Gemelos

Los Estatutos de Autonom¨ªa son las normas fundacionales de las comunidades aut¨®nomas. La reforma que el Parlamento andaluz est¨¢ llevando a cabo implica la actualizaci¨®n de nuestros derechos auton¨®micos. El Estatuto es la expresi¨®n del derecho al autogobierno. En el caso de Andaluc¨ªa el grupo socialista insiste en que, este autogobierno, no tiene otros l¨ªmites que la Constituci¨®n. Trata de actualizar y desarrollar sus preceptos conforme a la norma constitucional. Con este arranque y con este objetivo no se entiende que el PP-A siga dando la espalda a la reforma; que no se comprometa en el debate estatutario. No hay razones constitucionales que amparen este posicionamiento pol¨ªtico. Puede haberlas -y las hay, desde la ¨®ptica constitucional- en el debate catal¨¢n. No en el andaluz. Sin embargo sigue sin participar. Las directrices del PP a nivel nacional marcan sus l¨ªmites en Andaluc¨ªa. Subordinan los intereses andaluces a los de su grupo. Antes, cuando gobernaban en el Estado, mandaron el decretazo y olvidaron la deuda hist¨®rica. Entonces call¨® Te¨®fila Mart¨ªnez. Ahora Arenas trata de hacer ver lo contrario. Dice que no se protegen los intereses de Andaluc¨ªa.

A veces no encuentro diferencias entre Carod y Arenas. ?sta es una de ellas. Aqu¨¦l dice que la propuesta de Estatuto de Autonom¨ªa catal¨¢n ha aflorado el anticatalanismo que hay en el resto de Espa?a. ?ste, que no se respetan los intereses andaluces. Ambos confunden, desde sus sentimientos, que ni son Catalu?a ni sus deseos, los intereses andaluces. El anticatalanismo lo genera Carod y su desprecio por lo no catal¨¢n y el ¨²nico que perjudica a Andaluc¨ªa es quien no participa en el fortalecimiento de su autogobierno, quien lidera el mayor grupo de la oposici¨®n y se inhibe en la reforma estatutaria. No resulta, pues, nada extra?o que el sondeo que El Correo de Andaluc¨ªa ha publicado esta semana diga que el PSOE saque m¨¢s de 15 puntos al PP. Un PP que lideran quienes han venido empujados a Andaluc¨ªa y siguen una estrategia pol¨ªtica basada en los enfrentamientos y en las mentiras. Una estrategia que, cada d¨ªa m¨¢s, descansa en la ideolog¨ªa que ense?a una FAES que, m¨¢s que una fundaci¨®n, parece la aut¨¦ntica secretar¨ªa general de este anciano PP, en el que algunos hacen de la nostalgia sus sue?os de gobierno.