El anacronismo de los enclaves
En estos pa¨ªses del Reino de Espa?a, no solamente del Pa¨ªs Vasco, por lo tanto, tenemos la mala costumbre de tratar de arreglar cualquier cuesti¨®n o conflicto, tratar de arreglarlo en clave de nacionalismos, central o perif¨¦rico, con lo que devienen en irresolubles. Es lo que ocurre con los dichosos enclaves territoriales, que al menor intento de soluci¨®n en beneficio de los ciudadanos de los mismos parece que volvemos a posiciones del r¨¦gimen anterior o al Antiguo R¨¦gimen.
Debiera conocerse que estaba en el ¨¢nimo de los liberales de comienzos del siglo XIX la supresi¨®n de los numerosos enclaves territoriales existentes. Es lo que sucedi¨® en la primera divisi¨®n provincial efectuada en 1822 por los liberales progresistas. En ella, obra sobre todo del liberal guipuzcoano Jos¨¦ Antonio Larramendi, quedaba clara la supresi¨®n de los enclaves; no solamente de los vascos (hasta Ordu?a pas¨® a Alava en un breve periodo), sino de los dem¨¢s territorios. Por ejemplo, el enclave de m¨¢s extensi¨®n de todo el Estado, el Rinc¨®n de Ademuz, pas¨® durante el trienio liberal (1822-1824) de la provincia de Valencia a la de su entorno geogr¨¢fico natural Teruel.
"El contencioso de los enclaves ha sido un fuego cruzado entre los nacionalistas perif¨¦ricos y los centralistas"
?Qu¨¦ sucedi¨® en la divisi¨®n provincial de 1833, o sea, la denominada de Javier de Burgos, que no era nada progresista? Que volvieron a aparecer muchos enclaves territoriales, restos casi todos del sistema feudal del Antiguo R¨¦gimen absolutista. Digo casi todos, porque, si bien se dijo que "los enclaves sitos en las Provincias Exentas [las forales], pasasen a la de R¨¦gimen Com¨²n m¨¢s inmediata", lo cierto es que el enclave de Trevi?o pas¨® a Burgos y el de Villaverde de Truc¨ªos, a la recien creada provincia de Santander. Pero el enclave se?orial de O?ate, feudo del conde de Guevara, como no ten¨ªa provincia de r¨¦gimen com¨²n inmediata, pas¨® a Guip¨²zcoa. "Terminada ella [la guerra carlista] en el a?o 1839 por el convenio de Vergara, la villa de O?ate dependi¨® de esta provincia", dice el historiador guipuzcoano Gorosabel. Es que hasta entonces no hab¨ªa pertenecido a dicha provincia, salvo en el citado breve per¨ªodo constitucional liberal. De haber tenido cerca de la actual Rioja, el feudo o?atiarra se hubiera asignado a la provincia de Logro?o.
De nuevo parece que va a ser noticia en oto?o el contencioso de los enclaves, ya que el colectivo Trebi?u Batu entreg¨® antes de la vacancia parlamentaria estival una iniciativa en el Parlamento vasco. No conozco exactamente el texto de dicha iniciativa popular, pero seg¨²n ha aparecido en la prensa solicita la creaci¨®n de una comisi¨®n parlamentaria espec¨ªfica. Sin embargo, no es exacto que "nunca se haya abordado de forma profunda" el tema en la C¨¢mara vasca, como ha dicho, al parecer, un portavoz del colectivo, aunque haya que reconocerle que no de forma estable y permanente. Precisamente, el que suscribe, siendo a la saz¨®n secretario segundo del Parlamento vasco, present¨® en septiembre de 1981 una proposici¨®n no de ley sobre los enclaves de Trevi?o y Truc¨ªos que no fue aprobada en su propuesta original, sino a trav¨¦s de un dictamen consensuado, y votado por unanimidad el 22 de octubre de 1981. Dice en sus dos primeros p¨¢rrafos: "1?. Que este Parlamento, por medio de la Ponencia constitu¨ªa al efecto dentro de la Comisi¨®n I, realice el estudio y seguimiento de la problem¨¢tica de los enclaves situados en la Comunidad Aut¨®noma Vasca. 2?. A tales efectos, se realizar¨¢n y establecer¨¢n cuantas gestiones y relaciones se estimen necesarias con las instituciones implicadas, a fin de que el proceso transcurra entre todas las partes dentro de unos cauces democr¨¢ticos y solidarios".
En la ponencia algunos trabajamos mucho y otros se escaquearon, pero lo cierto es que, entre otros resultados, el 19 de mayo de 1983 se aprob¨® una proposici¨®n no de ley por la que "se solicita del Gobierno vasco, una vez m¨¢s,a fin que se posibilite por el Gobierno del Estado, la autorizaci¨®n, convocatoria y celebraci¨®n del refer¨¦ndum para que los municipios del enclave de Trevi?o se integren en el Territorio Hist¨®rico de Alava". Como dijo en el debate mi compa?ero de grupo parlamentario Eduardo Uriarte, "si la Diputaci¨®n de Burgos, quiere mantener el estandarte de Castilla en unas tierras que solamente por razones feudales siguen siendo castellanas, nosotros tenemos que decir que estamos viviendo en el siglo XX".
Nicol¨¢s Redondo Terreros, candidato a diputado general de Vizcaya por el PSE, me contest¨® en la campa?a de las elecciones forales de 1991 diciendo que le hab¨ªa acusado de franquista, cuando lo que dije en un acto electoral en el enclave encartado-vizca¨ªno de Villaverde de Truc¨ªos fue que "consolidar la situaci¨®n actual de esta poblaci¨®n es consolidar el Antiguo R¨¦gimen". ?C¨®mo puede confundir un pol¨ªtico de izquierdas el r¨¦gimen anterior con el Ancien R¨¦gime preliberal!
Desafortunadamente, el contencioso de los enclaves ha sido un fuego cruzado entre los nacionalistas perif¨¦ricos y los nacionalistas centralistas o castellanistas. ?stos, en su argumentaci¨®n, han considerado que el hecho de que algo m¨¢s de 200 kil¨®metros cuadrados pasen de Burgos a ?lava es una p¨¦rdida para la nacionalidad hegem¨®nica, Castilla, y, por ende, de Espa?a, cuando de lo que se trata es hacer algo que le compet¨ªa a la revoluci¨®n liberal y no a los nacionalismos. Parad¨®jicamente, la Iglesia cat¨®lica, que en el Concordato del siglo XIX empez¨® a suprimir sus numerosos enclaves, los hizo desaparecer en el del siglo XX. En lo que al Pa¨ªs Vasco se refiere, la Bula de erecci¨®n de las di¨®cesis de Bilbao y San Sebasti¨¢n (Roma, 2-11-1949), dispone que las parroquias del enclave de Trevi?o, pasan de la di¨®cesis de Calahorra, a la que pertenec¨ªan, a la de Vitoria; y la de Villaverde de Truc¨ªos, de la santanderina a la bilba¨ªna. Y no se ha roto la unidad de la Conferencia Episcopal Espa?ola.
Jos¨¦ Luis Lizundia fue parlamentario vasco de EE y es miembro de la Junta de Gobierno de la Real Academia de la Lengua Vasca-Euskaltzaindia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.