Tap¨®n kilom¨¦trico en Tr¨¢fico
Casi 2.200 personas acuden a diario a la Jefatura Provincial, donde hacen de dos a tres horas de cola para realizar su gesti¨®n
A las 12.20, el panel luminoso muestra el n¨²mero 374. En ese momento aparece por la puerta Leonor Gonz¨¢lez. En la mano, un papel con otra cifra: 677. La diferencia entre ambas (303) es la cantidad de personas que pasar¨¢n antes que Leonor para realizar su gesti¨®n. Doce personas atienden en las 21 ventanillas disponibles. Entre dos y tres horas de cola. "Pat¨¦tico". Es un d¨ªa cualquiera en la Jefatura Provincial de Tr¨¢fico de Madrid.
La sede de Tr¨¢fico es un gran bloque rectangular de hormig¨®n y ladrillo levantado en el n¨²mero 143 de la calle de Arturo Soria. Este edificio es el ¨²nico sitio al que acudir en toda la regi¨®n para tramitar cualquier aspecto relacionado con veh¨ªculos, conductores y sanciones. En la regi¨®n hay 2.655.800 conductores, seg¨²n datos de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT) de diciembre de 2003. Quien necesite hacer alguna gesti¨®n tiene que pasar por aqu¨ª. S¨®lo hay una alternativa: las gestor¨ªas. Leonor llega prevenida. Es una habitual y sabe lo que hay. "Traigo un libro". Trabaja para un despacho de abogados, aunque esta vez viene para hacerle un favor a su hija, que necesita renovar su carn¨¦ de conducir. Como conductora bien podr¨ªa haber sido un simple cambio de domicilio, una pr¨®rroga, un duplicado o la obtenci¨®n de alg¨²n permiso especial. Todos esperan en el mismo sitio y el mismo tiempo. Todos pasan por las mismas ventanillas, aunque no todos con la misma agilidad. Tr¨¢fico calcula que unas 2.200 personas entran cada d¨ªa por las puertas de su sede madrile?a en un horario que va de las 8.30 a 17.00.
Nada m¨¢s llegar, la primera cola. Unos cinco minutos para que el primer funcionario oriente al visitante sobre d¨®nde ir y con qu¨¦ papel. De aqu¨ª se va a la primera o a la segunda planta en funci¨®n de qu¨¦ tipo de tr¨¢mite se viene a hacer: veh¨ªculos o conductores.
Previo paso por caja, claro, donde se intercambia el dinero correspondiente por el numerito. Rara es la gesti¨®n que no cuesta dinero. Los que acuden a pagar sanciones pueden ahorrarse esta primera espera y subir directamente, pero s¨®lo se enteran cuando, una vez hecha ya la cola, ven el cartel que avisa de esta posibilidad pegado a la ventanilla.
Arriba, en la segunda planta, un joven se acerca a Leonor para resolver una duda. "?Me vale el resguardo del DNI? Es que el carn¨¦ me lo han robado y s¨®lo tengo esto..." "Mejor pregunta por si acaso". Es un caso habitual. En la enorme sala esperan su turno entre 250 y 300 personas y en cerca de tres horas de espera da tiempo a hacer amigos, preguntar, asegurarse que todos los papeles est¨¢n bien. Algunos hasta especulan con que hay quien compra n¨²meros para no tener que esperar. Pero sobre todo la gente se queja. Mientras los n¨²meros avanzan hacia el 699 para volver al cero, se oye una amplia gama de protestas m¨¢s o menos educadas. "Es una falta de consideraci¨®n", "tercermundista" o "esto es un caos" son algunas de las suaves. "Alguna vez incluso ha venido la polic¨ªa", recuerda Leonor. Al menos ahora la cola no es f¨ªsica, es figurada. Hace unos diez a?os la gente esperaba de pie, en fila, su turno. Agotador. Los 170 asientos que Tr¨¢fico instal¨® entonces, con el cambio de sistema, se quedaron cortos pronto. Hoy, muchos vuelven a esperar de pie, aunque cada uno donde quiere.
Pasada una hora, la cola ha avanzado hasta el 485. Los funcionarios han atendido a 111 personas. La espera seguramente ser¨ªa menor si todas las plazas del centro estuvieran cubiertas. Actualmente hay 100 plazas vacantes en una plantilla de 306. Hay un 35% menos de trabajadores respecto al n¨²mero ideal. Las condiciones de trabajo -estr¨¦s, quejas- no son las ideales. "Es un destino que los funcionarios no desean", explica Francisco Altozano, portavoz de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT). Nunca se han cubierto todas las plazas. Para paliar esta situaci¨®n, la DGT prepara un plan de choque en diferentes ¨¢mbitos, seg¨²n Enriqueta Cepeda, la secretaria general de la instituci¨®n.
Pozuelo, en 2006
La actuaci¨®n quiz¨¢ m¨¢s importante ser¨¢ la apertura, a finales de 2005, de dos nuevas sedes que descongestionen la ¨²nica que hay. Ser¨¢ a finales de este a?o en Alcal¨¢ de Henares y Alcorc¨®n. Por ¨²ltimo, para finales de 2006 Tr¨¢fico quiere abrir otra sede en Pozuelo. Esta misma soluci¨®n ya se intent¨® hace 14 a?os, cuando se levant¨® una nueva sede en la madrile?a calle de Chile (Chamart¨ªn). Entonces, los vecinos de las fincas adyacentes interpusieron una demanda porque el edificio de la DGT infring¨ªa, seg¨²n ellos, las normas urban¨ªsticas municipales. Tras 10 a?os de litigios, el Tribunal Supremo dio la raz¨®n a los vecinos y orden¨® tirar el bloque.
A corto plazo, las medidas de la DGT son dos: desde febrero "se agilizan los tr¨¢mites con los funcionarios haciendo horas extras" y tambi¨¦n se van a incorporar en marzo 100 contratados laborales y 24 interinos. A medio plazo, prosigue Cepeda, se pedir¨¢n funcionarios de carrera para cubrir definitivamente las vacantes. Otra de las explicaciones que da la DGT para explicar el "tradicional atasco" -palabras de Altozano- de la sede madrile?a es el significativo aumento del parque automovil¨ªstico regional: durante 2004, dos millones de veh¨ªculos fueron dados de alta y otro mill¨®n de baja.
Mientras tanto, no queda m¨¢s remedio que aguantar. Algunos se llevan el trabajo a Tr¨¢fico y se pasan las correspondientes tres horas hablando por tel¨¦fono y recordando a todo el que quiere escucharle que est¨¢ atrapado en Arturo Soria, no en un atasco pero si en Tr¨¢fico. Pocos se imaginan que tendr¨¢n que esperar tanto tiempo. Muchos desisten y se van. Ya volver¨¢n otro d¨ªa. Otros salen a dar una vuelta, a tomar un caf¨¦. Tiempo tienen. En la espera, los fumadores se buscan la vida ante la prohibici¨®n de fumar. Prohibici¨®n que s¨®lo se respeta en la sala principal. Fuera, en el rellano de la escalera, junto al cartel de "Prohibido Fumar", muchos encienden un cigarro y asoman la cabeza por la ventana.
La ¨²nica manera de evitar las colas es pagando. Pasando por una gestor¨ªa. De este modo, aunque no hay colas, se espera mucho m¨¢s. Hasta dos o tres meses por una gesti¨®n que un usuario har¨ªa en el d¨ªa.
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