?scar Jaenada se transfigura en un deslumbrante Camar¨®n

Oscar Jaenada sostiene que durante unas semanas ¨¦l fue Camar¨®n de la Isla. Despu¨¦s de ver la pel¨ªcula dirigida por Jaime Ch¨¢varri en la que el actor barcelon¨¦s de 30 a?os da vida al genial cantaor, que muri¨® de c¨¢ncer de pulm¨®n en 1992, a los 42 a?os, el espectador no tiene ninguna duda de ello. La transfiguraci¨®n es total, y se antoja, si cabe, m¨¢s milagrosa cuando durante la entrevista, Jaenada, que elige el catal¨¢n para expresarse, recuerda que, cuando abord¨® el proyecto, Jos¨¦ Monge, conocido art¨ªsticamente como Camar¨®n, y su mundo, le eran absolutamente ajenos. "No sab¨ªa nada del personaje, ni de su m¨²sica. No soy ni andaluz, ni flamenco, ni gitano, ni siquiera me parezco a Camar¨®n... Pero me met¨ª tanto en su piel que acab¨¦ transform¨¢ndome incluso f¨ªsicamente. Me dej¨¦ crecer el pelo y las patillas como ¨¦l, intent¨¦ imitar su manera de caminar, llegu¨¦ a fumar como ¨¦l, a sacar la lengua como ¨¦l, a comer como ¨¦l, a contestar como ¨¦l... En los d¨ªas del rodaje en San Fernando [C¨¢diz] hasta la gente por la calle me llamaba Jos¨¦. Me propuse ser Camar¨®n, y acab¨¦ si¨¦ndolo".

La filmograf¨ªa de Jaenada consta de ocho t¨ªtulos estrenados, entre ellos Noviembre, de Achero Ma?as, por el que fue candidato a un Goya. Para encarnar al cantaor, el actor se imbuy¨® "durante dos semanas seguidas, desde que me levantaba hasta que me acostaba", de la vida de Camar¨®n, mediante grabaciones musicales y videogr¨¢ficas, de conciertos y de actuaciones, de art¨ªculos en prensa y, sobre todo, a trav¨¦s de conversaciones con Chispa, la viuda del cantaor -a la que da vida Ver¨®nica S¨¢nchez- y con sus hijos. "Me plante¨¦ abordar el personaje desde dos ¨¢ngulos: el Camar¨®n que la gente conoc¨ªa y el privado. Sobre el Camar¨®n p¨²blico me document¨¦ viendo im¨¢genes y, en cuanto al oculto, lo fui sacando hablando con su mujer, sus ni?os, sus amigos..., que me contaron sus desastres, sus vicios, su agon¨ªa y su desespero".

Compromiso

Trabaj¨® duro, y ahora se siente muy orgulloso de ello. "Claro que es un papel que exig¨ªa much¨ªsimo esfuerzo, pero ojal¨¢ todos los papeles que me ofrecieran fueran como ¨¦ste. Es el tipo de personaje que nos apetece interpretar a los actores, precisamente por lo que nos cuesta", dice Jaenada, quien asegura que ahora se siente del todo recompensado. "Adquir¨ª un compromiso con el personaje, y estoy realmente tranquilo. Veo en la pantalla mi respeto y admiraci¨®n por Camar¨®n, y eso me hace sentir satisfecho". El actor a?ade que un papel como el de Camar¨®n le hace recordar por qu¨¦ ha querido dedicarse a esta profesi¨®n, con la que hab¨ªa so?ado siempre, aunque durante bastante tiempo se gan¨® la vida sirviendo copas hasta las siete de la ma?ana. "Una de las cosas por las que estoy en esto y que m¨¢s me hacen disfrutar de mi trabajo es precisamente la posibilidad de aprender, de descubrir mundos nuevos y de conocer a gente interesante", explica. En este caso, su descubrimiento ha sido el flamenco y el propio Camar¨®n. "Yo era una pizarra en blanco por lo que respecta a este mundo".

Cuando acab¨® el rodaje de Camar¨®n, Jaenada corri¨® el riesgo de quedarse con un gran vac¨ªo interior, pero el trabajo siguiente no le permiti¨® relajarse. Cambi¨® radicalmente de escenario. De C¨¢diz se march¨® a San Sebasti¨¢n, y tuvo que mudar la piel del cantaor por el de un violador en el rodaje de Desviados, a las ¨®rdenes de Jes¨²s Ponce. Cuando acab¨®, viaj¨® a Galicia para filmar D¨ªas azules, de Miguel Santesmases. Ahora, la promoci¨®n de la pel¨ªcula le ha devuelto a Camar¨®n. Cuando se le pregunta si le gustar¨ªa recibir, ahora s¨ª, el Goya, por su fiel interpretaci¨®n del genio flamenco, se muestra tajante. "Me gustan los premios, no voy a negarlo, pero el Goya no especialmente".