Aviso

Pertenezco a una generaci¨®n que esperaba la democracia como una oportunidad de que mi pa¨ªs, entre otras cosas, se pareciera a una cierta Italia que hab¨ªamos ido conociendo casi clandestinamente. ?bamos all¨ª porque all¨ª hab¨ªa ciudades como Bolonia, donde la gesti¨®n de los Ayuntamientos nos parec¨ªa -con raz¨®n- mod¨¦lica. Y acud¨ªamos all¨ª para sumergirnos en librer¨ªas como la Rinascita, de Roma, o cualquiera de las Feltrinelli. Conocimos a muchos de los protagonistas de una cultura no s¨®lo pol¨ªtica que nos marc¨® para siempre. Italia era, en fin, el pa¨ªs de Fellini y de Claudio Abbado y del Piccolo Teatro di Milano... ?Qu¨¦ ha sucedido para que ahora sea un pa¨ªs amenazado econ¨®micamente, en un retroceso cultural alarmante e inundado por una vulgaridad que asusta?

El proceso de desestructuraci¨®n que empez¨® a finales de los ochenta, en los a?os de Craxi, culmina ahora con una amenaza de retroceso y degradaci¨®n que nadie puede tapar. Ayer mismo este peri¨®dico, bajo el t¨ªtulo de El fin del milagro italiano hablaba sencillamente de un pa¨ªs que ha entrado en recesi¨®n; y tres d¨ªas antes Bruselas daba un golpe muy serio a la pol¨ªtica de d¨¦ficit del gobierno de Berlusconi. Han encontrado un chivo expiatorio, el euro, que como en el resto de los pa¨ªses que lo adoptaron, ha subido los precios. Pero la soluci¨®n que se les ocurre parece c¨®mica: doble moneda, euro y lira. Nadie pone en discusi¨®n que la gesti¨®n del Estado como una ¨²nica empresa privada de un ¨²nico propietario tenga algo que ver con una degradaci¨®n del tejido industrial que pronto se traducir¨¢ en despidos que se calcula que pueden llegar al medio mill¨®n. No se olvide que Berlusconi, cuyo pasado e intenciones eran bien conocidos de todos, obtuvo la mayor¨ªa absoluta. Ahora acusa un cierto desgaste. ?Saben qui¨¦n se prepara para sucederle? Pues Fini, el posfascista.

El segundo aspecto del retroceso que vive Italia lo ha proclamado, entre otros, la premio Nobel Rita Levi Montalcini en un documento que firman m¨¢s de 100 cient¨ªficos europeos: el refer¨¦ndum que ayer y hoy se celebra para derogar la legislaci¨®n m¨¢s restrictiva de Europa en materia de reproducci¨®n asistida e investigaci¨®n con embriones es un alt¨ªsimo riesgo de un giro cultural y pol¨ªtico del pa¨ªs hacia un retraso insufrible. Pero hay un dato fundamental en este asunto: el car¨¢cter de militancia pol¨ªtica que, bajo la indicaci¨®n directa del nuevo papa, la Conferencia Episcopal ha dado a su entrada en la campa?a para el refer¨¦ndum. Y la Iglesia es, adem¨¢s de muy poderosa, sabia: propone la abstenci¨®n para que el resultado no llegue al qu¨®rum necesario. El retroceso del laicismo abre el paso a la pospol¨ªtica de inspiraci¨®n m¨¢s reaccionaria. Si vence la abstenci¨®n, ya se sabe el paso siguiente: la legislaci¨®n sobre el aborto.

Un amigo italiano suele decir que Italia es el laboratorio en el que se experimentan los cambios sociales y pol¨ªticos que luego se generalizan. Espero que esta vez se equivoque, pero lo cierto es que la Conferencia Episcopal espa?ola se ha encerrado ya en el gimnasio para entrenarse y bajar a la arena pol¨ªtica y hacer el trabajo de una derecha como Dios manda.