Las cartas sobre la mesa

El pr¨®ximo viernes los cuatro grupos del Parlamento andaluz (PSOE, PP, IU y PA) dar¨¢n un pen¨²ltimo vistazo a un informe de los letrados en el que se recoger¨¢ el borrador de texto articulado de los acuerdos sobre la reforma del Estatuto de Autonom¨ªa. El documento no es definitivo ni prejuzga la posici¨®n definitiva de cada partido, pero supone un empuj¨®n significativo a los trabajos de la ponencia. El calendario acordado por todos es que a finales de diciembre haya registrada una proposici¨®n de ley de reforma, a ser posible con la firma de los cuatro, de manera que en 2006 el texto entre para su discusi¨®n en las Cortes y en 2007 se pueda celebrar el refer¨¦ndum de aprobaci¨®n.

Los partidos han intensificado los contactos bilaterales. ?stos ser¨¢n m¨¢s frecuentes a partir de primeros de octubre, cuando debatan los asuntos en los que hay discrepancias. Ya no valdr¨¢n las posiciones ambiguas y ser¨¢ necesario poner las cartas boca arriba, aunque en el largo debate en comisi¨®n a¨²n habr¨¢ tiempo para la transacci¨®n, el consenso y la sorpresa. En esa fase los grupos tendr¨¢n que votar -el sistema de mayor¨ªa a¨²n no est¨¢ establecido-, sin renunciar, en ning¨²n caso, a que figuren sus posiciones discrepantes.

La clave est¨¢ en saber en qu¨¦ asuntos el PSOE se queda solo en su defensa. Sobre el papel aparecen dos temas que dan mucho juego pol¨ªtico y period¨ªstico: la limitaci¨®n de mandatos del presidente de la Junta y la convocatoria separada de comicios auton¨®micos. Tambi¨¦n habr¨¢ que esperar hasta d¨®nde va llegar el PSOE en la financiaci¨®n de los ayuntamientos, tema capital para PP e IU.

Los ponentes consultados creen que uno de los escollos b¨¢sicos se centrar¨¢n en las competencias, aparcadas a la espera de lo que pasa en Catalu?a. Lo que hay hasta el momento es una relaci¨®n de 56 materias (exclusivas, compartidas y delegadas). PSOE, IU y PA, con distinta intensidad, quieren blindar las competencias exclusivas a fin de evitar que la legislaci¨®n b¨¢sica estatal invada o "desapodere" el Estatuto, como afirman los socialistas.

En principio, el PSOE est¨¢ dispuesto a estudiar en la reforma la utilizaci¨®n del art¨ªculo 150.2 de la Constituci¨®n, que permite la delegaci¨®n de competencias a las comunidades mediante ley org¨¢nica, un camino que IU y PA defienden abiertamente y al que se opone el PP. Esta v¨ªa ha sido desestimada por el Consejo Asesor de las Autonom¨ªas -en el que hay dos ex presidentes del Tribunal Constitucional- nombrado por el Gobierno andaluz, aunque el ¨®rgano encargado de visar la legalidad del proyecto de ley de reforma es el Consejo Consultivo. En principio, los socialistas creen que debe volcarse en el Estatuto aquellas sentencias del Tribunal Constitucional a favor de las comunidades en los conflictos competenciales (los relativos a medio ambiente con los parques nacionales, por ejemplo).

La denominaci¨®n de la comunidad -naci¨®n o nacionalidad-, la ampliaci¨®n de derechos sociales -la eutanasia-, el car¨¢cter p¨²blico y el laicismo de la educaci¨®n o la creaci¨®n de una Agencia Tributaria propia separan tambi¨¦n a los grupos, que tampoco se ponen de acuerdo sobre el nivel de participaci¨®n de la comunidad en aquellas decisiones pol¨ªticas adoptadas en el ¨¢mbito estatal que afecten a los derechos e intereses de los andaluces.

Otra de las dudas de los partidos no se refiere a los contenidos, sino en conocer la posici¨®n exacta del Partido Andalucista, el ¨²nico de los cuatro que no ha llevado texto escritos a la ponencia a la espera de la presentaci¨®n de una redacci¨®n "propia" del Estatuto. La posici¨®n m¨¢s que estatutaria, estatuaria del PA, provoca desconcierto en el resto de los grupos, que se preguntan cu¨¢ndo va poner un texto sobre la mesa.