El principal asesor de la Casa Blanca filtr¨® el nombre de una esp¨ªa de la CIA

Los documentos entregados por la revista Time a un fiscal de Departamento de Justicia revelan que fue Karl Rove, amigo y consejero pol¨ªtico del presidente y principal estratega del Partido Republicano, quien filtr¨® a varios periodistas el nombre de una agente secreta s¨®lo para incomodar a su marido, un diplom¨¢tico que se hab¨ªa opuesto abiertamente a la invasi¨®n de Irak. El abogado de Rove reconoce que su cliente habl¨® con los periodistas, pero asegura que no fue ¨¦l quien realiz¨® la filtraci¨®n ilegal, que est¨¢ penalizada con hasta 10 a?os de c¨¢rcel.

Seg¨²n revela la revista Newsweek en su edici¨®n de hoy, existe una "preocupaci¨®n creciente" en la Casa Blanca ante el inter¨¦s de la fiscal¨ªa por investigar el papel de Rove en las filtraciones. Si Rove acaba acusado formalmente de ser el autor de la filtraci¨®n, las consecuencias pol¨ªticas pueden ser graves porque su trabajo est¨¢ tan insertado en el Despacho Oval que le costar¨ªa mucho demostrar que actu¨® sin el conocimiento o el consentimiento del presidente Bush.

El caso arranc¨® hace dos a?os. El diplom¨¢tico Joseph Wilson acus¨® al Gobierno de EE UU de manipular los datos de los servicios de inteligencia para crear falsos argumentos que justificaran la invasi¨®n de Irak. Wilson hab¨ªa viajado a N¨ªger por encargo de la CIA para investigar si Sadam Husein hab¨ªa tratado de hacerse con uranio en ese pa¨ªs. Demostr¨® que esa trama era ficticia y que nunca hubo contactos en ese sentido. Lo transmiti¨® as¨ª a la Casa Blanca, pero, para su sorpresa, comprob¨® que el presidente, George W. Bush, manten¨ªa y repet¨ªa esa acusaci¨®n falsa.

Ocho d¨ªas despu¨¦s de que desvelara esta informaci¨®n en una "carta abierta" publicada en The New York Times, varios periodistas (la mayor¨ªa de ellos inclinados ideol¨®gicamente hacia el lado conservador) revelaron que "fuentes del Gobierno" les hab¨ªan confirmado que la esposa de Wilson, Valerie Plame, era una agente encubierta de la CIA que trabajaba con las embajadas como tapaderas. La filtraci¨®n trataba de demostrar que la CIA escogi¨® a Wilson por mediaci¨®n de su esposa y que, en consecuencia, no estaba capacitado para investigar la trama. Desvelar la identidad de un agente encubierto es uno de los delitos federales m¨¢s graves, con penas de 10 a?os de c¨¢rcel.

La investigaci¨®n del Departamento de Justicia se ha centrado en las fuentes de tres periodistas que publicaron o ten¨ªan conocimiento de la identidad de Plame: Robert Novak, Judith Miller y Matthew Cooper. El primero, conocido por su afinidad al Partido Republicano, parece ajeno a la investigaci¨®n, pero puede haber llegado a un acuerdo con la fiscal¨ªa. La periodista de The New York Times Judith Miller, que antes de la invasi¨®n public¨® una serie de informaciones inexactas pero favorables a las tesis de Bush, y el reportero de Time Matthew Cooper pueden ingresar en prisi¨®n esta semana por negarse a desvelar sus fuentes.

Sin embargo, la revista Time proporcion¨® a la fiscal¨ªa correos electr¨®nicos de Cooper y en ellos, aparentemente, se desvela la identidad de Karl Rove como autor de una filtraci¨®n que era por encima de todo una venganza contra el diplom¨¢tico que se opuso a la guerra en Irak.

El abogado de Rove, Robert Luskin, ha reconocido que su cliente convers¨® con los periodistas en aquella semana de julio de 2003, pero mantiene que en ese contacto nunca desvel¨® la identidad de Plame. "Karl no ha hecho nada malo. ?Qui¨¦n desvelo la identidad de esa mujer? No fue Karl", dijo ayer. En una entrevista a Newsweek, introdujo un matiz: "Rove nunca desvel¨® conscientemente informaci¨®n secreta".

Sospechas

Seg¨²n Cooper, hay m¨¢s de una fuente en el origen de la filtraci¨®n. En aquellos d¨ªas, el propio Wilson sugiri¨® que fue Rove quien maquin¨® la filtraci¨®n del nombre de su esposa, lo que no s¨®lo arruinaba su carrera, sino que pon¨ªa en peligro la vida de decenas de sus contactos por todo el mundo.

El periodista de la NBC Lawrence O'Donnell, el primero en desvelar este fin de semana que la investigaci¨®n apunta hacia Rove, escribi¨® anoche en su diario personal de Internet que hab¨ªa confirmado esa informaci¨®n con personas "vinculadas a la Casa Blanca. Ya hay mucha gente que sabe que es Rove. Esta semana se va a confirmar".

Algunos analistas pol¨ªticos consideran que la duraci¨®n extensa de la investigaci¨®n que lleva a cabo el fiscal especial, Patrick Fitzgerald, "permite especular que su trabajo se ha convertido en una investigaci¨®n sobre una conspiraci¨®n para desvelar la identidad de Plame o una conspiraci¨®n para tapar la implicaci¨®n de la Casa Blanca en esa filtraci¨®n", escribe en un editorial el Chicago Tribune.