El PSC reconoce que la crisis del Carmel da?a su expectativa de voto pero no la de Zapatero

La crisis de confianza pol¨ªtica registrada tras el hundimiento del tunel del Carmel pasa factura a los socialistas catalanes. La comisi¨®n ejecutiva del PSC, reunida ayer a pesar de que la jornada era festiva, constat¨® una p¨¦rdida de intenci¨®n de voto hacia el partido y un aumento del n¨²mero de indecisos, provocados por el impacto de la crisis del Carmel en el electorado catal¨¢n. No se detecta una trasvase de votos hacia otros partidos, pero reaparece uno de los riesgos m¨¢s temidos por el PSC: el de la abstenci¨®n de segmentos del electorado considerado como m¨¢s af¨ªn o incluso propio.

La c¨²pula del PSC tom¨® nota con una mezcla de preocupaci¨®n y alivio de que el desgaste provocado por la crisis del Carmel ha afectado a la imagen del Gobierno tripartito que preside Pasqual Maragall y a la del Ayuntamiento de Barcelona, pero no a la del Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Con preocupaci¨®n, porque el desgaste procede de sus propias responsabilidades. Con alivio, porque pese a todo, si ahora se celebraran elecciones, los socialistas siguir¨ªan siendo los m¨¢s votados en Catalu?a.

Los dirigentes del PSC dedicaron dos horas y media a analizar y debatir el desarrollo de la crisis del Carmel, iniciada hace dos meses con el hundimiento en las obras de un tunel del metro. El debate tuvo un enfoque inevitablemente cr¨ªtico, debido a que tom¨® como base un informe del secretario de organizaci¨®n, Jos¨¦ Zaragoza, que daba cuenta de que la crisis ha tenido un impacto negativo en la imagen del PSC y de sus dirigentes que presiden las instituciones directamente responsables: Maragall como presidente del Gobierno catal¨¢n y Joan Clos como alcalde de Barcelona.

El informe de Zaragoza tomaba sus datos de varios sondeos publicados en las ¨²ltimas semanas y de un bar¨®metro de opini¨®n encargado por el Ayuntamiento de Barcelona. El portavoz del PSC, Miquel Iceta, explic¨® que todos estos indicadores muestran un descenso en la valoraci¨®n de los l¨ªderes pol¨ªticos catalanes y un aumento del n¨²mero de los electores que se declaran indecisos a la hora de expresar su intenci¨®n de voto. Nadie pone en cuesti¨®n que este es el estado de ¨¢nimo actual en la opini¨®n p¨²blica catalana. "Se aprecia una sinton¨ªa mayor con el Gobierno de Espa?a que con el de la Generalitat y algunos gobiernos locales", dijo refiri¨¦ndose al de la ciudad de Barcelona.

Para afrontar esta situaci¨®n y recuperar la confianza de los ciudadanos, la direcci¨®n del PSC se propone atender "la demanda real de transparencia" en la actuaci¨®n de las administraciones, "mejorar la eficiencia" en la gesti¨®n del Gobierno catal¨¢n y "poner el inter¨¦s general por delante de los intereses de partido" en los asuntos que centran la atenci¨®n pol¨ªtica.

Este fue el resultado del debate. Para concretar, Iceta puso como ejemplo que el PSC pretende incrementar la transparencia de la gesti¨®n pol¨ªtica, apoyando medidas como la prohibici¨®n de las donaciones an¨®nimas de particulares y empresas a los partidos. "Se ha demostrado que los donativos an¨®nimos son una manera de camuflar aportaciones no altruistas", dijo el portavoz.

?sta ser¨ªa una manera de evitar las sospechas sobre el pago del 3% de comisi¨®n por las empresas adjudicatarias de obras a los partidos gobernantes, sacadas a colaci¨®n por el propio Maragall al referirse a los 23 a?os de gobiernos de CiU en Catalu?a.

Los socialistas conf¨ªan en poder recuperarse de este descenso en sus expectativas, particularmente preocupantes en el caso del Ayuntamiento de Barcelona, en el que ya registraron un retroceso en las ¨²ltimas elecciones municipales. La confianza se basa, seg¨²n Iceta, en que ninguna de las encuestas ha detectado que el descenso en la intenci¨®n de voto del PSC beneficie directamente a otros partidos. El PSC sigue encabezando las preferencias tanto en el ¨¢mbito municipal como auton¨®mico.

El calendario del Estatut

El otro asunto que preocupa a los socialistas es la marcha de los trabajos para la reforma del Estatuto de Autonom¨ªa. Iceta se mostr¨® convencido de que el poyecto estar¨¢ listo en primera lectura a finales de abril. "Por Sant Jordi o por el Primero de Mayo puede haber proyecto", asegur¨®, si la ponencia parlamentaria que lo elabora mantiene el ritmo de las semanas previas a las vacaciones de Semana Santa.

La adopci¨®n de un proyecto en primera lectura, sin embargo, no es lo mismo que su aprobaci¨®n. En esta primera lectura se perfilan tanto los acuerdos como los desacuerdos. Entre estos ¨²ltimos, Iceta incluy¨® ya ayer como muy probable el t¨ªtulo de la reforma dedicado a la financiaci¨®n de la Generalitat, cuya elaboraci¨®n a¨²n no ha comenzado.

La previsi¨®n es que la ponencia trabaje sobre la propuesta de reforma de la financiaci¨®n adelantada por el primer grupo de la oposici¨®n, el de CiU, y sobre la que pr¨®ximamente entregue el Instituto de Estudios Auton¨®micos (IEA). Sobre esta ¨²ltima es previsible un acuerdo entre los partidos que forman la mayor¨ªa parlamentaria. Pero Iceta adelant¨® que, en este t¨ªtulo, "no creemos que pueda haber acuerdo en primera lectura" con la principal fuerza de la oposici¨®n, Converg¨¨ncia i Uni¨®.

La financiaci¨®n pasar¨ªa a la lista de los t¨ªtulos ya redactados sobre los que no hay acuerdo entre los partidos del Gobierno y los de la oposici¨®n y constituyen los principales escollos que salvar para poder remitir el proyecto a las Cortes.

Sobre dos de ellos, el relativo a la declaraci¨®n de derechos y deberes de los ciudadanos y el relativo a las instituciones catalanas, CiU pretende que se haga s¨®lo un enumeraci¨®n sucinta y se remita su regulaci¨®n detallada a posteriores leyes del Parlament. El otro t¨ªtulo sobre el que no hay acuerdo es el que ha de incluir las declaraciones pol¨ªticas, sea el preliminar o el pre¨¢mbulo. Ha de abordar cuestiones importantes para los nacionalistas como el derecho de autodeterminaci¨®n.