La UE abre el mercado de los 'taifas' del crudo
La presidencia brit¨¢nica de la UE negociar¨¢ un Acuerdo de Libre Comercio con el Consejo de Cooperaci¨®n del Golfo
La presidencia brit¨¢nica de la Uni¨®n Europea ser¨¢ la encargada de poner punto final a m¨¢s de 15 a?os de negociaciones con el Consejo de Cooperaci¨®n del Golfo (CCG) encaminadas a formalizar un Acuerdo de Libre Comercio que permita a las empresas europeas acceder en condiciones preferenciales y con aranceles nulos o muy bajos, a los mercados emergentes de los taifas del petr¨®leo, depositarios del 45% de las reservas mundiales de crudo.
Las empresas europeas podr¨¢n acceder a los mercados del golfo P¨¦rsico en condiciones preferenciales y con aranceles nulos o muy bajos
Los pa¨ªses del GCC (Arabia Saud¨ª, Om¨¢n, Emiratos ?rabes Unidos, Kuwait, Bahrein y Qatar) suministran el 20% de la producci¨®n de petr¨®leo mundial, aunque s¨®lo Kuwait y Qatar pod¨ªan sobrevivir exclusivamente de los ingresos del petr¨®leo. En conjunto representan un mercado potencial de 30,8 millones de habitantes, con un PIB per c¨¢pita que oscila entre los 7.830 d¨®lares de Om¨¢n (algo inferior a Extremadura) y los 16.340 d¨®lares de Kuwait (similar a Catalu?a), y con una tasa de crecimiento econ¨®mico del 5,75% en 2003, que tiene su punta en el 9,9,% de Kuwait, seguido de Emiratos ?rabes Unidos (7%), Arabia Saud¨ª (6,4%) y Bahrein (5%).
A pesar del ¨²ltimo repunte de los precios del crudo todos estos pa¨ªses han apostado por mantener las pol¨ªticas de diversificaci¨®n de sus econom¨ªas y de creaci¨®n de nuevas fuentes de ingresos iniciadas durante el periodo de la bajada de precios, especialmente entre 1998 y 1999, facilitando las inversiones extranjeras, incluyendo la privatizaci¨®n de las empresas p¨²blicas, y la reducci¨®n de las subvenciones nacionales.
Estas reformas liberalizadoras llevadas a cabo por los Gobiernos de los seis pa¨ªses han abierto nuevas oportunidades de negocio para las empresas europeas, principalmente en los sectores de petr¨®leo y gas. Un escenario que el ministro de Econom¨ªa y Comercio de Qatar, Sheik Mohamed Al Thani, trasladaba recientemente a m¨¢s de medio centenar de los mayores empresarios espa?oles.
Presencia espa?ola
Qatar est¨¢ negociando un acuerdo de libre comercio con la UE y entre las medidas adoptadas por su Gobierno destacan la modificaci¨®n de las leyes de agricultura, energ¨ªa, turismo, recursos naturales y miner¨ªa, que ahora permiten la propiedad privada en manos extranjeras. Adem¨¢s, han reformado el mercado laboral y est¨¢n llevando a cabo otro tipo de medidas, derivadas de la entrada en vigor pr¨®ximamente de una nueva Constituci¨®n. Como destacaba el secretario general de Comercio Exterior espa?ol, Alfredo Bonet, durante el citado encuentro en Qatar y en todos los pa¨ªses del Consejo de Cooperaci¨®n del Golfo existen "interesantes posibilidades de negocio, en infraestructuras y servicios p¨²blicos. Est¨¢ casi todo por hacer y van a sacar contratos muy importantes a concurso internacional".
La presencia de las empresas espa?olas en los pa¨ªses del Golfo es muy limitada en el comercio y pr¨¢cticamente inexistente en la inversi¨®n. A pesar del enorme potencial de la regi¨®n, Espa?a s¨®lo aporta el 1,1% del total de las compras exteriores de los seis Estados miembros del CCG, por detr¨¢s de pa¨ªses como Corea del Sur, Singapur, Taiw¨¢n, Tailandia, India o Indonesia. Durante 2004, las exportaciones espa?olas al CCG alcanzaron un valor de 1.658 millones de euros frente a unas importaciones por 2.692 millones, que arrojan un d¨¦ficit para nuestro pa¨ªs de 1.034 millones de euros, consecuencia de las compras energ¨¦ticas, con una tasa de cobertura de s¨®lo el 38,4%. En el cap¨ªtulo de las inversiones, entre 1995 y 2003, los datos oficiales de la Secretar¨ªa de Estado de Turismo y Comercio s¨®lo registran una inversi¨®n de 53,5 millones de euros en Arabia Saud¨ª, siendo nula la presencia de las empresas espa?olas en el resto de los pa¨ªses miembros.
Aunque desde la ¨²ltima ronda formal de negociaciones, en julio de 2004, no se ha vuelto a convocar ninguna cumbre bilateral entre la UE y el CCG, el Reino Unido est¨¢ especialmente interesado en cerrar el acuerdo y los contactos entre ambas partes se han ido sucediendo con la celebraci¨®n de diversas reuniones de car¨¢cter t¨¦cnico, referidas a derechos de propiedad intelectual, compras p¨²blicas y soluci¨®n de diferencias. Y ha sido, tras la ¨²ltima de estas reuniones, que tuvo lugar en Bruselas el pasado 8 de marzo, cuando la Comisi¨®n Europea adopt¨® la decisi¨®n pol¨ªtica de cerrar el acuerdo antes de finalizar el a?o 2005.
Dos son las razones esenciales que motivan la urgencia de Bruselas. Primero, adelantarse a las maniobras de Estados Unidos, que ha firmado ya un acuerdo bilateral de libre comercio con Bahrein y ha iniciado negociaciones similares con Qatar y Emiratos ?rabes Unidos para privilegiar la posici¨®n de las empresas norteamericanas en la regi¨®n. Y, en segundo lugar, pero no menos importante, buscar un mecanismo de compensaci¨®n a la sangr¨ªa econ¨®mica que supone para los pa¨ªses de la UE la creciente factura energ¨¦tica.
El cumplimiento por parte de los pa¨ªses del Consejo de Cooperaci¨®n del Golfo de las dos condiciones previas impuestas por Bruselas para formalizar el acuerdo: el establecimiento de una Uni¨®n Aduanera entre los seis Estados miembros del CCG y la adhesi¨®n de todos ellos a la Organizaci¨®n Mundial del Comercio (OMC), ha contribuido tambi¨¦n a acelerar el cierre de las conversaciones.
Por lo que respecta a los cap¨ªtulos pendientes, la UE y el CPG llegaron a un consenso en las negociaciones relativas a los productos agr¨ªcolas y sobre propiedad intelectual en la ronda de julio, y en la actualidad los principales puntos a debate se centran en la contrataci¨®n p¨²blica y servicios en aluminio y productos petroqu¨ªmicos donde el obst¨¢culo m¨¢s importante se deriva del sistema de doble precio de la energ¨ªa que practica Arabia Saud¨ª y que consiste en vender petr¨®leo y gas a su industria nacional por debajo de los precios de referencia, lo que constituye en la pr¨¢ctica una subvenci¨®n encubierta. La Comisi¨®n Europea solicit¨® la supresi¨®n de este sistema y sugiri¨® que la Direcci¨®n General de Comercio de la CE introdujera un mecanismo equilibrador para compensar a la industria europea de los perjuicios sufridos.
Ricos, pero vulnerables
El Consejo de Cooperaci¨®n para los Estados ?rabes del Golfo (GCC) es una organizaci¨®n regional creada en mayo de 1981 por Bahrain, Kuwait, Om¨¢n, Qatar, Arabia Saud¨ª y los Emiratos ?rabes Unidos. Detr¨¢s de su creaci¨®n hab¨ªa una percepci¨®n general por parte de estos Estados de su creciente vulnerabilidad que proviene de la riqueza de su petr¨®leo en contraste con su peque?a y dispersa poblaci¨®n (28 millones), su enorme superficie y sus capacidades limitadas militares en una regi¨®n generalmente inestable.
En 1989, la Comunidad Econ¨®mica Europea y el GCC firmaron un Acuerdo de Cooperaci¨®n consistente en la reuni¨®n, una vez al a?o, de sus respectivos ministerios. El objetivo de este acuerdo es facilitar las relaciones comerciales, as¨ª como contribuir a la estabilidad del acercamiento entre ambos bloques estrat¨¦gicos del mundo. Los grupos de trabajo han sido establecidos en los campos de la cooperaci¨®n industrial, la energ¨ªa y el medio ambiente. En 1996, la cooperaci¨®n descentralizada (universidades, empresas y medios de comunicaci¨®n) fue a?adida a la agenda.
El Acuerdo de 1989 tambi¨¦n contiene un comit¨¦ formado por ambos bloques para entrar en negociaciones para alcanzar un Acuerdo de Libre Comercio entre la CEE y la GCC. El mandato negociador del Consejo de la Uni¨®n Europea adopt¨® en 2001 la condici¨®n de Estados para la firma de una especie de acuerdo de constituci¨®n de la Uni¨®n de Consumidores de los Estados Ar¨¢bicos del Golfo.
En diciembre de 2001, en el encuentro anual de la GCC, los pa¨ªses de esta organizaci¨®n decidieron avanzar en la introducci¨®n de su Uni¨®n de Consumidores. Tambi¨¦n se acord¨® una f¨®rmula para la Tarifa Com¨²n Externa, por la que se establece un n¨²mero limitado de art¨ªculos libres de impuestos, mientras que la mayor¨ªa de los productos estar¨¢n sujetos a una tasa del 5%.
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