Fracasan en Francia dos huelgas seguidas del transporte
Dos huelgas, ambas centradas sobre los transportes p¨²blicos, han fracasado esta semana en Francia. Una, la de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF), que pretend¨ªa paralizar el pa¨ªs por sexta vez en lo que va de a?o, dur¨® un solo d¨ªa y tuvo un efecto muy limitado, ya que no fue secundada por m¨¢s de un 25% de los trabajadores. La otra, la de los transportes p¨²blicos de Marsella (RTM), se apagaba el jueves tras 46 d¨ªas de pesadilla para los habitantes de la segunda ciudad de Francia. Ambas, al menos te¨®ricamente, hab¨ªan sido convocadas por la misma raz¨®n: contra la supuesta privatizaci¨®n de los servicios p¨²blicos.
Abundan los chistes sobre las constantes huelgas en los servicios p¨²blicos en Francia. Seg¨²n una teor¨ªa muy extendida, los servidores del Estado, y en general quienes cobran del erario p¨²blico y tienen asegurado su puesto de trabajo, una buena pensi¨®n y disfrutan de los beneficios del Estado protector por excelencia, hacen huelga por el resto de trabajadores. Por lo general, los ciudadanos franceses muestran una gran comprensi¨®n cuando quedan abandonados en cualquier and¨¦n.
El fin de la resignaci¨®n
Pero esta resignaci¨®n parece ir desapareciendo, especialmente cuando las razones para detener el tr¨¢fico ferroviario son tan confusas como las del pasado martes. La "descarada privatizaci¨®n" de la SNCF que denunciaban los cuatro sindicatos convocantes fue desmentida por el propio presidente de la Rep¨²blica, Jacques Chirac, que se ofreci¨® como "garante" de que la SNCF no se privatizar¨¢.
Los sindicatos, argumentando que la privatizaci¨®n encubierta de la SNCF ya hab¨ªa comenzado con la subcontrataci¨®n de algunos trabajos de mantenimiento y con la entrada de capital privado en la financiaci¨®n de las nuevas l¨ªneas de TGV, mantuvieron la convocatoria. El mismo martes, tras una negociaci¨®n de cinco horas, los sindicatos se declaraban "satisfechos" con las concesiones de la direcci¨®n, que incluyen un aumento salarial del 0,3%.
Detr¨¢s de las seis huelgas protagonizadas por la SNCF este a?o hay un problema de fondo: la apertura del sector a la competencia. A partir del 1 de enero el transporte de mercanc¨ªas por ferrocarril quedar¨¢ liberalizado, y en este segmento la SNCF perdi¨® 380 millones de euros el a?o pasado. Tanto el Gobierno como los sindicatos saben que no pueden bloquear la directiva de la UE, pero los ferrocarriles franceses emplean a 185.000 personas y adem¨¢s se hacen cargo de 300.000 jubilados. El Estado tiene que aportar cada a?o 2.500 millones de euros para cubrir el d¨¦ficit de este sistema de pensiones.
El mismo jueves que deca¨ªa la huelga de la SNCF, los transportes p¨²blicos de Marsella volv¨ªan a funcionar tras una interminable huelga de 46 d¨ªas. La RTM se hab¨ªa plantado ante la decisi¨®n del Ayuntamiento de construir las nuevas l¨ªneas de tranv¨ªa en un consorcio con una empresa privada. Finalmente, con escasas concesiones, el alcalde de Marsella se sal¨ªa con la suya.
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