La fotograf¨ªa recorre dos siglos de Espa?a
El historiador Publio L¨®pez Mond¨¦jar selecciona 450 im¨¢genes para documentar la memoria
"La fotograf¨ªa es una fuente de la memoria". El historiador de la fotograf¨ªa Publio L¨®pez Mond¨¦jar (Casasimarro, Cuenca, 1946) investiga desde hace 22 a?os en un centenar de archivos y colecciones espa?olas y extranjeras para documentar una historia de la fotograf¨ªa en Espa?a. Ha seleccionado 450 im¨¢genes, desde la introducci¨®n del daguerrotipo en 1839 hasta los comienzos del siglo XXI, para contar los cambios de una sociedad a trav¨¦s de la pol¨ªtica, la cultura, la econom¨ªa y la vida cotidiana. Los materiales ocupan desde ayer las salas del C¨ªrculo de Bellas Artes, de Madrid (Alcal¨¢, 42, www.circulobellasartes.com, hasta el 8 de enero), que ha organizado la exposici¨®n junto con Lunwerg, editorial que saca un cat¨¢logo de 750 p¨¢ginas.
La tetralog¨ªa Las fuentes de la memoria, de Publio L¨®pez Mond¨¦jar que desde los a?os ochenta ha recorrido en tres exposiciones y cat¨¢logos la fotograf¨ªa y la sociedad en la Espa?a de los siglos XIX y XX, se complet¨® ayer con la exposici¨®n Historia de la fotograf¨ªa en Espa?a. Fotograf¨ªa y sociedad desde sus or¨ªgenes hasta el siglo XXI, que de forma cronol¨®gica ocupa las cuatro salas del C¨ªrculo de Bellas Artes. En la muestra, que tendr¨¢ una itinerancia nacional e internacional, han colaborado el Ministerio de Cultura, el Centro Andaluz de la Fotograf¨ªa, la empresa Lafarge Asland y la Caja Castilla-La Mancha.
El esfuerzo de recuperaci¨®n de la historia gr¨¢fica de Espa?a por parte de L¨®pez Mond¨¦jar fue destacado ayer por Juan Carlos Luna, presidente de Lunwerg, editorial que cumple 25 a?os con una dedicaci¨®n preferente a la fotograf¨ªa. "Es el primer libro global sobre la fotograf¨ªa en Espa?a, y no hay otro trabajo parecido en otros pa¨ªses, con una revisi¨®n de los contenidos y donde se valora m¨¢s la calidad de las im¨¢genes. El cat¨¢logo, con 750 p¨¢ginas y 600 im¨¢genes, es una referencia desde una perspectiva gr¨¢fica y de an¨¢lisis de la sociedad". Junto con la exposici¨®n se realizar¨¢n unos talleres sobre laboratorio, iluminaci¨®n y retrato, t¨¦cnicas antiguas y c¨¢maras estenopeicas, y se prepara un audiovisual con m¨¢s informaci¨®n sobre el proyecto.
Reportaje del pasado
El fotohistoriador Publio L¨®pez Mond¨¦jar, autor de obras como Cr¨®nica de la luz (1984), Memoria de Madrid (1985), Visiones del deporte (1991), Luis Escobar, fot¨®grafo de un pueblo (2002), Alfonso, cincuenta a?os de historia de Espa?a (2003) y La huella de la mirada (2003), plantea ahora una revisi¨®n de Las fuentes de la memoria desde el punto de vista del periodista para realizar un "reportaje del pasado" desde una posici¨®n subjetiva.
"Investigar sobre la fotograf¨ªa espa?ola es mucho m¨¢s que llorar", declar¨® ayer al comentar la situaci¨®n en que se encontraban los archivos oficiales y particulares cuando empez¨® su investigaci¨®n en 1985, "con unas obras destruidas o que permanec¨ªan ocultas", en un pa¨ªs sin centros oficiales de fotograf¨ªa. "El tardofranquismo me llev¨® a Londres, y comprend¨ª que las fotos que se guardaban en las cajas de membrillo pod¨ªan servir para contar una historia", a?adi¨®.
El comisario de la exposici¨®n considera que propone "una historia poco acad¨¦mica y pol¨¦mica, como yo", una visi¨®n "heterodoxa" donde prima lo social. "Me intereso m¨¢s por la fotograf¨ªa no acad¨¦mica, la fotograf¨ªa fotogr¨¢fica, en lugar de las piezas mim¨¦ticas con la pintura, que se producen en los a?os ochenta y noventa, aunque por lo conceptual tengo un profundo respeto".
L¨®pez Mond¨¦jar defiende la fotograf¨ªa documental y de prensa, "despreciada y marginada por la fotograf¨ªa art¨ªstica, cuyos autores no les gustar¨ªa que se les llamara fot¨®grafos, y que forman m¨¢s parte de la historia del arte".
El montaje, que presenta la mitad de las obras in¨¦ditas, comienza en la sala Minerva, con la evoluci¨®n de la fotograf¨ªa con el daguerrotipo, desde las guerras carlistas hasta el desastre del 98 y termina con una toma de Javier Bauluz con un inmigrante muerto y dos ba?istas en la playa de Zahara de los Atunes. "Creo que es la realidad de Espa?a, con una cultura pujante pero tambi¨¦n con realidades duras y peligrosas. Muestro las cosas sobre todo con honestidad".
Las reproducciones de Clifford, Laurent, Napper y Nadar, de obras p¨²blicas, se unen a la primera generaci¨®n de espa?oles (Spreafico, Facio, Rodrigo), y a un retrato de cazador del infante don Sebasti¨¢n, uno de los 40 negativos (calotipo), hacia 1855, de la colecci¨®n Carlos Moren¨¦s, que han estado a punto de perderse. En la sala Goya hay una frase de Azor¨ªn sobre el "encanto indefinible" de las fotos deste?idas y amarillentas, para recoger la etapa entre 1900 y el final de la Guerra Civil en 1939, con paradas en el retratismo, el fotoperiodismo y la fotograf¨ªa popular, con obras de Kaulak, Franzen, Alfonso y Gombau, al lado de los experimentos de Ortiz-Echag¨¹e, una escena callejera de Ram¨®n y Cajal, los retratos de Valle-Incl¨¢n y Unamuno por Moreno, el soldado abatido de Robert Capa, la guerra de Centelles, las calles de Luis Escobar y carteles de Renau y Lekuona.
La sala Picasso concentra las im¨¢genes de la posguerra, la transici¨®n democr¨¢tica y los posmodernos, con las ¨²ltimas aportaciones de Madoz, Castro Prieto, C¨¢novas, Isabel Mu?oz, Garc¨ªa-Alix, Lobato y Bauluz. Tambi¨¦n est¨¢n "las caras negruzcas, las alpargatas de la pobreza, el horror de los uniformes y de las cabezas rapadas de las c¨¢rceles", como escribe Antonio Mu?oz Molina en el pr¨®logo del cat¨¢logo.
Para L¨®pez Mond¨¦jar son los fot¨®grafos que "no se han resignado a renunciar a lo real" y que ofrecen "una forma personal de mirar" sobre los acontecimientos pol¨ªticos y sociales. Est¨¢n hist¨®ricos como Catal¨¢-Roca, Miserachs, Paco G¨®mez, Sanz Lobato, Masats, Cuallad¨®, P¨¦rez Siquier, Pom¨¦s, Onta?¨®n, Schommer, Antonio Gabriel, junto a generaciones m¨¢s j¨®venes, como Garc¨ªa Rodero, Zabalza, Falces, Trillo, Navia, Fl¨®rez, Chamorro, Barriopedro, Mag¨¢n, Lobato, Manresa y D¨¢vila, entre otros.
La sala Juana Mord¨® es un recorrido por los grandes protagonistas de la exposici¨®n, los fot¨®grafos, con su herramienta de creaci¨®n, las c¨¢maras. Desde el daguerrotipo hasta la era digital, se muestran en vitrinas 30 c¨¢maras hist¨®ricas, de la colecci¨®n de Jos¨¦ Luis Mur, que tiene la mayor colecci¨®n de c¨¢maras Leica. Entre los aparatos hay una linterna m¨¢gica y una c¨¢mara de daguerrotipo de 1839, para terminar con la digital Fuji 500 con la que Pablo Torres sac¨® las fotos de la matanza del 11-M en Atocha, publicadas por EL PAIS, y por las que recibi¨® el premio Ortega y Gasset.
En otras vitrinas se han colocado postales y revistas y otros documentos que forman parte de la historia de la fotograf¨ªa en Espa?a. En las paredes, fot¨®grafos con sus c¨¢maras, como Gyenes, Catal¨¢-Roca, Ferrol, Centelles, Escobar, Schommer, Santos Yubero y Jordi Soc¨ªas.
Babelia
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