El PSOE, un partido dividido durante la Guerra Civil

Helen Graham fue la primera historiadora que accedi¨® al archivo del PSOE, a principios de los a?os 80, para analizar c¨®mo evolucion¨® el partido en la tumultuosa etapa que va desde la II Rep¨²blica al exilio. El resultado es su libro El PSOE en la Guerra Civil (Debate), donde Graham subraya el "enorme esfuerzo pol¨ªtico y organizativo" del partido en la defensa de la Rep¨²blica, pone de manifiesto la divisi¨®n interna durante la contienda, desvela cierta ingenuidad al valorar los peligros de la radicalizaci¨®n y, finalmente, absuelve al partido: "Fue una v¨ªctima m¨¢s de la internacionalizaci¨®n del conflicto".

El libro de la catedr¨¢tica de la Royal Holloway University de Londres fue presentado ayer por la tarde en la Biblioteca Nacional por Santiago Carrillo -en su primer acto p¨²blico tras el intento de agresi¨®n a manos de un grupo fascista que sufri¨® el pasado s¨¢bado en la librer¨ªa Crisol y tras la aparici¨®n, ayer, de pintadas en su casa-, y por el historiador ingl¨¦s Paul Preston, quien define la obra de Helen Graham como "una deslumbrante, original y sensible descripci¨®n del papel desempe?ado por el PSOE durante la Guerra Civil".

Graham ha estudiado durante m¨¢s de 20 a?os la agitada acci¨®n pol¨ªtica del PSOE en el periodo m¨¢s tumultuoso de su historia, el que va desde 1931 hasta 1939, y cree que el partido, "pese a juicios maniqueos y anacr¨®nicos como los de P¨ªo Moa", aguant¨® con dignidad, seriedad y valent¨ªa los embates de la historia: "El movimiento socialista fue clave en todos los Gobiernos de la Rep¨²blica, suministr¨® todos los efectivos necesarios para una guerra total, hizo un gigantesco esfuerzo organizativo, y en ese proceso de erosi¨®n sufri¨® tensiones internas y perdi¨® a las juventudes cuando Carrillo opt¨® por integrarlas en el Partido Comunista; pero as¨ª y todo sigui¨® siendo el punto de referencia pol¨ªtico hasta el final de la guerra".

Sobre la escisi¨®n protagonizada por Carrillo en noviembre de 1936, Graham cuenta que el l¨ªder comunista siempre ha dicho que la raz¨®n fue que la lucha entre Largo Caballero e Indalecio Prieto paraliz¨® al PSOE y le hizo olvidarse de los j¨®venes en el momento de organizar la defensa de Madrid. Graham admite ambas cosas como ciertas, y explica que esa divisi¨®n se gest¨® entre 1931 y 1933 por el desacuerdo sobre el grado de colaboraci¨®n con la Rep¨²blica y se alarg¨® hasta 1939. "Largo era la izquierda radical y ped¨ªa reformas m¨¢s profundas; Prieto era un socialdem¨®crata que quer¨ªa reformar desde dentro, y se veng¨® de que Largo no le dejara ser primer ministro. Purga suena muy fuerte, pero es cierto que desaloj¨® en el 37 a los caballeristas del partido y que en el 38 se hizo con el sindicato. Prieto pensaba en la posguerra. Pero el cansancio, la escasez, el brutal proselitismo de los comunistas protegidos por la URSS, y sobre todo el embargo internacional, movido b¨¢sicamente por los prejuicios del Foreign Office hacia los republicanos, acabaron por deslegitimar la pol¨ªtica socialista".

En la presentaci¨®n en la Biblioteca Nacional, Carrillo analiz¨® ayer con detalle el momento hist¨®rico en el que ¨¦l decidi¨®, junto al grupo dirigente de las Juventudes Socialistas, pasarse al PC, informa Carlos E. Cu¨¦. "La ruptura lleg¨® por las divisiones sobre c¨®mo defender Madrid. Primero Largo Caballero y su gente quer¨ªan marcarse un tanto y se negaron a que el Gobierno abandonara Madrid por seguridad, pero luego se fueron de mala manera cuando pensaron que la ciudad iba a caer en tres d¨ªas. Fue esa imagen de abandono lo que marc¨® la ruptura". Carrillo sostuvo que el motivo principal por el que los republicanos perdieron la guerra no es la divisi¨®n en el seno de la izquierda sino la pol¨ªtica de no intervenci¨®n de Francia e Inglaterra, defendida por los socialdem¨®cratas de ese pa¨ªs "que traicionaron al PSOE".