Las leyes Municipal, de Suelo y Agua esperan a la nueva C¨¢mara

Entre los planes del nuevo Gobierno vasco, sea cual sea su signo, habr¨¢ un lugar destacado para la aprobaci¨®n de los proyectos de ley de Suelo, del Agua y Municipal. Todos los partidos han incorporado en sus respectivos programas electorales el compromiso de sacar adelante estas normas. Las dos primeras quedaron pendientes la anterior legislatura. En el caso de la de Suelo, rechazado en el ¨²ltimo pleno parlamentario celebrado, mientras que el proyecto de la del Agua no lleg¨® a ser tramitado en la C¨¢mara. La ley Municipal acumula un retraso hist¨®rico de m¨¢s de 20 a?os

El parlamentario electo de EA y miembro de su ejecutiva nacional, Rafael Larreina, asegur¨® ayer que, si se reedita la f¨®rmula del tripartito (PNV-EA-EB) los tres proyectos recalar¨¢n en el Parlamento. "En el primero o en el segundo Consejo de Gobierno se aprobar¨¢n los proyectos de ley de Agua y de Suelo", asegur¨®. Y es que ambos est¨¢n cerrados. El anterior Ejecutivo los mand¨® al Parlamento, pero el del Agua se qued¨® empantanado en la Comisi¨®n Arbitral, despu¨¦s de que la Diputaci¨®n de ?lava presentase un conflicto de competencias, y el de Suelo fue rechazado en el ¨²ltimo pleno, tras una rocambolesca tramitaci¨®n. As¨ª, la VIII legislatura comenzar¨¢ como termin¨® la anterior: con el debate de la controvertida ley de Suelo elaborada por EB, bajo cuyo mandato estuvo la cartera de Vivienda.

La Comisi¨®n Arbitral, el ¨®rgano que se encarga de dirimir los conflictos competenciales que se suscitan entre las instituciones vascas, dio la raz¨®n al Ejecutivo en la cuesti¨®n de aguas. Sin embargo, la resoluci¨®n lleg¨® casi al final del mandato y ya no qued¨® tiempo material para seguir con su tramitaci¨®n parlamentaria por la disoluci¨®n anticipada de la C¨¢mara. El proyecto de ley de Suelo s¨ª lleg¨® hasta el final.

Competencias municipales

El Gobierno no logr¨® pactar ning¨²n apoyo al proyecto entre los partidos de la oposici¨®n, con lo que fue rechazado. Pero los problemas de Ezker Batua no se limitaron en exclusiva a la oposici¨®n, ya que tuvo que salvar importantes obst¨¢culos con sus socios de Gobierno antes de remitir el texto a la C¨¢mara.

Pero la aut¨¦ntica patata caliente a la que se tendr¨¢ que enfrentar el pr¨®ximo Ejecutivo es la elaboraci¨®n de un proyecto de ley Municipal. La de esta norma es la historia de nunca acabar. Su elaboraci¨®n ha sido exigida desde hace a?os en incontables ocasiones por los ayuntamientos y por los partidos pol¨ªticos. Su objeto es reforzar la organizaci¨®n y funcionamiento de las corporaciones locales y regular de manera adecuada su ¨¢mbito de competencias en relaci¨®n con las diputaciones y el Gobierno vasco. Ello implica la participaci¨®n de los ayuntamientos en el Consejo Vasco de Finanzas (CVF) para el reparto de los recursos del Concierto Econ¨®mico.

La aprobaci¨®n de este proyecto lleva aparejada la modificaci¨®n de la Ley de Territorios Hist¨®ricos (LTH), la norma que determina el reparto de competencias entre las diferentes instituciones vascas.

Seg¨²n Larreina, el compromiso de la coalici¨®n PNV-EA es enviar durante el primer a?o de legislatura un proyecto al Parlamento. La presi¨®n ejercida por EA en este sentido ha sido fundamental para que el PNV acepte el acuerdo. "Lo que ha ocurrido con esta ley es que, debido a su complejidad, siempre se ha ido dejando para el final, pero ha llegado el momento de darle un empuj¨®n", recalc¨® el portavoz parlamentario de EA en la legislatura pasada.

Junto a estos tres proyectos principales, el futuro Gobierno vasco tambi¨¦n tiene pendientes otros de menor entidad. Es el caso de los que quedaron atrapados en el Parlamento la pasada legislatura y que ni siquiera llegaron a la fase de debate por falta de tiempo. Al disolverse la C¨¢mara de Vitoria de manera anticipada, los proyectos decayeron de forma autom¨¢tica. Entre ellos se encuentran los de Cooperaci¨®n, Agricultura Ecol¨®gica, Museos y el Observatorio de Derechos Humanos, una apuesta personal del actual lehendakari en funciones, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, que embarranc¨® al poco tiempo de iniciar su tramitaci¨®n parlamentaria y que no volvi¨® a ser recuperado.