Decepci¨®n en Marruecos por el poco inter¨¦s espa?ol en sus tierras

Decepci¨®n en Marruecos. Tan s¨®lo el 4,3% de las empresas que han presentado solicitudes para alquilar tierras agr¨ªcolas del Estado son espa?olas, pese a que Rabat hizo en Espa?a su mayor esfuerzo para dar a conocer la licitaci¨®n para explotaci¨®n a largo plazo de 56.500 hect¨¢reas, repartidas en 205 lotes, a las que se a?adir¨¢n, en breve, otras 34.000. En general, las empresas extranjeras no han concurrido en gran n¨²mero.

Hace un par de semanas qued¨® cerrado el plazo para pedir la concesi¨®n de tierras. Nada menos que 630 peticiones han aterrizado en la mesa de Ahmed Hajjaji, presidente de Sodea, la sociedad estatal que pone en alquiler sus tierras por periodos de entre 17 y 40 a?os. El precio de la hect¨¢rea, entre 139 y 371 euros al a?o, es un 20% inferior al del mercado. A los adjudicatarios les ser¨¢n entregadas las tierras antes de septiembre.

Para el Gobierno de Rabat el objetivo es deshacerse de dos empresas p¨²blicas deficitarias, la Sodea y la Sogeta -esta ¨²ltima sacar¨¢ este oto?o otras 34.000 hect¨¢reas a licitaci¨®n-, modernizar la agricultura e incrementar las exportaciones, sobre todo a EE UU, con el que Marruecos firm¨® un acuerdo de libre comercio que exonera de arancel al 81% de sus productos agr¨ªcolas.

Veinte empresas espa?olas han formulado solicitudes en solitario y otras siete lo han hecho en asociaci¨®n con marroqu¨ªes. Los franceses han concurrido en mayor n¨²mero: 37 empresas lo hicieron por su cuenta, y 12, con socios locales. En total, la participaci¨®n extranjera apenas rebasa el 14% de las peticiones. Las autoridades marroqu¨ªes afirmaban, sin embargo, desearla porque es "la que traer¨¢ proyectos m¨¢s innovadores, la que puede espolear a la agricultura local".

Hajjaji y su equipo hicieron en Espa?a su mayor esfuerzo de divulgaci¨®n del proyecto. Mantuvieron reuniones en cuatro ciudades -Madrid, Valencia, Sevilla y Murcia- con grandes agricultores y empresarios del sector. En Francia s¨®lo celebraron tres y no viajaron al resto de Europa.

Poco tiempo

"Acaso los extranjeros no dispusieron de tiempo suficiente para conocer el proyecto", comenta Hajjaji a este peri¨®dico. El presidente de Sodea niega, sin embargo, que est¨¦ decepcionado, aunque reconoce que "es verdad que un mayor n¨²mero de espa?oles se pod¨ªan haber asociado con marroqu¨ªes".

"Las empresas espa?olas y francesas que se presentaron son grandes grupos cuyos proyectos suelen ser innovadores desde un punto de vista tecnol¨®gico", se consuela Hajjaji. "La siguiente convocatoria [licitaci¨®n de 34.000 hect¨¢reas] este oto?o tendr¨¢ que ser precedida por una mayor labor de divulgaci¨®n".

Eladio Aniorte, del sindicato Asaja en Alicante, encabeza una solicitud presentada por una decena de agricultores de su provincia para cultivar c¨ªtricos y hortalizas cerca de Kenitra y Marraquech. Pese a haberla cursado, tiene a¨²n dudas.

"All¨ª tienen una tierra ¨®ptima, agua y buen clima para producir y competir en el mercado de EE UU", recalca Aniorte. "Ahora bien", prosigue, "subsisten dos problemas, la falta de formaci¨®n de los trabajadores y, sobre todo, la inseguridad jur¨ªdica" para la empresa extranjera.

No es ¨¦sa la opini¨®n de otro alicantino, Jos¨¦ Manuel Sirvent, director de Turrones el Lobo, que aspira a producir y transformar almendra cerca de Marraquech y venderla en EE UU. "Si no han acudido m¨¢s espa?oles a la licitaci¨®n", afirma, "es porque perduran peque?os prejuicios". "Creo que ahora s¨ª hay ya garant¨ªas jur¨ªdicas y no es muy arriesgado cruzar el Estrecho".