Zapatero analiza la cumbre con Borrell, Almunia y Solana

El presidente Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero convoc¨® anoche en La Moncloa a los tres espa?oles que se sientan en el v¨¦rtice de la UE -Josep Borrell, presidente de la Euroc¨¢mara; Javier Solana, responsable de la pol¨ªtica exterior de la UE, y Joaqu¨ªn Almunia, comisario de Asuntos Econ¨®micos- a fin de preparar la cumbre que comienza el jueves en Bruselas y en la que tiene una apuesta comprometida: consolidar el hecho de ser, por ahora, el ¨²nico pa¨ªs que ha logrado el s¨ª a la Constituci¨®n en refer¨¦ndum y cuadrar unas cuentas presentables para Espa?a en la UE ampliada a 25.

Un mensaje europe¨ªsta es acuciante para Zapatero por razones de pol¨ªtica interna

La situaci¨®n no es f¨¢cil tras el no a la Constituci¨®n de Francia y Holanda. Todos tienen inter¨¦s en hallar un lenguaje com¨²n que reafirme los ideales y aleje los fantasmas de una regresi¨®n en la construcci¨®n europea. El logro de un mensaje europe¨ªsta y continuista es acuciante para Zapatero por razones de pol¨ªtica interna.

El Consejo debe demostrar que el proyecto sigue, pues eso implica que el Gobierno espa?ol tuvo raz¨®n al querer ser el primero en ratificar una Constituci¨®n que ahora hace aguas en la opini¨®n europea. Sobre todo, cuando el PP se ha desmarcado del consenso previo al referendo y ha apoyado en el Parlamento Europeo la petici¨®n de que el proceso de ratificaci¨®n no siga. Fuentes gubernamentales han insistido desde que se conoci¨® el no franc¨¦s en que Espa?a aborda la situaci¨®n "con una doble credibilidad": es un pa¨ªs que ha hecho "sus deberes pol¨ªticos", al ratificar la Constituci¨®n, y en "buena parte, sus deberes econ¨®micos", por su presupuesto equilibrado, su econom¨ªa abierta y su crecimiento superior a la media.

La vicepresidenta primera, Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega, dijo el viernes que lo que el Ejecutivo pretende es "seguir caminando en un avance realista". La posici¨®n de partida no ha variado, y Zapatero sostiene que el proceso debe continuar, en lo que coincide con la presidencia luxemburguesa, la Comisi¨®n, Francia y Alemania. En sinton¨ªa con el eje franco-alem¨¢n, Fern¨¢ndez de la Vega abri¨® tambi¨¦n la puerta a una ampliaci¨®n del plazo de ratificaci¨®n, que deber¨ªa concluir en noviembre de 2006.

Josep Borrell, presidente del Parlamento Europeo, es, de los tres espa?oles ilustres en Bruselas convocados ayer en la Moncloa, el que m¨¢s ha defendido que prosigan las ratificaciones, y en la misma l¨ªnea se ha manifestado el comisario de Asuntos Econ¨®micos, Joaqu¨ªn Almunia. El Alto Representante para la Pol¨ªtica Exterior y de Defensa, Javier Solana, no se ha pronunciado sobre este tema.

El encuentro de anoche, en el que participaron el ministro de Exteriores, Miguel ?ngel Moratinos, y el de Econom¨ªa, Pedro Solbes, fue presentado como "una reuni¨®n de trabajo, de intercambio de informaci¨®n y de ideas entre pol¨ªticos espa?oles progresistas" sin un "car¨¢cter institucional", pese a lo cual adquiri¨® una trascendencia p¨²blica que caus¨® incomodidad a los participantes m¨¢s ligados a la Administraci¨®n europea.

Zapatero puso sobre la mesa su empe?o en hacer propuestas concretas para que la UE siga profundizando sus pol¨ªticas, especialmente de modernizaci¨®n econ¨®mica (con la llamada Agenda de Lisboa), en materia de pol¨ªtica exterior y en el campo de la seguridad y la justicia. Hubo coincidencia en la idea expresada por Moratinos de que "no hay vac¨ªo institucional ni jur¨ªdico", pese al par¨®n de una Constituci¨®n que, de todos modos, no estaba previsto que entrara plenamente en vigor hasta 2009.

Tambi¨¦n se coment¨® la idea de que, pese a las divisiones pol¨ªticas (Borrell acudir¨¢ por primera vez a este Consejo sin una posici¨®n com¨²n de la Euroc¨¢mara), los l¨ªderes son conscientes de que no se puede interrumpir bruscamente el proceso ni poner a la ratificaci¨®n condiciones tan estrictas como para que se precipite un nuevo no o un nuevo anuncio de suspensi¨®n de refer¨¦ndum que dificultar¨ªan a¨²n m¨¢s la reconducci¨®n de la crisis.

El otro gran tema fueron las perspectivas financieras, un asunto en el que Almunia se anticip¨® desde la noche del refer¨¦ndum franc¨¦s con la idea de que la crisis desatada har¨ªa el acuerdo m¨¢s urgente. El Gobierno insiste en que considera "insuficiente" la ¨²ltima propuesta de la presidencia luxemburguesa, pero no se sabe cu¨¢nto. Lo que s¨ª es claro es que, en esta batalla en la que las ayudas comunitarias a Espa?a descender¨¢n, en el septenio 2007-2013, de 48.000 a 5.000 millones de euros, seg¨²n una hip¨®tesis benigna, Zapatero no podr¨¢ aceptar menos que seguir recibiendo, durante todo el periodo, m¨¢s dinero del que aporta a Bruselas.

Es un objetivo m¨ªnimo que se considera casi adquirido en las negociaciones previas y cuya consolidaci¨®n depende de que se resuelvan los dos grandes problemas: el acuerdo de 2002 sobre la reforma de la Pol¨ªtica Agr¨ªcola Com¨²n (PAC), que Francia se niega a revisar, y el cheque brit¨¢nico, que Londres s¨®lo admite negociar si se reducen los gastos agr¨ªcolas.

En la reuni¨®n se constat¨® que hay voluntad para el acuerdo, y se se?al¨® que, si a Jacques Chirac le interesa cerrar un compromiso ahora, para que la pr¨®xima presidencia brit¨¢nica no reabra el debate sobre la PAC, tambi¨¦n a Tony Blair le gustar¨ªa no tener que arrastrar el problema de las perspectivas en su presidencia. Pese a las dificultades, el diagn¨®stico fue, por ello, moderadamente optimista.