Los 'telecos', en constante renovaci¨®n

La demanda de ingenieros de telecomunicaciones que ha habido en el sector privado ha provocado una escasa presencia de los mismos en el sector p¨²blico. Aunque el mapa ha cambiado, para Enrique Guti¨¦rrez Bueno, decano del Colegio de Ingenieros de Telecomunicaci¨®n (COIT), todav¨ªa hay una alarmante carencia en la Administraci¨®n, especialmente la local. "Es muy dif¨ªcil desplegar la sociedad de la informaci¨®n s¨®lo con personas formadas en la cultura del ladrillo".

El avance en la sociedad digital exige, seg¨²n Guti¨¦rrez Bueno, "resetear el sistema", y pone como ejemplo las dificultades que viven las operadoras para que los ayuntamientos permitan la instalaci¨®n de antenas para la cobertura de m¨®viles. Para combatir la creencia de que perjudican a la salud, el colegio ha colaborado en un estudio de la Asociaci¨®n Espa?ola contra el C¨¢ncer. "Hemos actuado como interlocutores entre la tecnolog¨ªa y la sociedad, lo que pasa es que, a veces, cuando el experto no dice lo que quieres escuchar... no le haces caso, lo cual es, al menos, preocupante".

Carencias

"La Administraci¨®n ha de jugar siempre un papel impulsor". Para Guti¨¦rrez Bueno, un excelente ejemplo es la normativa ICT, que obliga a las nuevas edificaciones a dotarse de una infraestructura com¨²n de telecomunicaciones. "El hogar digital plenamente desarrollado no est¨¢ a la vuelta de la esquina, pero as¨ª se abre el camino hacia su expansi¨®n".

Por su parte, el Colegio de Ingenieros T¨¦cnicos (COITT), seg¨²n comenta su decano Jos¨¦ Javier Medina Mu?oz, est¨¢ participando activamente en los foros abiertos por la Administraci¨®n para elaborar un nuevo plan de convergencia con Europa del que espera un impacto real, a diferencia de lo ocurrido en el pasado, cuando "el Libro Blanco que se elaboraba era buen¨ªsimo pero su implantaci¨®n en indicadores, muy deficiente".

Los tres frentes abiertos en los que se debe actuar son el tecnol¨®gico, el de mercados y el de contenidos. Los ingenieros se ocupan del primero, pero su preocupaci¨®n se extiende a los otros dos. "No hay una cultura mayoritaria sobre las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n. Es preciso trabajar en la alfabetizaci¨®n digital". Medina no culpa a los ciudadanos de su analfabetismo tecnocient¨ªfico. "La clave est¨¢ en que puedan apreciar la utilidad de las TIC y no somos capaces de mostrarla con usos amigables de las mismas".

Un ejemplo es la carencia de est¨¢ndares r¨¢pidos y sencillos. Los fabricantes intentan forzar sus propios est¨¢ndares, comenta, y esa guerra comercial entorpece el desarrollo de tecnolog¨ªas que faciliten, entre otras cosas, el di¨¢logo entre distintas m¨¢quinas.

Donde hay un cambio a la vuelta de la esquina es en la titulaci¨®n universitaria, que deber¨¢ acomodarse a los criterios europeos de Bolonia. Los nuevos ingenieros de telecos europeos, salvo Francia, que se resiste a ello, estudiar¨¢n una carrera con una duraci¨®n y perfil convergentes. Va a desaparecer la distinci¨®n entre ingeniero e ingeniero t¨¦cnico. Se estudiar¨¢ una carrera de cuatro a?os y cabr¨¢, luego, la posibilidad de hacer estudios de especializaci¨®n. "Es el modelo que funciona en Jap¨®n o Estados Unidos. Un ingeniero con una formaci¨®n equilibrada entre el especialista y el generalista que saldr¨¢ apto para firmar cualquier tipo de proyecto", comenta.

Guti¨¦rrez Bueno, considera que la situaci¨®n universitaria no era un problema prioritario. "El pa¨ªs tiene muchas carencias, pero la calidad de conocimientos de los ingenieros no es una de ellas". Acepta la propuesta europea, pero pide que se haga "sin mermar la preparaci¨®n de los titulados". Y defiende el camino inevitable a la especializaci¨®n. "El ingeniero apto para todo es una figura anacr¨®nica, un proyecto complejo exige distintos especialistas y disciplinas".

La UE prepara una directiva que da a los colegios, o similares, la habilitaci¨®n profesional. Actualmente esta habilitaci¨®n colegial no se exige en Espa?a. "En Espa?a, la universidad da el t¨ªtulo y puedes ejercer sin una entidad profesional que certifique tu aptitud", se?ala Medina. Tambi¨¦n hay diferencias en Europa en el visado colegial de los proyectos. En 15 pa¨ªses no lo exigen. Espa?a est¨¢ entre los 11 que s¨ª lo hacen. "Los colegios de telecos visamos los proyectos con rigor para el servicio al p¨²blico. Hacemos algo m¨¢s que poner el sello. No s¨®lo visamos. Revisamos el proyecto. Lo hacemos tan a fondo desde nuestro gabinete de calidad que en los proyectos de ICT (en edificaciones) nos han encargado desde la Administraci¨®n tareas inspectoras", comenta Medina.

Los dos colegios defienden la necesidad del visado porque da mayores garant¨ªas al cliente y claros mecanismos de reclamaci¨®n. Guti¨¦rrez Bueno insiste en que la tarea de visado no consiste s¨®lo en comprobar la habilitaci¨®n profesional del autor y su correcci¨®n formal. "A partir del momento en que el visado presume el cumplimiento de la norma se debe proceder a un an¨¢lisis t¨¦cnico para comprobar su correcci¨®n. Defendemos visar de los trabajos. No porque lo firme un titulado el proyecto ya es bueno". Los dos colegios tienen un sistema de visado digital, pero, como destaca Guti¨¦rrez Bueno, "cuando terminamos nuestra tarea, realizada ¨ªntegramente por v¨ªa telem¨¢tica en m¨¢s el 75% de los proyectos que llegan, hemos de imprimirlos para la Administraci¨®n", un reflejo m¨¢s de la tardanza de la Administraci¨®n en incorporarse al universo tecnol¨®gico.