Los tres perdidos

En 1966, cuando David Mamet estren¨® esta obra (hay una pel¨ªcula de 1996, dirigida por Michael Corrente), todav¨ªa andaban all¨ª con discusiones acerca del sue?o americano. Aqu¨ª, por lo menos, llev¨¢bamos 10 a?os sabiendo que el sue?o con los americanos produce nada, con Bienvenido Mr. Marshall (Berlanga), aunque todav¨ªa haya so?adores, despu¨¦s de arrojados a la oposici¨®n. Hab¨ªa teatro de perdedores, de antih¨¦roes; novelas de decepci¨®n, de desilusi¨®n.

Estos tres tipos de David Mamet son verdaderamente tontos. Desde una tienda de antig¨¹edades proyectan un robo, que nunca llegar¨¢n a hacer por su considerable estupidez. Digamos que esta estupidez se debe a malos entendimientos, mal lenguaje, malas formas de entenderse, y que en ese sentido la traducci¨®n de Ferm¨ªn Cabal es muy adecuada. Dicen que podr¨ªa aproximarse a Espa?a. No lo creo. Aqu¨ª la cantidad de tontos, majaras, perdidos, es muy considerable, pero no creo que se d¨¦ simult¨¢neamente en tres tipos juntos, y menos con esa profundidad. Pinta David Mamet la mala Am¨¦rica, y eso es lo que se ve, y lo que se supo que en alg¨²n sitio existe a¨²n, puesto que la versi¨®n cinematogr¨¢fica tiene s¨®lo nueve a?os; la de Cabal tiene m¨¢s, y se represent¨® en Espa?a a su tiempo. ?sta tiene la ventaja de que los tres actores son excelentes, y ellos y el director mantienen un ritmo r¨¢pido, y una intensidad importante. L¨¢stima que no hagan otro teatro, en lugar de buscar en los antiguos y oscuros arcones.

Ah, el b¨²falo americano es el nombre de una moneda rara de Estados Unidos. Lo que se planea es rob¨¢rsela al mismo tipo que la adquiri¨® por casi nada en la tienda de ropavejeros que mantienen los tres idiotas. Claro que no aciertan.

El p¨²blico del estreno tuvo la buena reacci¨®n acostumbrada, y la obra termin¨® con ovaciones repetidas. Que sirvan de algo para levantar la buena carrera teatral del director y los actores.