El desprop¨®sito de la resonancia magn¨¦tica

Han transcurrido ya cinco a?os desde que el anterior conseller de Sanidad, Seraf¨ªn Castellano, accediera a los planteamientos del subsecretario, Marciano G¨®mez, de ceder al sector privado la t¨¦cnica m¨¢s moderna de diagn¨®stico por imagen, la Resonancia Magn¨¦tica (RM), en lugar de adquirir los equipos e integrarlos en los servicios de radiodiagn¨®stico.

Tanto J. Farn¨®s, como J. E. Cervera, consellers de Sanidad anteriores, estudiaron la propuesta del subsecretario y tras consultar con radi¨®logos y expertos en gesti¨®n sanitaria, no accedieron a las pretensiones de implantar esta nueva f¨®rmula privatizadora, si bien continuaron sin invertir en equipos propios de RM para los grandes hospitales de la Comunidad como s¨ª hab¨ªan hecho en el resto del pa¨ªs, independientemente del color pol¨ªtico del gobierno de las comunidades aut¨®nomas. ?nicamente el hospital Dr. Peset dispon¨ªa de esta t¨¦cnica desde el a?o 1988 (primer equipo de RM instalado en Espa?a en la sanidad p¨²blica), contando con un elevado prestigio en la comunidad cient¨ªfica por sus trabajos de investigaci¨®n, siendo una aut¨¦ntica escuela de formaci¨®n en RM para radi¨®logos de dentro y fuera del pa¨ªs.

Fue en agosto de 2000 cuando se resolvi¨® el concurso p¨²blico con un resultado que ya semanas antes hab¨ªan adelantado nuestros radi¨®logos, adjudicando los estudios de RM de la Comunidad Valenciana, exceptuando el ¨¢rea del H. Dr. Peset, a las empresas Eresa, Beanaca S.A. e Inscaner S.L., hasta el a?o 2008, con un coste por paciente que doblaba el de la propuesta que los Jefes de Servicio de Radiolog¨ªa de los hospitales p¨²blicos valencianos hab¨ªan presentado en la conseller¨ªa.

Se desoyeron tambi¨¦n las recomendaciones de m¨¢s de 1.400 m¨¦dicos cl¨ªnicos y de las Sociedades Cient¨ªficas, entre ellas la Espa?ola de Radiolog¨ªa M¨¦dica, que representa tanto a los radi¨®logos p¨²blicos como a los privados del pa¨ªs y que a trav¨¦s de su presidente, Joaqu¨ªn Fern¨¢ndez Cruz, pronosticaba ya un exceso de demanda pues al "no estar integrada (la RM), se pueden hacer exploraciones en exceso sin que est¨¦n realmente indicadas", anunciando que a corto plazo se superar¨ªan los 15.229.646 euros del pliego de condiciones y se alcanzar¨ªan los 24 millones de euros.

La Conseller¨ªa de Sanitat ha permanecido en silencio todos estos a?os si exceptuamos unas declaraciones realizadas como respuesta a las cr¨ªticas de sobreutilizaci¨®n, tras el primer a?o de implantaci¨®n del modelo, por el subsecretario, Marciano G¨®mez que en enero de 2002, dec¨ªa: "Se llevan a cabo las que solicitan los profesionales. Por tanto, hablar de sobreutilizaci¨®n es decir que el m¨¦dico no utiliza la RM de forma eficaz y creo que no es as¨ª; el prestigio de los profesionales es incuestionable". Es posible que desconociera lo ocurrido en EE UU en los a?os 80, donde la provisi¨®n privada multiplic¨® por cuatro el n¨²mero de exploraciones y oblig¨® a establecer una serie de medidas de control entre las que destacaba la necesidad de justificar ampliamente cada solicitud. La utilizaci¨®n inadecuada de la Resonancia Magn¨¦tica, igual que la de cualquier otra prueba m¨¦dica, aumenta los costes, somete al paciente a una prueba innecesaria y sobrecarga los centros sanitarios. Por eso todos los expertos en este tema recomiendan adecuar las indicaciones de la t¨¦cnica mediante protocolos consensuados entre radi¨®logos y cl¨ªnicos.

No se ha realizado ning¨²n estudio encaminado a demostrar la eficacia de este modelo ni se han tomado medidas para controlar el crecimiento de la demanda al que de forma inexorable conducen los sistemas basados en el pago por acto m¨¦dico, por el contrario, la conseller¨ªa ha dado su benepl¨¢cito para que en estos a?os el n¨²mero de resonancias privadas pase de 4,2 por mill¨®n de habitantes a 11,6 en nuestra Comunidad, cuando la media nacional est¨¢ en 4,5 y permitido que la tasa de utilizaci¨®n pase de 19 estudios por mil habitantes a 71, cuando en el H. Dr. Peset es de 23,5 por mil, cifra similar a la que recomienda la Sociedad Espa?ola de Radiolog¨ªa. Desde un punto de vista econ¨®mico, la desviaci¨®n entre la cifra que figura en el pliego de condiciones del concurso y la facturada a la Conseller¨ªa de Sanitat no ha parado de crecer en estos a?os. Se ha producido un incremento desorbitado del gasto como refleja el sobrecoste anual de los estudios de RM que en 2001 fue de 6 millones de euros, ya que se facturaron 21,24 millones frente a los 15,22 del contrato, en 2002 lleg¨® a los 8,1 millones, en 2003 a 12,1 y en 2004 a 14,4 millones.

Seg¨²n la facturaci¨®n reconocida por la Conseller¨ªa de Sanitat, la desviaci¨®n acumulada es de 40,7 millones de euros en estos 4 a?os, cifra con la que se podr¨ªan haber adquirido por parte de la Conseller¨ªa de Sanitat todos los equipos de RM de nuestra Comunidad actualmente en funcionamiento, que sin embargo siguen siendo privados, y todo hace prever que en los 3 a?os que restan de contrato se alcanzar¨¢n los 100 millones de euros de sobrecoste.

Es evidente que se ha hipertrofiado el "consumo" de RM sin que el desproporcionado gasto realizado con respecto a las necesidades reales asistenciales tenga una repercusi¨®n palpable en la mejora de la salud o de los cuidados de la poblaci¨®n.

En el Hospital Peset la exploraci¨®n es controlada por el radi¨®logo (los estudios son informados por radi¨®logos especializados en la enfermedad que padece el paciente, lo que mejora ampliamente la calidad de la asistencia con respecto a la provisi¨®n privada) y el informe que emite integra los resultados de otros estudios radiol¨®gicos practicados, seg¨²n los protocolos de indicaciones establecidos con los servicios del centro; el examen se realiza en 24-48 horas para los ingresados y 2-4 semanas para los ambulantes. El coste en 2003 fue de 3,87 euros por habitante (389.000 habitantes del ¨¢rea 9) mientras que en las privadas ascendi¨® a 7,56 euros, la estimaci¨®n para 2004 en Peset no llega a los 4 euros por habitante, lo que supondr¨ªa un gasto total en la C. Valenciana de 16 millones de euros frente a los 34,7 facturados. Son 18,7 millones de euros, en un a?o, que podr¨ªan mejorar sustancialmente otras ¨¢reas asistenciales como la Salud Mental, los Cuidados Paliativos, etc., en las que no estamos precisamente a la cabeza del pa¨ªs.

Isidoro Rodr¨ªguez es presidente de la Asociaci¨®n para la Defensa y Promoci¨®n de la Salud del Pa¨ªs Valenciano (ACDESA-PV). acdesa@ono.com