Tailandia lucha por recuperar el turismo
El Gobierno de Bangkok cifra las p¨¦rdidas sufridas por el sector debido al 'tsunami' en m¨¢s de 700 millones de euros
Reidun Rokne, una turista noruega de 42 a?os, aprovecha los ¨²ltimos momentos del d¨ªa en la playa de Patong, uno de los para¨ªsos tur¨ªsticos del sur de Tailandia, en la isla de Phuket. El sol se est¨¢ ocultando. Una brisa c¨¢lida sopla sobre la arena. Los cocoteros se elevan desafiantes tras la l¨ªnea de playa. Un grupo de j¨®venes juega al voleibol. "No, no tengo miedo. Aunque quiz¨¢s dentro de m¨ª, pienso en ello, en lo que ocurri¨®", dice.
Unos metros m¨¢s all¨¢, Alan Drayton, de 53 a?os, lee un libro frente al mar. "No, no tengo miedo en absoluto. He venido a hacer submarinismo", asegura este profesor australiano, que estaba en Bali (Indonesia) durante los atentados terroristas de 2002, en los que murieron 202 personas.
Rokne y Drayton, que ya conoc¨ªan Phuket, son dos de los miles de turistas que han decidido pasar unos d¨ªas de vacaciones en Tailandia esta Navidad a pesar del tsunami que el 26 de diciembre del a?o pasado devast¨® playas, destruy¨® complejos hoteleros y provoc¨® 5.395 muertos y m¨¢s de 2.800 desaparecidos en el pa¨ªs, y cerca de 230.000 v¨ªctimas mortales en Asia.
Desde entonces, Tailandia, que obtiene el 6,5% del PIB del turismo, est¨¢ lanzada a una carrera fren¨¦tica para recuperar las zonas tur¨ªsticas, alejar el fantasma del maremoto y atraer unos visitantes que son imprescindibles para la econom¨ªa local. "Para ello, hemos reconstruido las infraestructuras da?adas y hemos desarrollado un plan de promoci¨®n internacional", explica Udomsak Uswarangkura, gobernador de la provincia de Phuket. El Gobierno cifra las p¨¦rdidas sufridas por el sector en 745 millones de d¨®lares.
En Patong, apenas quedan signos visibles de la devastaci¨®n, salvo algunas viviendas semiderruidas y algunas pilas de escombros ocultas tras los edificios del paseo mar¨ªtimo. En esta playa, el agua penetr¨® varios centenares de metros, incrust¨® coches y barcas en las viviendas, y destruy¨® bares, restaurantes y locales situados en primera y segunda l¨ªneas de playa, sembrando cad¨¢veres a su paso. Donde hace poco menos de un a?o hab¨ªa comercios reventados, ahora brillan las luces y los recuerdos tur¨ªsticos. Donde las calles eran un cenagal, en el que se acumulaban restos de ropa, frigor¨ªficos y maniqu¨ªes, ahora hay asfalto y aceras reci¨¦n pavimentadas. Donde entonces flotaba el olor nauseabundo de la carne putrefacta de los restaurantes afectados y del pescado, ahora flota el olor de la pintura fresca. Los neones lucen en la noche, la m¨²sica se escapa de las discotecas. Los turistas vuelven a pasear de la mano de j¨®venes tailandesas, los perros dormitan bajo los ¨¢rboles.
Pero, a pesar del esfuerzo de las autoridades y de que algunos visitantes llegan para impulsar la recuperaci¨®n de Phuket -"como hicieron en Bali", dice Drayton-, el nivel de ocupaci¨®n es inferior al del a?o pasado por estas fechas. "Estamos en un 65%, y despu¨¦s de Nochebuena esperamos llegar al 80%, cuando normalmente es del 95%", se?ala Pattanapong Aikwanich, presidente de la Asociaci¨®n Tur¨ªstica de Phuket. Los due?os de comercios y bares son menos optimistas. "El negocio no va bien. Pero el a?o pasado, este libro de reservas me duraba dos o tres d¨ªas, y ahora me dura un mes", afirma Woranuch Sukjang, una joven de 27 a?os, de la agencia Magnolia Travel.
"Yo no s¨¦ de d¨®nde saca el Gobierno que el turismo va muy bien. ?D¨®nde est¨¢ la gente?", se queja Sombat Thawises, due?o de Ned Kelly's, un bar irland¨¦s abierto en 1993. "Este a?o ha sido muy duro. Arreglar los destrozos me cost¨® 200.000 baht, y eso que lo hice con familiares. El seguro dijo que no hab¨ªan sido causados por una inundaci¨®n sino por el terremoto
[que origin¨® el tsunami]". Unos locales m¨¢s arriba, una tienda ofrece fotograf¨ªas, camisetas y DVD del maremoto. Al lado, un cartel anuncia: Tatuajes Tsunami.
Los efectos del desastre son m¨¢s evidentes en otras playas de la zona. En Khao Lak (provincia de Phang Nga), 80 kil¨®metros al norte de Phuket, fueron barridos 60 hoteles. El 80% de las v¨ªctimas de Tailandia se produjeron en esta provincia, donde la masa de agua lleg¨® a alcanzar una altura de 10 metros (el equivalente a tres pisos). Los obreros trabajan a todo ritmo levantando restaurantes y bungalows frente una playa en la que apenas se ven turistas. En el tronco de una palmera est¨¢ clavada la foto de una pareja y dos ni?os suecos. Los clavos est¨¢n oxidados. Al lado, una piscina semillena, rodeada de hierbas, es lo ¨²nico que queda de un antiguo hotel.
Pocos kil¨®metros al norte de Patong, en Kamala, la situaci¨®n es mejor. Muchos extranjeros toman el sol, mientras una excavadora trabaja en el paseo. Siam Matthitanont, de 40 a?os, que fue arrastrado un kil¨®metro tierra adentro, ha levantado de nuevo su restaurante, a pie de playa. "Durante cuatro meses, me despertaba cada noche nadando en la cama", dice sin dejar de trabajar este hombre, que luch¨® durante dos horas hasta que logr¨® salir por s¨ª mismo de la arena bajo la que qued¨® sepultado.
El Gobierno tailand¨¦s est¨¢ instalando 62 torres dotadas con sirenas y altavoces a lo largo de la costa, para avisar a la gente en caso de que se produzca un nuevo maremoto. La mitad han sido ya completadas, y el resto estar¨¢ listo en marzo del a?o que viene. En las zonas de playa han sido colocados, tambi¨¦n, carteles que marcan la ruta de evacuaci¨®n en caso de emergencia. Los expertos aseguran que la existencia en el oc¨¦ano ?ndico de un sistema de vigilancia de maremotos similar al que existe en el Pac¨ªfico podr¨ªa haber salvado decenas de miles de vidas el a?o pasado. "Muchas cosas han cambiado, pero todo sigue igual", asegura Matthitanont.
Amenaza de atentados
El Gobierno tailand¨¦s va a celebrar el pr¨®ximo lunes actos conmemorativos en siete playas de la zona, a los que se prev¨¦ que asista el primer ministro, Thaksin Shinawatra. Bangkok ha cursado una invitaci¨®n -que incluye el viaje y dos noches de hotel- para un familiar directo de cada uno de los fallecidos y para los supervivientes que estuvieron ingresados en hospitales. Siete espa?oles han aceptado, seg¨²n la Embajada espa?ola en Bangkok. A partir del d¨ªa siguiente, habr¨¢ una semana de conciertos y otros eventos, para promocionar el turismo.
Tailandia ha aumentado las medidas de seguridad, ante la posibilidad, evocada por los servicios de inteligencia australianos, de que se produzca un ataque terrorista. "Es mucho m¨¢s probable que haya un atentado a que ocurra otro tsunami", afirma Reidar Ostensen, un canadiense que lleva varios d¨ªas recorriendo la regi¨®n en busca de oportunidades de negocio. Un total de 5.000 polic¨ªas y soldados ser¨¢n desplegados para garantizar la seguridad.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.