Viraje empresarial hacia Europa

Telef¨®nica acaba de protagonizar la mayor adquisici¨®n de la historia empresarial espa?ola -26.000 millones de euros pagados en efectivo- con la compra de O2, la segunda compa?¨ªa de m¨®viles por ingresos en el Reino Unido y la tercera en Alemania. Un hito como lo fue unos meses antes la adquisici¨®n del sexto banco brit¨¢nico, Abbey, por el Santander en una operaci¨®n valorada en 13.467 millones de euros. O la adquisici¨®n en Francia de dos de sus mayores grupos inmobiliarios por Metrovacesa y Colonial. Y algunas otras operaciones de calado, como la OPA de BBVA sobre la italiana BNL, que han sido arrumbadas por el proteccionismo de sus autoridades nacionales.

Europa ha tomado el relevo de Am¨¦rica Latina como destino preferente de las pol¨ªticas de expansi¨®n y diversificaci¨®n de las empresas espa?olas. El euro y el marco jur¨ªdico y mercantil de la UE sit¨²an esta nueva expansi¨®n geogr¨¢fica a medio camino entre la internacionalizaci¨®n pura y dura y la mera ampliaci¨®n del mercado dom¨¦stico en que ya operan.

El desembarco tambi¨¦n ha estado favorecido por las pol¨ªticas de desregulaci¨®n y privatizaci¨®n de empresas y sectores de servicios p¨²blicos auspiciada por Bruselas. Endesa, gracias a estas privatizaciones, se ha convertido en la tercera generadora de electricidad en Italia, Gas Natural cuenta con casi 300.000 clientes y Logista se ha hecho con el mayor grupo de distribuci¨®n en este mismo pa¨ªs.

En Francia, pugnan en estos momentos la mayor parte de las concesionarias y constructoras espa?olas por hacerse con participaciones empresariales de tres importantes autopistas que se privatizan.

La presencia de empresas espa?olas en Europa es ya de tal magnitud que es f¨¢cil alojarse en sus grandes capitales en hoteles espa?oles, aterrizar en B¨¦lgica, Alemania o Reino Unido, en aeropuertos operados por Ferrovial, FCC o Abertis, viajar en el metro de Roma en vagones fabricados por CAF o tomar l¨ªneas del metro londinense cuyo mantenimiento lo va a llevar durante d¨¦cadas un grupo espa?ol.

En las tiendas del centro de estas capitales europeas puede comprar ropa en tiendas de Zara o de Mango, o perfumes en las del grupo Puig. Y hasta puede operarse la nariz o las cartucheras en Italia y Reino Unido en centros del grupo valenciano Corporaci¨®n Dermoest¨¦tica.

Son botones de muestra, escasos y recientes en comparaci¨®n con la fuerte y veterana presencia de industrias, comercios, marcas y entidades de los grandes pa¨ªses europeos en Espa?a, pero significativos.

Las empresas espa?olas tambi¨¦n est¨¢n acelerando en los ¨²ltimos tiempos su escasa o nula presencia en los pa¨ªses de Europa del Este. Constructoras, inmobiliarias y empresas de servicios, constituyen la avanzadilla.