ha podido acreditarse. La fiscal considera que son de aplicaci¨®n las agravantes de alevos¨ªa, prevalerse del car¨¢cter de autoridad p¨²blica y ensa?amiento.

No obstante, y aunque la fiscal mantiene su acusaci¨®n por delito de genocidio, ¨¦ste implica la voluntad de eliminar a un grupo nacional, ¨¦tnico o religioso, y ante la eventualidad de que el tribunal no apreciase esa finalidad, ha formulado una calificaci¨®n alternativa por cr¨ªmenes contra la humanidad. Aunque ambos delitos son muy similares, la diferencia estriba precisamente en que en el genocidio debe haber intenci¨®n de exterminar al grupo, mientras que en los cr¨ªmenes de lesa humanidad es suficiente la existencia de ataques generalizados o indiscriminados contra un colectivo m¨¢s o menos amplio.

En un informe muy t¨¦cnico, la fiscal Delgado analiz¨® todas las declaraciones del acusado y los testimonios y documentos que se han ido viendo a lo largo de estas semanas de juicio, para concluir que los hechos han quedado completamente acreditados en el juicio contra el ex militar y que debe ser condenado.

La fiscal record¨® c¨®mo Scilingo hab¨ªa realizado una confesi¨®n completa de su participaci¨®n de dos de los vuelos de la muerte, que se realizaron en junio y agosto de 1977, y en los que se lanzaron al mar a un total de 30 personas a las que previamente se hab¨ªa drogado con un tipo de suero de la verdad utilizado por la Marina argentina llamado Pentonaval. Tambi¨¦n aludi¨® a c¨®mo Scilingo hab¨ªa narrado su paso por la Escuela Superior de Mec¨¢nica de la Armada (ESMA), donde fue visto por una embarazada, Marta ?lvarez, que luego declar¨® como testigo en el juicio identific¨¢ndole sin ning¨²n g¨¦nero de dudas.

Record¨® c¨®mo el ex militar, en su calidad de jefe de electricidad del acuartelamiento, ten¨ªa acceso libre por el mismo y que por tanto pudo conocer de primera mano las atrocidades que se cometieron en la ESMA, los interrogatorios, las torturas, los "asados" (incineraciones de cad¨¢veres de las personas que no hab¨ªan resistido los interrogatorios) y los secuestros de los ni?os nacidos en el centro.

La fiscal mencion¨® la jurisprudencia del Tribunal Supremo y del Constitucional para se?alar que las declaraciones autoinculpatorias de Scilingo son suficientes para condenarle puesto que han sido "sobradamente corroboradas" por otras pruebas de cargo. El hecho de que el acusado se haya retractado en sus declaraciones iniciales, para la fiscal, no supone la inexistencia de pruebas sino que el tribunal deber¨¢ valorar las contradicciones en las que ha incurrido y cu¨¢l es la versi¨®n m¨¢s cre¨ªble.

Voluntario y arrepentido

Y para Delgado no hay ninguna duda. Scilingo acudi¨® voluntariamente a declarar porque estaba arrepentido y reconoci¨® que hab¨ªa formado parte del plan sistem¨¢tico de la Armada argentina para erradicar a los subversivos. "Todo est¨¢ confirmado por varios testigos, por los v¨ªdeos y los documentos que corroboran su estancia en la ESMA", dijo la fiscal.

Luego, seg¨²n Delgado, Scilingo cambi¨® sus declaraciones "cuando vio que las cosas iban en serio, y le notificaron el auto de procesamiento".

La fiscal desmont¨® las razones esgrimidas por Scilingo para justificar que sus confesiones al juez Baltasar Garz¨®n eran mentira. Destac¨® que el acusado nunca hasta ahora hab¨ªa mencionado el odio que dice profesar a uno de los jefes de la primera Junta Militar y ex m¨¢ximo responsable de la Armada, Emilio Massera, por haber supuestamente ordenado la detenci¨®n de su hermana. Un dato de evidente relevancia que nunca refiri¨® a nadie. Hasta ahora.