Los vericuetos de dos cartas perdidas

A veces -poqu¨ªsimas, todo hay que decirlo-, un acto tan habitual y rutinario como el de abrir el buz¨®n de casa para recoger la correspondencia puede deparar una sorpresa de las gordas como la de recibir cartas o paquetes que llegan con much¨ªsimos a?os de retraso. Son situaciones que pueden producir, a la par, extra?eza y desconfianza en los servicios de correos, pero que siempre suelen tener su l¨®gica oculta. Por fortuna se trata de casos ins¨®litos que pasan muy de tanto en tanto y que significan un porcentaje de error ¨ªnfimo si tenemos en cuenta los millones de objetos postales que tramitan las oficinas de Correos cada d¨ªa y que llegan a manos de sus destinatarios en el tiempo y lugar previstos.

Los que siguen a continuaci¨®n son dos casos recientes de objetos postales que, en su momento, quedaron encallados en alg¨²n rec¨®ndito y oscuro rinc¨®n y que, muchos a?os despu¨¦s, pudieron ser recuperados por sus leg¨ªtimos propietarios.

Hace unos d¨ªas, la familia Olivares de Badalona, Rosa Olivares y sus padres, recibieron una carta que les hab¨ªan enviado unos amigos desde la localidad de Andorra de Teruel. Hasta aqu¨ª todo normal si no fuera porque el matasellos de la carta ten¨ªa impresa la fecha de un lejano 19 de diciembre de 1986.

Los amigos de la familia Olivares enviaron hace casi 20 a?os la carta para felicitarles las Navidades. La misiva iba acompa?ada de un d¨¦cimo de loter¨ªa que, por fortuna para la familia, no result¨® premiado en el sorteo de la Navidad de aquel 1986.

Los Olivares no se explican qu¨¦ es lo que pudo causar este largo retraso en la entrega de la carta, un sobre que el paso del tiempo ha deteriorado, aunque resaltan en ¨¦l los antiguos sellos, aquellas estampillas dentadas ya superadas y... con el valor facial en pesetas, algo que el paso del tiempo se ha encargado de arrumbar y situar en los anaqueles de la historia.

Retornada cinco a?os despu¨¦s

Correos ya ha pedido disculpas a la familia Olivares y ha explicado que no ha sido ¨¦ste el ¨²nico caso de demoras en las entregas de las cartas. Seg¨²n Correos, el suceso se explica porque los sobres quedan accidentalmente escondidos detr¨¢s de los buzones y aparecen d¨ªas, o en este caso, a?os despu¨¦s, cuando ¨¦stos son movidos o cambiados por otros nuevos.

A pesar de la tesis que sostiene la empresa postal, los Olivares no se creen esta versi¨®n y se contin¨²an preguntando d¨®nde estuvo durante todos estos a?os la carta. Para ellos es una aut¨¦ntica inc¨®gnita.

El otro caso sorprendente de objeto postal retrasado lo protagoniza un vecino de Vallirana (Baix Llobregat), que recibi¨® una carta retornada cinco a?os despu¨¦s de haberla enviado porque en este tiempo no se encontr¨® a su destinatario.

Cinco a?os despu¨¦s de enviar la carta, Nicanor Molina, un radioaficionado de Vallirana, se sorprendi¨® al encontrarla de vuelta en su buz¨®n. La misiva iba dirigida a un buz¨®n inexistente de la Agrupaci¨®n de Radio ACV de Martorell. El recorrido de vuelta suma poco m¨¢s de 10 kil¨®metros, una distancia que el servicio de correos ha tardado cinco a?os en recorrer.

Molina envi¨® su misiva el 1 de agosto de 2000 desde Vallirana y el mismo d¨ªa lleg¨® al centro de clasificaci¨®n postal de Col¨®n, en Barcelona, la delegaci¨®n provincial desde donde se distribu¨ªa el correo seg¨²n su destino (actualmente este proceso se realiza en Sant Cugat). De all¨ª sali¨® hacia el apartado de correos de Martorell que Nicanor Molina indicaba en la direcci¨®n. Sin embargo, el titular se hab¨ªa dado de baja en enero del mismo a?o. Tal y como han explicado fuentes de Correos, en la oficina local la carta "se debi¨® mezclar con documentaci¨®n caducada", motivo por el cual no fue devuelta a su remitente de forma inmediata.

El pasado mes de agosto, el personal de Correos de Martorell procedi¨® a destruir las cartas que se amontonan con destino desconocido y sin remitente, tarea que se realiza peri¨®dicamente. Entre ellas encontraron la de Nicanor Molina y, sin dudarlo, el 19 de agosto de 2005 la enviaron de vuelta. El vecino de Vallirana la recibi¨® "sucia y arrugada". Sarcasmos del destino, el matasellos en el que consta la fecha del envio lleva una leyenda que reza: Postal Expr¨¦s. Siempre a tiempo.

"Hemos de pedir disculpas al se?or Nicanor Molina por dos motivos: por no haberle retornado la carta en su d¨ªa y por devolv¨¦rsela cinco a?os despu¨¦s sin ning¨²n tipo de explicaci¨®n, tan a la ligera", afirma un portavoz de Correos. Nicanor Molina, a su vez, replica con notable tino: "Correos se retrasa, pero est¨¢ claro que no pierde las cartas".